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Repasando Rumores del Saber XII

Autor por Emilio Silvera    ~    Archivo Clasificado en Astronomía y Astrofísica    ~    Comentarios Comments (5)

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Una molécula es mayor y más fácil de desmembrar que un átomo; lo mismo podemos decir de un átomo respecto al núcleo atómico, y de un núcleo con respecto a los quarks que contiene.

La cosmología  sugiere que esta relación resulta del curso de la historia cósmica, que los quarks se unieron primero, en la energía extrema del big bang original, y que a medida que el Universo se expandió, los protones y neutrones compuestos de quarks se unieron para formar núcleos de átomos, los cuales, cargados positivamente, atrajeron a los electrones cargados con electricidad negativa estableciéndose así como átomos completos, que al unirse formaron moléculas.

Si es así, cuanto más íntimamente examinemos la Naturaleza, tanto más lejos hacia atrás vamos en el tiempo.   Alguna vez he puesto el ejemplo de mirar algo que no es familiar, el dorso de la mano, por ejemplo, e imaginemos que podemos observarlo con cualquier aumento deseado.

Con un aumento relativamente pequeño, podemos ver las células de la piel, cada una con un aspecto tan grande y  complejo como una ciudad, y con sus límites delineados por la pared celular.  Si elevamos el aumento, veremos dentro de la célula una maraña de ribosomas serpenteando y mitocondrias ondulantes, lisosomas esféricos y centríolos, cuyos alrededores están llenos de complejos órganos dedicados a las funciones respiratorias, sanitarias y de producción de energía que mantienen a la célula.

Ya ahí tenemos pruebas de historia.  Aunque esta célula particular solo tiene unos pocos años de antigüedad, su arquitectura se remonta a más de mil millones de años, a la época en que aparecieron en la Tierra las células eucariota o eucarióticas como la que hemos examinado.

Para determinar dónde obtuvo la célula es esquema que le indicó como formarse, pasemos al núcleo y contemplemos los delgados contornos de las macromoléculas de ADN segregadas dentro de sus genes.  Cada una contiene una rica información genética acumulada en el curso de unos cuatro mil millones de años de evolución.

Almacenado en un alfabeto de nucleótidos de  cuatro “letras”- hecho de moléculas de azúcar y fosfatos, y llenos de signos de puntuación, reiteraciones para precaver contra el error, y cosas superfluas acumuladas en los callejones sin salida de la historia evolutiva-, su mensaje dice exactamente cómo hacer un ser humano, desde la piel y los huesos hasta las células cerebrales.

Si elevamos más el aumento veremos que la molécula de ADN está compuesta de muchos átomos, con sus capas electrónicas externas entrelazadas y festoneadas en una milagrosa variedad de formas, desde relojes de arena hasta espirales ascendentes como largos muelles y elipses grandes como escudos y fibras delgadas como puros.  Algunos de esos electrones son recién llegados, recientemente arrancados átomos vecinos; otros se incorporaron junto a sus núcleos atómicos hace más de cinco mil millones de años, en la nebulosa de la cual se formó la Tierra.

Si elevamos el aumento cien mil veces, el núcleo de un átomo de carbono se hinchará hasta llenar el campo de visión.   Tales núcleos átomos se formaron dentro de una estrella que estalló mucho antes de que naciera el Sol.  Si podemos aumentar aún más, veremos los tríos de quarks que constituyen protones y neutrones.

Los quarks han estado unidos desde que el Universo sólo tenía unos pocos segundos de edad.

Al llegar a escalas cada vez menores, también hemos entrado en ámbitos de energías de unión cada vez mayores.  Un átomo puede ser desposeído de su electrón aplicando sólo unos miles de electrón-voltios de energía.  Sin embargo, para dispersar los nucleones que forman el núcleo atómico se requieren varios millones de electrón-voltios, y para liberar los quarks que constituyen cada nucleón se necesitaría cientos de veces más energía aún.

Introduciendo el eje de la historia, esta relación da testimonio del pasado de las partículas: las estructuras más pequeñas, más fundamentales están ligadas por niveles de energía mayores porque las estructuras mismas fueron forjadas en el calor del big bang.

Esto implica que los aceleradores de partículas, como los telescopios, funcionen como máquinas del tiempo.  Un telescopio penetra en el pasado en virtud del tiempo que tarda la luz en desplazarse entre las estrellas; un acelerador recrea, aunque sea fugazmente, las condiciones que prevalecían en el Universo primitivo.

El acelerador de 200 kev diseñado en los años veinte por Cockroft y Walton reproducía algunos de los sucesos que ocurrieron alrededor de un día después del comienzo del big bang.

Los aceleradores construidos en los años cuarenta y cincuenta llegaron hasta la marca de un segundo.  El Tevatrón del Fermilab llevó el límite a menos de una milmillonésima de segundo después del comienzo del Tiempo.  El nuevo supercolisionador superconductor proporcionara un atisbo del medio cósmico cuando el Universo tenía menos de una billonésima de segundo de edad.

Esta es una edad bastante temprana: una diez billonésima de segundo es menos que un pestañeo con los párpados en toda la historia humana registrada.  A pesar de ello, extrañamente, la investigación de la evolución del Universo recién nacido indica que ocurrieron muchas cosas aún antes,  durante la primera ínfima fracción de un segundo.

Todos los teóricos han tratado de elaborar una explicación coherente de los primeros momentos de la historia cósmica.  Por supuesto, sus ideas fueron esquemáticas e incompletas, muchas de sus conjeturas, sin duda, se juzgaran deformadas o sencillamente erróneas, pero constituyeron una crónica mucho más aclaradora del Universo primitivo que la que teníamos antes.

A los cien millones de años desde el comienzo del tiempo, aún no se habían formado las estrellas, si acaso, algunas más precoces.  Aparte de sus escasas y humeantes almenaras, el Universo era una sopa oscura de gas hidrógeno y helio, arremolinándose aquí y allá para formar protogalaxias.

A la edad de mil millones de años, el Universo tiene un aspecto muy diferente.  El núcleo de la joven Vía Láctea arde brillantemente, arrojando las sobras de cumulonimbos galácticos a través del oscuro disco; en su centro billa un quasar blancoasulado.  El disco, aún en proceso de formación, es confuso y está lleno de polvo y gas; divide en dos partes un halo esférico que será oscuro en nuestros días, pero a la sazón corona la galaxia con un brillante conjunto de estrellas calientes de primera generación.

Nuestras galaxias vecinas del supercúmulo de Virgo están relativamente cerca; la expansión del Universo aún no ha tenido tiempo de alejarlas a las distancias-unas decenas de millones de años-luz a las que las encontraremos ahora.   El Universo es aún altamente radiactivo.  Torrentes de rayos cósmicos llueven a través de nosotros en cada milisegundo, y si hay vida en ese tiempo, probablemente está en rápida mutación.

Hay algo que es conocido por el término técnico de desacoplamiento de fotones, en ese momento, la oscuridad es reemplazada por una deslumbrante luz blanca, ocurrió cuando el Universo tenía un millón de años.   El ubicuo gas cósmico en aquel momento se había enrarecido los suficientes como para permitir que partículas ligeras –los fotones- atraviesen distancias grandes sin chocar con partículas de materia y ser reabsorbidas.

(Hay gran cantidad de fotones en reserva, porque el Universo es rico en partículas cargadas eléctricamente, que generan energía electromagnética, cuyo cuanto es el fotón.)

Es esa gran efusión de luz, muy corrida al rojo y enrarecida por  la expansión del Universo, la que los seres humanos, miles de millones de años después, detectaran con radiotelescopios y la llamaran la radiación cósmica de fondo de microondas.

Esta época de “sea la luz” tiene un importante efecto sobre la estructura de la materia.  Los electrones, aliviados del constante acoso de los fotones, son ahora libres de establecerse en órbita alrededor de los núcleos, formando átomos de hidrógeno y de helio.

Disponiendo de átomos, la química puede avanzar, para conducir, mucho tiempo después, a la formación de alcohol y formaldehído en las nubes interestelares y la construcción de moléculas bióticas en los océanos de la Tierra primitiva.

La temperatura ambiente del Universo se eleva rápidamente cuanto más marchamos hacia atrás en el tiempo, a los cinco minutos del big bang es de 1.000 millones de grados kelvin.

Por elevada que se esta energía, a la edad de cinco minutos el Universo ya se ha enfriado lo suficiente para que los nucleones permanezcan unidos y formen núcleos atómicos.  Vemos a protones y neutrones unirse para formar núcleos de deuterio (una forma de hidrógeno), y a los núcleos de deuterio aparearse para formar núcleos de helio (dos protones y  dos neutrones).

De esta manera, un cuarto de toda la materia del Universo se combina en núcleos de helio, junto con rastros de deuterio, helio-3 (dos protones y un neutrón) y litio.   Todo el  proceso termina en tres minutos y veinte  segundos.

Por encima de este punto –antes de alrededor de un minuto y cuarenta segundos desde el comienzo del tiempo- no hay núcleos atómicos estables.  El nivel de energía en el ambiente es mayor que la energía de unión nuclear.

Por consiguiente, todos los núcleos que se forman, se destruyen de nuevo rápidamente.

Alrededor de un segundo desde el comienzo del tiempo, llegamos a la época de desacoplamiento de los neutrinos.  Aunque en esa época el Universo es más denso que las orcas (y tan caliente como la explosión de una bomba de hidrógeno), ya ha empezado a parecer vacío a los neutrinos.  Puesto que los neutrinos sólo reaccionan a la fuerza débil, que tiene un alcance extremadamente corto, ahora pueden escapar de sus garras y volar indefinidamente sin experimentar ninguna otra interacción.

Así, emancipados, en lo sucesivo son libres de vagar por el Universo a su manera indiferente, volando a través de la mayor parte  de la materia como sino existiese. (Diez trillones de neutrinos atravesarán sin causar daños el cerebro y el cuerpo del lector en el tiempo que le lleve leer esta frase.  Y en el tiempo en que usted haya leído esta frase estarán más lejos que la Luna).

De esa manera, oleadas de neutrinos liberados en un segundo después del big bang persiste aún después, formando una radiación cósmica de hondo de neutrinos semejante a la radiación de fondo de microondas producida por el desacoplamiento de los fotones.

Si estos neutrinos “cósmicos” (como se los llama para diferenciarlos de los neutrinos liberados más tarde por las supernovas) pudiesen ser observador por un telescopio de neutrinos de alguna clase, proporcionarían una visión directa del Universo cuando sólo tenía un segundo.

A medida que retrocedemos en el tiempo, el Universo se vuelve más denso y más caliente, y el nivel de  estructura que puede existir se hace cada vez más rudimentario.

Por supuesto, en ese tiempo, no hay moléculas, ni átomos, ni núcleos atómicos, y, a 10-6 (0.000001) de segundo después del comienzo del tiempo, tampoco hay neutrones ni protones.  El Universo es un océano de quarks libres y otras partículas elementales.

Si nos tomamos el trabajo de contarlos, hallaremos que por cada mil millones de antiquarks existen mil millones y un quark.  Esta asimetría es importante.  Los pocos quarks en exceso destinados a sobrevivir a la aniquilación general quark-antiquark formaran todos los átomos de materia del Universo del último día.  Se desconoce el origen de la desigualdad; presumiblemente obedezca a la ruptura de una simetría materia antimateria en alguna etapa anterior.

Nos aproximamos a un tiempo en que las estructuras básicas de las leyes naturales, y no sólo las de las partículas y campos cuya conducta dictaban, cambiaron a medida que evolucionó el Universo.

La primera transición semejante se produjo en los 10-11 de segundo después del comienzo del tiempo, cuando las funciones de las fuerzas débiles y electromagnéticas se regían por una sola fuerza, la electrodébil.  Ahora hay bastante energía ambiente para permitir la creación y el mantenimiento de gran número de bosones w y z.

Estas partículas – las mismas cuya aparición en el acelerador del CERN verificó la teoría electrodébil – son las mediadoras intercambiables en las interacciones de fuerzas electromagnéticas y débiles, lo que las hace indistinguibles.  En ese tiempo, el Universo está gobernando sólo por tres fuerzas: la gravedad, la interacción nuclear fuerte y la electrodébil.

Más atrás de ese tiempo nos quedamos en el misterio y envueltos en una gran nebulosa de ignorancia.  Cada uno se despacha a su gusto para lanzar conjeturas y teorizar sobre lo que pudo haber sido.   Seguramente, en el futuro, será la teoría M (de supercuerdas) la que contestará esas preguntas sin respuestas ahora.

En los 10-35 de segundo desde el comienzo del tiempo, entramos en un ámbito en el que las condiciones cósmicas son aún menos conocidas.  Si las grandes teorías unificadas son correctas, se produjo una ruptura de la simetría por la que la fuerza electronuclear unificada se escindió en las fuerzas electrodébil y las fuertes.  Si es correcta la teoría de la supersimetría, la transición puede haberse producido antes, había involucrado a la gravitación.

Elaborar una teoría totalmente unificada es tratar de comprender lo que ocurrió en ese tiempo remoto que, según los últimos estudios está situado entre 15.000 y 18.000 millones de años, cunado la perfecta simetría que, se pensaba, caracterizó el Universo, se hizo añicos para dar lugar a los simetrías rotas que hallamos a nuestro alrededor y que, nos trajo las fuerzas y constantes Universales que, paradójicamente, hicieron posible nuestra aparición para que ahora, sea posible que, alguien como yo esté contando lo que pasó.

Pero hasta que no tengamos tal teoría no podemos esperar comprender lo que realmente ocurrió en ese Universo bebé.  Los límites de nuestras conjeturas actuales cuando la edad del Universo sólo es de 10-43 de segundo, nos da la única respuesta de encontrarnos ante una puerta cerrada.

Del otro lado de esa puerta está la época de Plank, un tiempo en que la atracción gravitatoria ejercida por cada partícula era comparable en intensidad a la fuerza nuclear fuerte.

Así que, llegados a este punto podemos decir que la clave teórica que podría abrir esa puerta sería una teoría unificada que incluyese la gravitación.

La persona que llegue a esa teoría llegará a la mayor profundidad en la contemplación del alba del tiempo.

¿Qué es lo que verá?

Creo, en mi ignorancia, que verá más puertas cerradas.

Tendremos que esperar un poco para que alguien pueda describirnos el Universo como era con menos de 10-43 de segundo, ya que,  el nivel de energía ambiente era mayor de 1019 GeV, y recrear tales condiciones exigiría un acelerador un trillón de veces más poderoso que el más moderno proyectado hasta el momento.  No digo que la verificación de tal teoría unificada pudiera estar eternamente fuera del alcance del hombre, pero casi, ya que, de ser posible algún día, ese día estaría situado lejos, muy lejos en el futuro.

Claro que, ¡somos tan curiosos!

¿Quién o qué nos podrá parar?

emilio silvera

 

  1. 1
    Evelio
    el 12 de septiembre del 2010 a las 21:41

    Hola, te mando un saludo después de haber leído la columna sobre la formación del universo en este blog, que he conocido a través del Facebook por medio de María, tu hija.
     
    Me gustan mucho estos temas, y los leo y veo en documentales. Ahora estoy leyendo la Física de lo imposible de Michio Kaku, un físico teórico americano  que creo que es de lo mejor en la actualidad.
    Espero que María saque bien  sus exámenes de clave.
    Mucho ánimo para que sigas escribiendo tan estupendamente.
    Evelio.

    Responder
    • 1.1
      emilio silvera
      el 14 de septiembre del 2010 a las 11:50

      Amigo Evelio, Maria salio del trance final del examen de Clave con muy buena nota y ya tiene su titulo del Real Conservatorio Superior de Musica de Madrid.

      Te aconseja que leas, de Michio Kaku, su libro Hiperespacio, es esclarecedor y mezcla la Fisica clasica con la moderna de manera tal que el conjunto es de una sugestiva belleza que te engancha.

      Por lo demas, el saber nunca estorba, asi que, cuando tengas un ratito te pasas por aqui y, de seguro que algo se te quedara.

      Un abrazo. 

      Responder
  2. 2
    Zephyros
    el 14 de septiembre del 2010 a las 1:15

    Una pregunta Emilio, creo entender que en cierta etapa en el nacimiento del Universo (unos 5min aprox) las condiciones de presión y temperaturas eran tales que a partir de los primeros átomos de H se pudieron formar ingentes cantidades de núcleos de He y deuterio, entiendo que los electrones bailaban demasiado todavía y permanecían sin pareja. Mi pregunta es ¿por qué no se generaron núcleos más pesados? ¿no hay Fe, C, Si… primigenios?

    Porque aunque la expansión fuera rápida si dio tiempo a formar tanto Helio, también debería haber dado tiempo a formarse  otros elementos (metálicos), aunque fuera en una proporción evidentemente muy inferior a la Nobleza.

    Saludos!

    Responder
    • 2.1
      Zephyros
      el 14 de septiembre del 2010 a las 1:21

      Releyéndome, sólo se me ocurre que el baile de partículas era tal que se producían fisiones de esos elementos más pesados,  que se podrían haber formado, al chocar con electrones y elementos ligeros como las partículas alfa que se iban creando. Es lo que me parece lógico a simple vista…

      Responder
    • 2.2
      emilio silvera
      el 14 de septiembre del 2010 a las 11:45

      Estimado amigo:

      El Hierro, Carbono y Silicio, ademas de otros elementos complejos, solo se formaron en las estrellas. Como muy bien dices, en los primeros momentos las condiciones reinantes hicieron posible la presencia de Hidrogeno, Helio, Deuterio, Litio…pero, poco mas. Extrañamente la invesrtigacion del Universo recien nacido indica que ocurrieron muchas cosas en las primeras fracciones de segundo. Los teoricos han tratado de elaborar una explicacion coherente de esos primeros momentos de la historia cosmica. Sin embargo, la cosa no era nada facil pero, pudieron constituir una cronica mucho mas aclaradora del universo primitivo que la que se tenia solo una decada antes.

      Mencionas las condiciones que podia tener el Universo cuando tenia 5 minutos de edad. En ese tiempo, el universo ya se habia enfriado lo suficiente para permitir que los nucleos permanecieran unidos formando los nucleos atomicos y, de esa manera, protones y neutrones se unieron para formar nucleos de deuterio, y a los nucleos de deuterio aparearse para formar nucleos de helio (dos protones y dos neutrones). De esta manera, un cuarto de toda la materia del universo se combina en nucleos de helio, junto con rastros de deuterio, helio 3 (dos protones y un neutron) y litio. todo el proceso termina en 3 minutos.

      Por encima de este punto -antes de alrededor de un minuto y cuarenta segundos despues del Big Bang, no hay nucleos atomicos estables. El nivel de energia ambiente es mayor que la energia de union nuclear. Por consiguiente, todos los nucleos que se forman, se destruyen de nuevo rapidamente.

      Alrededor de un segundo, nos encontramos con la epoca del desacoplamiento de los neutrinos. Aunque en ese tiempo el universo es mas denso que las rocas (y tan caliente como la explosion de una bomba de hidrogeno, ya ha empezado a parecer vacio a los neutrinos. Puesto que los neutrinos solo reaccionan a la fuerza debil, que tiene un alcance extremadamente corto, ahora pueden escapar de sus garras y volar indefinidamente sin experimentar ninguna otra interaccion.

      Esta claro que, a medida que nos acercamos al momento del Big Bang, el universo continuara volviendose cada vez mas caliente y mas denso, y el nivel de estructura que puede existir se hace cada vez mas rudimentario. Por supuesto, no hay moleculas,  ni atomos, ni nucleos atomicos en ese tiempo temprano, y, por supuesto, los protones y los neutrones aun no hicieron acto de presencia. El Universo era un oceano de Quarks libres y otras particulas elementales.

      Dejare de lado la asimetria de los Quarks y antiquarks que dieron lugar a la destruccion reciproca y dejo solo el excedente de quarks que dieron lugar a la formacion de todos los atomos de la materia del universo (no se conoce el origen de tal desigualdad entre materia y antimateria).

      Tampoco parece que sea el momento de hablar de la supuesta unica fuerza que reino en aquellos primeros momentos y que, al enfriarse el Universo, se dividio en las cuatro fuerzas de la Naturaleza que hoy nos rigen. Cuando la edad del Universo solo es de 10¯43 de segundo, nos encontramos con la puerta cerrada de la epoca de Planck, un tiempo en que la atraccion gravitatoria ejercida por cada particula era comparable en intensidad a la fuerza nuclear fuerte.

      De esta manera, transcurrido el tiempo suficiente para que se pudieran formar las primeras estrellas, y, tras esperar algunos miles de millones de años, se pudieron al fin, formar los elementos que mencionas y que, en el universo primitivo estavieron ausentes.

      Perdona si me enrolle demasiado.

      Un saludo cordial.

      Responder

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