Mar
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Japón: Un Año Después
por Emilio Silvera ~ Clasificado en General ~ Comments (0)
Detectan radiación
La radiactividad causada por el desastre de una planta nuclear en Japón el año pasado ha sido detectada hasta una distancia de 643 kilómetros (400 millas) mar adentro en el Océano Pacífico. Los científicos dijeron que las aguas del océano revelaron niveles de hasta mil veces más la sustancia cesio 137, procedente de la planta nuclear de Fukushima. Pero, recordemos lo que pasó.
Días después del doble desastre, un terremoto de magnitud 9 y un maremoto que barrió innumerables pueblos del litoral nororiental del Japón, millones de personas sobreviven con escasa comida y agua, sin calefacción bajo gélidas temperaturas, en medio de una crisis nuclear sin precedente. Miles perdieron sus viviendas y el número de muertos y desaparecidos supera los 11.000.
Actualmente, unas 450.000 personas viven en albergues temporales, en muchos casos durmiendo en el suelo de gimnasios escolares.
Mar
12
¿Aquellos Viajeros! La Aventura, descubrir…
por Emilio Silvera ~ Clasificado en General ~ Comments (0)
Todavía no sabemos con certeza dónde surgió por primera vez el cero, y el concepto de nada, de vacío, llegaron los mayas de manera independiente. Algunos sitúan la aparición del cero en China. No obstante, nadie discute la influencia india, y todo aparece indicar que fueron ellos los primeros que emplearon a la vez los tres nuevos elementos en que se funda nuestro actual Sistema numérico:
- una base decimal,
- una notación posicionad y cifras para diez, y
- sólo diez, numerales. Y esto ya establecido en 876.
En algún momento se dio por hecho que el cero provenía originalmente de la letra griega omicrón, la inicial de la palabra ouden, que significa “vacío”.
Estamos comentando hechos y sobre personajes que, en distintas épocas y partes del mundo, hicieron posible el avance de nuestros conocimientos, todos y todo contribuyó a ello, cada cosa y cada personaje en su medida, pero todos y todo junto, lo hizo posible. Hoy nosotros, podemos aprender de todo aquello, y podemos saber como llegaos a conseguir los conocimientos que tenemos en muchos aspectos de nuestras experiencias transmitidas por estudiosos de hace muchos siglos.
Aquellos hombres arriesgaban sus vidas por saber, fueron muchos de los clásicos griegos los pertenecientes a este grupo viajero, y, a pesar del riesgo que ello conllevaba, viajaban a lugares lejanos buscando saber de matemáticas o de astronomía.
También proliferaban los viajeros guerreros y aventureros. Los mercaderes y comerciantes, por aquellos tiempos, fueron el ejemplo de hombres viajeros audaces que, buscando fortuna eran capaces de llegar hasta el fin del mundo (como se solía decir entonces).
Columnas de Hércules. En lo que hoy conocemos como el Estrecho de Gibraltar, donde se unen el Mar Mediterráneo con el Océano Atlántico, en una punta Tarifa, un pueblecito de Cádiz (Andalucía) en España y, en la otra punta, Marruecos. En cada uno de estos extremos, dicen los antiguos fenicios y griegos que estaban las Columnas de Hércules.
Mar
12
Varias cosas
por Emilio Silvera ~ Clasificado en Astronomía y Astrofísica ~ Comments (0)
He asistido no pocas veces (hace menos de dos meses fue la última vez), a conferencias de Físicos y Astrónomos que, siendo personas preparadas, se empeñan en contarnos las cosas de manera complicada, lo enrevesan todo y, no tienen en cuenta que, los oyentes, no siempre son personas versadas en esos complejos temas. Por mi parte, soy menos complicado y como rige el principio de la física conocida como Navaja de Occam, creo en un camino más simple y sencillo, hay que explicar las cosas de la manera más sencilla posible: El universo, en sus comienzos, produjo enormes cantidades de partículas de materia y de antimateria, y el número de una y otra no era igual sino que, no se sabe por qué razón, las partículas positivas eran más que las negativas.
Todos sabemos que un protón, cuando se encuentra con un antiprotón (materia con antimateria) ambos se destruyen. Una vez destruidos todos los pares materia antimateria, quedó el sobrante de partículas positivas que es la materia de nuestro universo. De esa manera se formaron, con esas partículas positivas y los electrones (hadrones y leptones), se originaron grandes conglomerados de gas y polvo que giraban lentamente, fragmentándose en vórtices turbulentos que se condensaban finalmente en estrellas.
Mar
12
¡La Luz! ¿Qué haríamos sin ella?
por Emilio Silvera ~ Clasificado en Física ~ Comments (6)
En algún otro co0mentario he comentado: “Las partículas alfa emitidas por un nucleido particular poseían iguales energías en cantidades inesperadas. En ese caso, ¿qué era errónea en la emisión de partículas beta? ¿Qué había sucedido con la energía perdida?”
El mundo actual se encuentra sumido en una gran revolución sociocultural basada en la ciencia y la tecnología. Ahora hablamos con normalidad de nanotecnologías basadas en el Grafeno que dejan hacer maravillas impensables hasta hace muy poco tiempo.
Las partículas Alfas son átomos de He doblemente ionizados, es decir, que han perdido sus dos electrones. Por tanto, tienen dos neutrones y dos protones. Es la radiación característica de isótopos de número atómico elevado, tales como los del uranio, torio, radio, plutonio. Dada la elevada masa de estas partículas y a que se emiten a gran velocidad por los núcleos (su velocidad es del orden de 107m/s), al chocar con la materia pierden gradualmente su energía ionizando los átomos y se frenan muy rápidamente, por lo que quedan detenidas con tan sólo unos cm de aire o unas milésimas de mm de agua. En su interacción con el cuerpo humano no son capaces de atravesar la piel. Así pues, tienen poco poder de penetración siendo absorbidos totalmente por una lámina de aluminio de 0.1 mm de espesor o una simple hoja de papel.
Las partículas beta son electrones emitidos a grandes velocidades próximas a la de la luz. Debido a la menor masa que la radiación alfa, tienen más poder de penetración que las partículas alfa siendo absorbidas por una lámina de aluminio de 0.5 mm de espesor y quedan frenadas en algunos m de aire, o por 1 cm de agua. En el cuerpo humano, pueden llegar a traspasar la piel, pero no sobrepasan el tejido subcutáneo. Los positrones son partículas con masa despreciable y carga equivalente a la de un protón.
Las partículas gamma son radiaciones electromagnéticas de la misma naturaleza que los rayos X pero de menor longitud de onda. Su poder de penetración es muy elevado frente al de las partículas alfa o beta, pudiendo atravesar el cuerpo humano. Quedan frenadas con espesores de 1 m de hormigón o unos pocos cm de plomo, por lo que cuando se utilizan fuentes radiactivas que emiten este tipo de radiación, hay que utilizar blindajes adecuados.
Los neutrones proceden de reacciones de fisión o de reacciones nucleares con otras partículas. Pueden ser muy penetrantes excepto en agua y en hormigón, y se utilizan para producir elementos radiactivos cuando interaccionan con elementos estables.
Los neutrinos son partículas de lo más extrañas: no tienen carga eléctrica, prácticamente no tienen masa y pueden viajar largas distancias atravesando todo a su paso y sin desviarse. De hecho, varios neutrinos pueden haber atravesado tu cuerpo mientras leías este párrafo. De verdad.
Son partículas “fantasma” producidas en los profundos infiernos estelares, en el corazón de las supernovas y en las explosiones de estrellas moribundas. Suena dramático, y lo es. Tienen una masa 200.000 veces menor que la del electrón, por lo que pueden traspasar la materia como si estuvieran en otro mundo, pero están en este.
La energía es la capacidad que tiene un sistema para producirtrabajo; se mide en Joules. A pesar de ser un fenómeno único puede manifestarse de varias formas: Mecánica, Eléctrica, Calórica, etc; y pueden transformarse unas en otras. Esta transformación de las energías se los llamaPrincipio de conservación de la Energía, pero ¿Qué es el Principio de conservación de la Energía? Esto es una ley de la relatividad, según la cual la energía ni se crea ni se destruye, solo se transforma.
En 1.922, Lise Maitner se hizo por primera vez esta pregunta, y, hacia 1.930, Niels Bohr estaba dispuesto a abandonar el gran principio de conservación de la energía, al menos en lo concerniente a partículas subatómicas. En 1.931, Wolfgang Pauli sugirió una solución para el enigma de la energía desaparecida.
Claro que, hay mucha materia perdida.
Tal solución era muy simple: junto con la partícula beta del núcleo se desprendía otra, que se llevaba la energía desaparecida. Esa misteriosa segunda partícula tenía propiedades bastante extrañas. No poseía carga ni masa. Lo único que llevaba mientras se movía a la velocidad de la luz era cierta cantidad de energía. A decir verdad, aquello parecía un cuerpo ficticio creado exclusivamente para equilibrar el contraste de energías.
Sin embargo, tan pronto como se propuso la posibilidad de su existencia, los físicos creyeron en ella ciegamente. Y esta certeza se incrementó al descubrirse el neutrón y al saberse que se desintegraba en un protón y se liberaba un electrón, que, como en la decadencia beta, portaba insuficientes cantidades de energía. Enrico Fermi dio a esta partícula putativa el nombre de “neutrino”, palabra italiana que significa “pequeño neutro”.