domingo, 24 de noviembre del 2024 Fecha
Ir a la página principal Ir al blog

IMPRESIÓN NO PERMITIDA - TEXTO SUJETO A DERECHOS DE AUTOR




Lunas que debemos estudiar

Autor por Emilio Silvera    ~    Archivo Clasificado en Exploración de los mundos    ~    Comentarios Comments (1)

RSS de la entrada Comentarios Trackback Suscribirse por correo a los comentarios

        Sí, aunque no lo parezca, esta de arriba es Io, la pequeña Luna más activa del Sistema Solar

hoy, arriba se nos muestran a la luna Io que es el tercer satélite más grande de Júpiter, con un diámetro de 3.630 Km, es el más interior delos cuatro satélites galileanos; también conocido como Júpiter I. Orbita en 1.769 días a una distancia de 422 000 km, manteniendo la misma cara hacia Júpiter.

La sonda espacial Voyager reveló en 1979 que Io tiene volcanes en erupción que expulsan penachos de material a unos 70-280 km dealtura, cayendo parter de él hasta a 500 km del lugar de la erupción.

Las fuentes de estas erupciones son calderas volcánicaso fisuras,de las cuales hay más de 300. Inmensos flujos de lava radian desde muchos de los volcanes, y la totalidad de la superficie tiene color amarillo debido a los depósitos de azufre u óxidos de azufre.

Existen extensas llanuras y regiones montañosas en Io, aunque no cráteres de impacto, indicando que su superficie es muy joven geológicamente. La densidad de Io, 3,57 gr/cm3, sugiere que tiene un núcleo de hierro-azufre de unos 1 500 Km de radio y un manto de silicatos.

La actividad volcánica de Io es el resultado del calor liberado por las fuerzas de marea, que distorsionan el satélite a medida que se acerca o aleja de Júpiter en su orbita. La inmensa masa de Júpiter genera tanta fuerza de Gravedad que incide directamente en Io para darle su particular conformación física-geológica.

Ya que estamos con Io, podemos, de paso, hablar de otros satélites naturales del Sistema Solar.

Esta imagen artística representa a Europa durante el amanecer de la creación del Sistema Solar. En ese momento, lo que fueron océanos en otros tiempos salpicaban la superficie de Europa. Ya que el agua líquida existió en el pasado, ¿podría haber existido vida o incluso existir todavía hoy? Los principales ingredientes para la vida son el agua, el calor y compuestos orgánicos obtenidos de los cometas y meteoritos. Europa reúne las tres condiciones. A partir de las imágenes y los datos recogidos por la nave espacial Galileo, los científicos creen que existió un océano subsuperficial en una historia relativamente reciente y que podría estar presente todavía dejado de la superficie helada. El agua de Europa tuvo que congelarse hace mucho tiempo, pero podrían existir calentamientos debido a las tensiones mareales producidas por Júpiter y las lunas vecinas.

Europa, la hermosa hija de Agenor, el rey fenicio de Tiro que invadió Grecia y se hizo rey de Argos. Para nosotros hoy, Europa es una pequeño “planeta helado”, o luna de Júpiter, que podría contener alguna forma de vida en su secreto mar océano.

Los icebergs, esas enormes montañas de hielo desgajado que flotan en el mar y que adquirieron la fama a través de la tragedia del Titanic, ya no son el patrimonio exclusivo de nuestro planeta Tierra, también en Europa, gracias a la nave Galileo, desde 1997, sabemos que existen.

No estaría mal que en el futuro pudiéramos ver esta imagen tomada en Europa. a Luna de Júouter que tiene bajo ese hielo superficial, un gran océano salado que, como en la Tierra, podría estar plagado de vida

Aparte del planeta Marte, no existe otro lugar próximo a la Tierra sobre el que la ciencia tenga depositas tantas esperanzas de encontrar alguna forma de vida, y, aquí tenemos un aliciente extra, ya que en esta luna joviana ha ocurrido un proceso opuesto al del planeta rojo merced a su exploración. Mientras que los ingenios espaciales enviados por el hombre revelaron que la naturaleza marciana es mucho más hostil para la vida de lo que insinuaban los telescopios, las sondas Voyager y Galileo han encontrado en Europa el mejor candidato del Sistema Solar para albergar vida extraterrestre. Claro que, habiendo llegado Curiosity a Marte, habrá que esperar los resultados y…¿quién sabe? qué sorpresas nos podrían estar esperando.

Para los exobiólogos, los científicos que estudian la existencia de vida en otros lugares del Universo, Europa ha sido la gran revelación de finales del siglo XX, y Titán, una luna de Saturno que es la segunda más grande del Sistema Solar, constituye una gran incógnita que se desvelará cuando podamos, físicamente, enviar allí los ingenios que nos puedan contestar a la gran pregunta: ¿Existe vida en Europa? En lo que a Titán se refiere, la misión espacial Cassini-Huygens, ya nos ha proporcionado muchos y valiosos datos.

Leer más

Los secretos que la ciencia nos desvela

Autor por Emilio Silvera    ~    Archivo Clasificado en Física    ~    Comentarios Comments (4)

RSS de la entrada Comentarios Trackback Suscribirse por correo a los comentarios

Asimov, aquel enamorado de la Ciencia,en uno de sus miles de escritos nos decía:

“¿Por qué al calentar un metal se pone primero rojo, luego naranja, después amarilla, pero a continuación blanca, en lugar de seguir el espectro y ponerse verde?

En alguna ocasión todos hemos oído mencionar la palabra “Gases nobles”, y, sin embargo, no siempre sabemos lo que son y el por qué le llaman así.

Los elementos que reaccionan difícilmente o que no reaccionan en absoluto con otros elementos se denominan “inertes”. El nitrógeno y el platino son ejemplos de elementos inertes.

En la última década del siglo pasado se descubrieron en la atmósfera una serie de gases que no parecían intervenir en ninguna reacción química. Estos nuevos gases (Helio, neón, argón, kripton, xenón y radón) son más inertes que cualquier otro elemento y se agrupan bajo el nombre de gases inertes

Los elementos inertes reciben a veces el calificativo de “nobles” porque esa resistencia a reaccionar con otros elementos recordaba un poco a la altanería de la aristocracia. El oro y el platino son ejemplos de “metales nobles”, y por la misma razón se llaman a veces “gases nobles” a los gases inertes. Hasta 1.962, el nombre más común era el de gases inertes, quizá porque lo de nobles parecía poco apropiados en sociedades democráticas.

Leer más