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La Fisica, ¡que maravilla!
por Emilio Silvera ~ Clasificado en Física ~ Comments (9)
En el mundo de los seres vivos, la escala o tamaño crea importantes diferencias. En muchos aspectos, la anatomía de un ratón es una copia de la de un elefante, pero mientras que un ratón puede trepar por una pared prácticamente vertical sin mucha dificultad (y se puede caer desde una altura varias veces mayor que su propio tamaño sin hacerse daño), un elefante no sería capaz de realizar tal hazaña. Con bastante generalidad se puede afirmar que los efectos de la gravedad son menos importantes cuanto menores sean los objetos que consideremos (sean vivos o inanimados).
Cuando llegamos a los seres unicelulares, se ve que para ellos no hay distinción entre arriba y abajo. Para ellos, la tensión superficial del agua es mucho más importante que la fuerza de la gravedad a esa escala.
La tensión superficial es una consecuencia de que todas las moléculas y los átomos se atraen unos a otros con una fuerza que nosotros llamamos de Van der Waals. Esta fuerza tiene un alcance muy corto; para ser precisos, diremos que la intensidad de esta fuerza a una distancia r es aproximadamente 1/r7. Esto significa que si se reduce la distancia entre dos átomos a la mitad de la fuerza de Van der Waals con la que se atraen uno a otro se hace 2 × 2 × 2 × 2 × 2 × 2 × 2 = 128 veces más intensa. Cuando los átomos y las moléculas se acercan mucho unos a otros quedan unidos muy fuertemente a través de esta fuerza. El conocimiento de esta fuerza se debe a Johannes Diderik Van der Waals (1837 – 1923) con su tesis sobre la continuidad del estado líquido y gaseoso que le haría famoso, ya que en esa época (1873), la existencia de las moléculas y los átomos no estaba completamente aceptado.
La tensión superficial del agua, es el efecto físico (energía de atracción entre las moléculas) que “endurece” la capa superficial del agua en reposo y permite a algunos insectos, como el mosquito y otros desplazarse por la superficie del agua sin hundirse.
El famoso físico inglés James Clerk Maxwell, que formuló la teoría del electromagnetismo de Faraday, quedó muy impresionado por este trabajo de Van der Waals.
Los tamaños de los seres uniceculares, animales y vegetales, se miden en micrómetros o “micras”, donde 1 micra es 1/1.000 de milímetro, aproximadamente el tamaño de los detalles más pequeños que se pueden observar con un microscopio ordinario. El mundo de los microbios es fascinante, pero no es el objeto de este trabajo, y continuaremos el viaje emprendido hacia las partículas elementales que forman núcleos, átomos, células y materia, así como las fuerzas que intervienen en las interacciones fundamentales del universo y que afecta a todo lo que existe.
Hemos hablado del electrón que rodea el núcleo, de su carga eléctrica negativa que complementa la positiva de los protones y hace estable al átomo; tiene una masa de solamente 1/1.836 de la del núcleo más ligero (el del hidrógeno). La importancia del electrón es vital en el universo.
Pero busquemos los “cuantos”. La física del siglo XX empezó exactamente en el año 1900, cuando el físico alemán Max Planck propuso una posible solución a un problema que había estado intrigando a los físicos durante años. Es el problema de la luz que emiten los cuerpos calentados a una cierta temperatura, y también la radiación infrarroja emitida, con menor intensidad, por los objetos más fríos (radiación de cuerpo negro).
Estaba bien aceptado entonces que esta radiación tenía un origen electromagnético y que se conocían las leyes de la naturaleza que regían estas ondas electromagnéticas. También se conocían las leyes para el frío y el calor, la así llamada “termodinámica”, o al menos eso parecía. Pero si utilizamos las leyes de la termodinámica para calcular la intensidad de una radiación, el resultado no tiene ningún sentido. Los cálculos nos dicen que se emitiría una cantidad infinita de radiación en el ultravioleta más lejano y, desde luego, esto no es lo que sucede. Lo que se observa es que la intensidad de la radiación muestra un pico a una cierta longitud de onda característica, y que la intensidad disminuye tanto para longitudes mayores como para menores. Esta longitud de onda característica es inversamente proporcional a la temperatura absoluta de objeto radiante (la temperatura absoluta se define por una escala de temperatura que empieza a 273º bajo cero). Cuando a 1.000º C un objeto se pone al “rojo vivo”, el objeto está radiando en la zona de luz visible.
Radiación de Cuerpo Negro
Un cuerpo negro es un objeto teórico o ideal que absorbe toda la luz y toda la energía radiante que incide sobre él. Nada de la radiación incidente se refleja o pasa a través del cuerpo negro. A pesar de su nombre, el cuerpo negro emite luz y constituye un modelo ideal físico para el estudio de la emisión de radiación electromagnética. El nombre Cuerpo negro fue introducido por Gustav Kirchhoff en 1862.
La luz emitida por un cuerpo negro se denomina radiación de cuerpo negro. Todo cuerpo emite energía en forma de ondas electromagnéticas, siendo esta radiación, que se emite incluso en el vacío, tanto más intensa cuando más elevada es la temperatura del emisor. La energía radiante emitida por un cuerpo a temperatura ambiente es escasa y corresponde a longitudes de onda superiores a las de la luz visible (es decir, de menor frecuencia). Al elevar la temperatura no sólo aumenta la energía emitida sino que lo hace a longitudes de onda más cortas; a esto se debe el cambio de color de un cuerpo cuando se calienta. Los cuerpos no emiten con igual intensidad a todas las frecuencias o longitudes de onda, sino que siguen la ley de Planck.
Lo que Planck propuso fue simplemente que la radiación sólo podía ser emitida en paquetes de un tamaño dado. La cantidad de energía de uno de esos paquetes, o cuantos, es inversamente proporcional a la longitud de onda, y por tanto, proporcional a la frecuencia de radiación emitida. La fórmula es E = hν, donde E es la energía del paquete, ν es la frecuencia y h es una nueva constante fundamental de la naturaleza, la constante de Planck. Cuando Planck calculó la intensidad de la radiación térmica imponiendo esta nueva condición, el resultado coincidió perfectamente con las observaciones.
Poco tiempo después, en 1905, Einstein formuló esta teoría de una manera mucho más tajante: él sugirió que los objetos calientes no son los únicos que emiten radiación en paquetes de energía, sino que toda la radiación consiste en múltiplos del paquete de energía de Planck. El príncipe francés Louis-Victor de Broglie, dándole otra vuelta a la teoría, propuso que no sólo cualquier cosa que oscila tiene energía, sino que cualquier cosa con energía se debe comportar como una “onda” que se extiende en una cierta región del espacio, y que la frecuencia ν de la oscilación verifica la ecuación de Planck. Por lo tanto, los cuantos asociados con los rayos de luz deberían verse como una clase de partículas elementales: el fotón. Todas las demás clases de partículas llevan asociadas diferentes ondas oscilantes de campos de fuerza, pero esto lo veremos más adelante.
El curioso comportamiento de los electrones en el interior del átomo, descubierto y explicado por el famoso físico danés Niels Bohr, se pudo atribuir a las ondas de de Broglie. Poco después, en 1926, Edwin Schrödinger descubrió cómo escribir la teoría ondulatoria de de Broglie con ecuaciones matemáticas exactas. La precisión con la cual se podían realizar cálculos era asombrosa, y pronto quedó claro que el comportamiento de todos los objetos pequeños quedaba exactamente determinado por las recién descubiertas “ecuaciones de ondas cuánticas”.
Está bien comprobado que la mecánica cuántica funciona de maravilla…, pero, sin embargo, surge una pregunta muy formal: ¿qué significan realmente estas ecuaciones?, ¿qué es lo que están describiendo? Cuando Isaac Newton, allá en 1867 formuló cómo debían moverse los planetas alrededor del Sol, estaba claro para todo el mundo qué significaban sus ecuaciones: que los planetas estaban siempre en una posición bien definida des espacio y que sus posiciones y sus velocidades en un momento concreto determinan inequívocamente cómo evolucionarán las posiciones y las velocidades en el tiempo.
Pero para los electrones todo es diferente. Su comportamiento parece estar envuelto en misterio. Es como si pudieran “existir” en diferentes lugares simultáneamente, como si fueran una nube o una onda, y esto no es un efecto pequeño. Si se realizan experimentos con suficiente precisión, se puede determinar que el electrón parece capaz de moverse simultáneamente a lo largo de trayectorias muy separadas unas de otras. ¿Qué puede significar todo esto?
Niels Bohr consiguió responder a esta pregunta de forma tal que con su explicación se pudo seguir trabajando, y muchos físicos siguen considerando su respuesta satisfactoria. Se conoce como la interpretación de Copenhague de la mecánica cuántica.
Si la mecánica cuántica tiene cosas extrañas y el espín es una de ellas. Y si uno piensa que la intuición le ayudará a comprender todo esto, pues no lo hará, o es poco probable que lo haga. Las partículas tienen un espín fundamental. Al igual que la carga eléctrica o la masa, el espín ayuda a definir que tipo de partícula es cada una.
Las leyes de la mecánica cuántica han sido establecidas con mucha precisión; permite cómo calcular cualquier cosa que queramos saber. Pero si queremos “interpretar” el resultado, nos encontramos con una curiosa incertidumbre fundamental: que varias propiedades de las partículas pequeñas no pueden estar bien definidas de manera simultánea. Por ejemplo, podemos determinar la velocidad de una partícula con mucha precisión, pero entonces no sabremos exactamente dónde se encuentra; o a la inversa, podemos determinar la posición con precisión, pero entonces su velocidad queda mal definida. Si una partícula tiene espín (rotación alrededor de su eje), la dirección alrededor de la cual está rotando (la orientación del eje) no puede ser definida con gran precisión.
No es fácil explicar de forma sencilla de dónde viene esta incertidumbre, pero existen ejemplos en la vida cotidiana que tienen algo parecido. La altura de un tono y la duración en el tiempo durante el cual oímos el tono tienen una incertidumbre mutua similar. Para afinar un instrumento musical se debe escuchar una nota durante un cierto intervalo de tiempo y compararla, por ejemplo, con un diapasón que debe vibrar también durante un tiempo. Notas muy breves no tienen bien definido el tono.
Para que las reglas de la mecánica cuántica funcionen, es necesario que todos los fenómenos naturales en el mundo de las cosas pequeñas estén regidos por las mismas reglas. Esto incluye a los virus, bacterias e incluso a las personas. Sin embargo, cuando más grande y más pesado es un objeto, más difícil es observar las desviaciones de las leyes del movimiento “clásicas” debidas a la mecánica cuántica. Me gustaría referirme a esta exigencia tan importante y tan peculiar de la teoría con la palabra “holismo”. Esto no es exactamente lo mismo que entienden algunos filósofos por holismo, y que podría definir como “el todo es más que la suma de sus partes”. Si la física nos ha enseñado algo es justo lo contrario. Un objeto compuesto de un gran número de partículas puede ser entendido exactamente si se conocen las propiedades de sus partes (partículas); basta que sepamos sumar correctamente (¡y esto no es nada fácil en mecánica cuántica!). Lo que entiendo por holismo es que, efectivamente, el todo es la suma de las partes, pero sólo se puede hacer la suma si todas las partes obedecen a las mismas leyes. Por ejemplo, la constante de Planck, h, que es igual a 6’626075… × 10-34 Julios segundo, debe ser exactamente la misma para cualquier objeto en cualquier sitio, es decir, debe ser una constante universal.
La mecánica cuántica es muy extraña a nuestro “sentido común”, sabemos que se desenvuelve en ese “universo” de lo muy pequeño, alejado de nuestra vida cotidiana en el macrocosmos tetradimensional que, no siempre coincide con lo que, en aquel otro ininitesimal acontece.
Las reglas de la mecánica cuántica funcionan tan bien que refutarlas resulta realmente difícil. Los trucos ingeniosos descubiertos por Werner Heisemberg, Paul Dirac y muchos otros mejoraron y completaron las reglas generales. Pero Einstein y otros pioneros como Erwin Schrödinger siempre presentaron serias objeciones a esta interpretación. Quizá funcione bien, pero ¿dónde está exactamente el electrón?, ¿en el punto x o en el punto y? En pocas palabras, ¿dónde está en realidad?, y ¿cuál es la realidad que hay detrás de nuestras fórmulas? Si tenemos que creer a Bohr, no tiene sentido buscar tal realidad. Las reglas de la mecánica cuántica, por sí mismas, y las observaciones realizadas con detectores son las únicas realidades de las que podemos hablar.
Es cierto que, existe otro universo dentro de este nuestro del que, aún, nos queda mucho por aprender.
La mecánica cuántica puede ser definida o resumida así: en principio, con las leyes de la naturaleza que conocemos ahora se puede predecir el resultado de cualquier experimento, en el sentido que la predicción consiste en dos factores: el primer factor es un cálculo definido con exactitud del efecto de las fuerzas y estructuras, tan riguroso como las leyes de Isaac Newton para el movimiento de los planetas en el Sistema Solar; el segundo factor es una arbitrariedad estadística e incontrolable definida matemáticamente de forma estricta. Las partículas seguirán una distribución de probabilidades dadas, primero de una forma y luego de otra. Las probabilidades se pueden calcular utilizando la ecuación de Schrödinger de función de onda (Ψ) que, con muchas probabilidades nos indicará el lugar probable donde se encuentra una partícula en un momento dado.
Muchos estiman que esta teoría de las probabilidades desaparecerá cuando se consiga la teoría que explique, de forma completa, todas las fuerzas; la buscada teoría del todo, lo que implica que nuestra descripción actual incluye variables y fuerzas que (aún) no conocemos o no entendemos. Esta interpretación se conoce como hipótesis de las variables ocultas.
Fuente: Partículas de Gerard ´t Hofft
emilio silvera
el 28 de septiembre del 2010 a las 18:48
Qué difícil se ha vuelto la física, ahora ya no se avanza a base de ejercicios mentales como hacía Einstein, observando prismas y tirando cosas como Newton, deslizando objetos sobre planos inclinados como Galileo o experimentando como Faraday con medios muy limitados. Ahora para avanzar en Física hay una maraña de aparato matemático y estadístico que asusta al más pintado que te hace perder la noción de lo que estás estudiando, pocos son capaces de interpretar correctamente lo que hay detrás de las ecuaciones y muchas veces lo hacen seguro de forma incompleta, la física hoy necesita de grandes y prohibitivos aceleradores de partículas, de grandes telescopios y radiotelescopios que aportan datos nuevos sobre la esencia de la materia y el universo.
Antes, la ciencia avanzaba gracias a unos pocos genios que sobresalían del resto como rascacielos en un poblado de chabolas, ahora la ciencia avanza gracias a muchos pero son muchos porque afortunadamente ya no son chabolas lo que hay alrededor de los genios que surgen, ahora hay equipos de investigación y algún que otro lobo solitario.
La física es bella y siempre lo será, aunque sólo sea contemplando y ajustando las velas de un velero cuando sopla el viento.
Saludos!
el 29 de septiembre del 2010 a las 11:06
Estimado Zephyros, no lo podria haber expresado mejor. ¡Que verdad! La Fisica, aquella Fisica de Einstein, Max Planck o Eddington…queda muy lejos. Desde entonces y con las bases que ellos pusieron, el mundo y el Universo ha tomado otra dimension mucho mas compleja y amplia en el saber y, como bien dices, con sofisticados aparatos de medida y precision, con grandes Telescopios, con enormes aceleradores, nos podemos acercar a ese Universo oculto y lejano de la Mecanica cuantica o de la Astrofisica.
Aquellos tiempos entrañables de Galileo, Kepler y otros muchos, han quedado muy lejos y ahora, las nuevas teorias con sus matematicas topologicas que ponen de punta los pelos de las cejas de los fisicos mas avesados, las intrincadas maquinas y sondas que podemos enviar al espacio y que son capaces de cualquier cosa, de efectuar cualquier lectura y de analizar cualquier material o atmosfera, la robotica que al servicio de la fisica y la astronomia esta haciendo posible que tengamos imagenes de mundos y lunas situados muy lejos de nosotros, otros que, preprados expresamente para ello, nos vigilan y estudian el Sol desde su superficie hasta el nucleo y nos hablan del comportamiento del plasma a los distintos niveles, etc.
Es verdad, hemos entrado en un epoca muy diferente a aquella en que, la Comunidad Cientifica era como una familia. Ahora, grupos y Equipos de las distintas disciplinas pululan por el mundo en busca de este o aquel hallazgo y, para ello, cuentan con algo mas que la simple intuicion y una gran imaginacion como aquellos otros del pasado que, de todas las maneras, han hecho posible que estos de ahora puedan continuar donde ellos lo dejaron…Que no fue poco.
En fin amigo, esperemos que aquellos esfuerzos y aquellas ideas geneniales de entonces, sean el motor de arranque para el descubrimiento de nuevos mundos, nuevos universos que estan ahi, esperando que lleguemos hasta ellos para establecer un dialogo constructivo que nos llevara a otros nuevos conceptos del Universo que nos diran (seguramente) quienes somos y para que estamos aqui.
En fin, solo nos queda observar, maravillarnos y, sobre todo…esperar acontecimientos.
el 4 de diciembre del 2011 a las 11:46
El que este un poco confundido y hasta decepcionado con la física actual, debía estudiarse la evolución histórica de la física del cuerpo negro, no solo la parte que nos exponen de forma sintética los textos, sino todo lo que ocurría en esa época, se me parece a esta; claro desde su dialéctica histórica, se las diferencias. También la evolución del concepto de capacidad calorífica, es otra buena muestra. Cuando veo tanta teoría acumulada y fantasmas oscuros, siempre les digo a las personas que la real explicación de todo fenómeno, será siempre sencilla, comprensible y escribible en cualquier libro escolar. Lo demás que ande por ahí, son seudoesplicaciones de cosas que no hemos terminado de comprender. Yo digo que en física cada crisis se resolvió con un nuevo paradigma. Solo reconozco cincos: el mecánico, el termodinámico, el electrodinámico, el cuántico y el relativista. Digo que ninguno sustituye, envuelve o es superior al otro, si miras solo la parte teórica de la física, y no entiendes la historia y la gran filosofía que hay detrás de la física, te puedes llevar esa impresión, pero solo es una impresión parcial y subjetiva. La mayoría de los libros promueven esa estrecha visión; pero eso es una visión relativa a que los primeros paradigmas, son primeros porque reflejan el mundo en que nos desenvolvemos, es una visión histórica-temporal. Un disparate interpretativo, debido a que sus autores no comprenden la complejidad y trascendencia de las cinco físicas en su relación con la naturaleza física de las cosas Si nos desenvolviéramos en un mundo cuántico, los otros cuatros paradigmas se hubieran descubierto después y como es lógico nos darían la impresión de que son superiores a la cuántica. Si balanceas lo teórico, lo experimental y lo práctico, te das cuenta de que eso no se ajusta a la realidad, puedo demostrarlo, pero es extenso. De cierta forma se complementan esos paradigmas, aunque sus postulados no pueden ser sustituidos por el de otro, cada paradigma es único, irrepetible, he insustituibles, presentan personalidad propia. Es decir, si nos desenvolviéramos a la velocidad de la luz, pasaría lo mismo con respecto a los demás paradigma, estaríamos erróneamente tratando; por ejemplo, de fundir la relatividad y la mecánica. Esto de forma practica, es como querer crear un automóvil usando solamente cálculos de la relatividad. La misma idea actual que trata de fundir la cuántica y la relatividad, o que una seda ante la otra. No, eso no es posible, son dos ciencias redondeadas por el escrutinio científico de anos, una no cederá ante la otra, eso no te lo explica la enseñanza universitaria, ni la mejor física-matemática; sino la dialéctica de la naturaleza física de las cosas y de eso los iluminado, al parecer no saben mucho. Si tratas de fundir un paradigma con otro, o que uno se rebaje ante otro, estas discriminando sus postulados básicos. No solo los del paradigma que tratas de reducir, sino al que pones como superior y eso es lo que sustenta todos los modelos que se han creado en ese paradigma. No me extenderé, pero lo que ocurre es que vas cayendo en un mundo de complejidades que no lograras entender, ni interpretar físicamente, una axiomática tan compleja que esta totalmente desvinculada de la realidad física y que por lo tanto no la explica. La razón histórica de esto ya las explique en otro blog; solo diré que mayormente esta dada por la excesiva matemática… Aclaro esto; porque no es que se le este dando demasiada matemática a los físicos, hace falta darle mas, la matemática que domina un físicos nunca será suficiente, sino que esta desbalanceada, es poca la física de la realidad, con respecto a la axiomatiza matemática. Ejemplo: Si le dices que se viola la ley de conservación de la energía, rápidamente, sin pensar de que se esta ablando, te sacan el tensor masaenergía, eso es lo que viene primero a su cabeza, así pasa con lo demás. No, para analizar un resultado experimental con nuevas consecuencias físicas y la violación de un principio general, es mas fácil recurrir a la física del fenómeno que se discute, no hay que complicarse con algo que de antemano entra en una evidente contradicción con los amarres iniciales que crearon esas expresiones, pero bueno es inútil reprogramar cerebros y sistemas de enseñanzas enraizados. Pero, cual no es mi sorpresa, de que aunque le expliques eso físicamente se les ve en la cara que no entienden de lógicas físicas, aunque se lo demuestres, no pueden cambiar tan rápido su forma de interpretar al mundo. Entonces es donde pienso, tanta matemática les secuestro el pensamiento lógico, eso se manifiesta a cualquier nivel y eso es lo que esta traduciendo la realidad del momento a escalas mas serias. No entienden que todo se resolverá desde la física, desde el sexto paradigma, desde la 6ta física y más sencillo de lo que nos imaginamos.
Si analizan la evolución histórica de la solución a la radiación del cuerpo negro, verán el reflejo de lo que esta comenzando a suceder en este principio de siglo XXI. Pero no se dan cuenta que para explicar la radiación del cuerpo negro, solo basto una “h” y un físico que interpretara bien un solo fenómeno. Para que apareciera el cuarto paradigma físico solo basto una “h” y un físico que entendiera la naturaleza física de las cosas. Después vino una avalancha de leyes, complejas estructuras matemáticas y concepto que cambiaron la forma de los terrícolas ver la naturaleza, pero eso fue después, no antes. Después de que Planck dos dijera; pero no ven que la radiación es un paquetito de correo, es que están ciegos. Ahora se ve sencillo, y por esa misma sencillez, las mentes más brillantes de la época no lo veían. Tengan la absoluta seguridad que lo mismo esta pasando ahora. Si los cinco paradigmas partieron de lo sencillo. ¿Por qué ahora se pretende que sea diferente? ¿En que se basan para pensar de ese modo? Si hay cinco eventos a favor de lo sencillo y ninguno a favor de lo complejo, he inexplicable. ¿Por que tengo que seguir las ideas de unos pocos, sus tutorados y los oportunistas que se les unen? Además, esa complejidad, los mismos que las crean saben que no resuelve ni el 1% de los resultados experimentales, que en fin de cuenta, son los que mandan. Es decir, derivan o te quedas con dos problemas más grandes. ¿Cuando Planck descubrió sus cuantos de energía; nos trajo más problemas? No, inmediatamente Einstein supo por que la luz violeta descargaba un electroscopio y lo explico a través del efecto fotoeléctrico. Es decir desde muchos otros fenómenos se podría haber conocido “h” y los paquetes de cuantos. ¿Cuando Einstein publico la relatividad, trajo más problemas? No, instantáneamente nos deshicimos del fantasma oscuro que resolvía la situación, pero que no existía, el éter. O en unos meses y en pleno campo de batalla por la primera guerra mundial, inmediatamente Schwarzschild nos dio su radio… Esta rapidez nos muestra que unos nuevos y correctos postulados, catapultan astronómicamente, he instantáneamente la física. ¿Cuantos problemas han resuelto instantáneamente la complejidad actual? Pero siempre los humanos complicamos mas la realidad, nos aturdimos ante tantas cosas a las que no les vemos relación. Pero el mundo es uno, y si esta estable y si además hay vida, algo de muy escasa probabilidad, entonces hay postulados y principios sencillos de donde partir y explicar lo inexplicable, les aseguro que es un hecho. Qué argumento podemos dar para que ahora todo se haga a la inversa; que no sean la misma confusión que reino en todas las crisis de los fiscos antes del nuevo paradigma.
el 4 de diciembre del 2011 a las 11:49
Video interesante sobre la tension superficial. Una recreacion asombrosa del fenomeno.
http://www.alvarodelrio.es/?p=104
el 6 de diciembre del 2011 a las 8:21
Bonito, excelente y sencillo ejemplo de lo que es la tensión superficial.
Gracias amigo
el 7 de diciembre del 2011 a las 8:27
Gracias a usted que se esfuerza tanto en divulgar la ciencia, en tratar de que las personas la puedan entender mejor. Gracias por decirnos y escenario a ser modestos y decir, bueno lo que entiendo de eso, es esto y lo demás no se ni como explicarlo. Eso es un gran ejemplo de modestia y sabiduría para los niños y jóvenes. Es muy feo ver personas autosuficientes, que tienen respuestas para todo; que ni ellos mismo se las creen. Gracias por este blog, que puede ser entendido hasta por los niñitos, no todo lo que se divulga puede estar a nivel técnico; si cuando niño hubiese tenido un blog así de seguro hoy fuese mejor físico. Por eso me veo en el deber de sacar un minuto y pasar por aquí, no es molestia, sino divertido y agradable. Usted debía servirles de inspiración a muchas personas eruditas para que crearan sus propios sitios y ayudaran a entender el mundo que nos rodea con mejores explicaciones. Aunque no sen tan fecundos en publicaciones, al final todos ganamos. Gracia por tu decisión de trabajar, de divulgar ciencia hasta que las fuerzas no le den mas, lo que otros que se han beneficiado mas de ella, no hacen.
el 7 de diciembre del 2011 a las 10:19
Gracias amigo, un aliento favorable nunca está demás, es el acicate para continuar al saber que, no todos los esfuerzos caen en “saco roto”, y, si de alguna manera, es válido para alguien, como he dicho tantas veces, estoy más que pagado.
Por lo demás, ¿quién puede presumir de saber? Es una equivocación, siempre habrá quien sepa más, o, quién sepa lo que tu ignoras. Nadie lo sabe todo sobre todo. Nacimos con la mente en blanco, hemos andado un camino (cada cual el que pudo elegir) y, a lo largo del mismo, hemos ido recogiendo distintas experiencias y saberes que, nos han surtido de más o menos conocimientos. Sin embargo, estos nunca serán los suficientes.
Todos aprendemos de todos y, aquí, con ustedes, os puedo prometer que obtengo grandes réditos en sabiduría, toda vez que, lo que yo no alcanzo a “ver” lo ven ustedes que, en vuestros comentarios me lo contais y, de esa manera, cada día, ustedes y yo, nos enriquecemos.
Un abrazo amigo
el 5 de diciembre del 2011 a las 12:17
El que una partícula pueda estar en varios sitios a la vez, más que un hecho es una probabilidad en proporción su velocidad.
Matemáticamente esa nube de presencia no es sino una densidad de probabilidad. Si una mosca volara en cierto espacio a una velocidad muchísimo mayor que la de nuestra persistencia de imagen en la retina veríamos, no una mosca volando sino una nube, una maraña parecida a la de todo un enjambre.
Según las funciones de probabilidad para la ecuación de Schrödinger, en un instante determinado la partícula cuántica puede estar y está en cualquiera de sus estados posible. Eso es como decir que puede ocurrir cualquier cosa. Pero en el análisis global el resultado es el de un estado concreto. Ese grado de omnipresencia o de multiestado dependerá de la velocidad de acción, que no es infinita.
Lo de los multiestados en un tiempo más ha de referirse a una base común premera que también esté presente en la partícula, y cuya velocidad última tienda a al infinito, pero que no es toda la partícula, pues aún le quedan estados evolutivos más lentos y relaciones que no son instantaneas.
La visión de la Cuantica es según el color del cristal con que se mira.
Un cordial abrazo.
el 6 de diciembre del 2011 a las 8:21
Amigo Fandila, como la mayoría de las veces, no puedo estar más de acuerdo contigo.
Saludos cordiales.