May
19
Lo pequeño y lo grande, el saber y la ignorancia, el Universo y…...
por Emilio Silvera ~ Clasificado en El Universo y... ¿nosotros? ~ Comments (4)
Leyendo ese pensamiento, me digo yo: sólo el paso del tiempo las transforma finalmente, hacerlas desaparecer para que, de inmediato, puedan surgir otras nuevas que, en realidad, serán las mismas cosas que ya fueron.
Lo que arriba vemos, un día fue nuestro Sol
Claro que si no existieran simetrías, en la Tierra habría días de 24 horas y otros de cinco ; viviríamos en un planeta deforme en la gravedad proyectaría objetos en todas direcciones; habría explosiones inexplicables. Sería un mundo peligrosamente caprichoso. Sin embargo, por muy atrás que podamos mirar en el tiempo, siempre podremos ver como se ha ido conformando un universo simétrico en el que las figuras se repiten una y otra vez. Lo que no quiere decir que todo sea igual, toda vez que, nuestro universo, dentro de esa simetría creadora que podemos contemplar en la Naturaleza, es al mismo tiempo diverso y de una belleza sin igual. ¡Cuanta grandeza!
Por fortuna, hay simetrías, hay reglas que nos dicen que los planetas son esféricos, que los rostros son simétricos, que todos los días duran lo mismo, que hay frío y calor, día y noche, que hay positivo y negativo, que todo en el universo se rige por el equilibrio que se consigue en la igualdad de fuerzas contrapuestas, y, de esa manera, se llega a la simetría que nos rodea y podemos contemplar por todas partes. Sin embargo, nuestro Universo es el de simetrías rotas.
Tres Físicos recibieron el Nobel por las “simetrías rotas de la Naturaleza”. Dos japoneses y un estadounidense. Ganaron el Premio Nobel de Física del 2008 por cosas que ayudan a explicar el comportamiento de las partículas más pequeñas de materia.
Makoto Kobayashi, Toshihide Masukaway el japonés nacido estadounidense, Yoichiro Nambu
En física, la idea de simetría refiere a un de igualdad o equivalencia en una situación. En el nivel subatómico, por ejemplo, no deberías poder decir si estás viendo desplegados directamente en un espejo, o si una película de esos eventos está corriendo adelante o atrás. Y las partículas deberían comportarse justo sus alter egos, llamadas antipartículas.
Si cualquiera de estas reglas es violada, la simetría se rompe.
Una gran simetría rota surgió inmediatamente después del Big Bang, cuando sólo una infinitesimal fracción más de materia que antimateria fué creada. Debido a que estos dos tipos de partículas se aniquilan sí al encontrarse, ese exceso de materia fue el que prevaleció, en forma de bariones, es decir, la materia que emite radiación y podemos ver. En el suceso tuvo lugar la rotura de la simetría de la “fuerza única” que contenía todos los mecanismos y leyes de aquel primer universo. Sin embargo, no cabe ninguna duda de que existe un ingrediente más elemental e invisible que permea el universo entero, es la sustancia cósmica que nadie sabe explicar y a la que le dan raros nombres que coinciden con la realidad.
Nadie pudo estar allí tomar una instantánea de aquel Universo primitivo
Al principio, el universo era simétrico, sólo existía una sola fuerza que unificaba a todas las que conocemos, la gravedad, las fuerzas electromagnéticas y las nucleares débil y fuerte, todas emergían de aquel plasma opaco de alta energía que lo inundaba todo. Más tarde, cuando el universo comenzó a enfriarse, se hizo transparente y apareció la luz, las fuerzas se separaron en las cuatro conocidas, emergieron los primeros quarks para y formar protones y neutrones los primeros núcleos aparecieron para atraer a los electrones que formaron aquellos primeros átomos. Doscientos millones de años más tarde, se formaron las primeras estrellas y galaxias. Con el paso del tiempo, las estrellas sintetizaron los elementos pesados de nuestros cuerpos, fabricados en supernovas que estallaron, incluso de que se formase el Sol. Podemos decir, sin temor a equivocarnos, que una supernova anónima explotó hace miles de millones de años y sembró la nube de gas que dio lugar a nuestro solar, poniendo allí los materiales complejos y necesarios para que algunos miles de millones de más tarde, tras la evolución, apareciéramos nosotros.
El Universo está lleno de información que debemos buscar para tratar de entender qué mensajes nos envíay lo que nos quieren decir. Sabemos que el Universo es todo lo que existe la materia, las fuerzas que con ella interaccionan y el Espacio y el Tiempo pero, seguimos preguntándonos ¿qué hacemos nosotros aquí?
La materia evolucionada llegó hasta nosotros valiéndose del Carbomo, ese elemento esencial la vida que conocemos
Las estrellas evolucionan que en su núcleo se comienza a fusionar hidrógeno en helio, berilio, carbono, xígeno, nitrógeno… De los elementos más ligeros a los más pesados. Avanza creando en el “corazón” termonuclear, cada vez, metales y elementos más pesados. Cuando llega al hierro y explosiona en la forma explosiva de una supernova. Luego, cuando este material estelar es otra vez recogido en una nueva estrella rica en hidrógeno, al ser de segunda generación (como nuestro Sol), comienza de el proceso de fusión llevando consigo materiales complejos de aquella supernova.
¿Qué sabemos de la Energía ? Sí, formamos parte del Universo inmenso que podemos contemplar. Sin embargo, son muchas las cosas que no sabemos explicar y las contemplamos con asombro y algo de miedo. La ignorancia es la madre del temor y no pocas veces, de la velentía malentendida. A veces, como ñiños inconscientes, jugamos con cosas que no hemos llegado a comprender.
Claro que si hablamos de la energía en el Universo, no debemos dejar de prestar atención a que, la curva de energía de enlace no sólo explica el nacimiento y muerte de las estrellas y la creación de elementos complejos que también hicieron posible que nosotros estemos aquí y, muy posiblemente, será también el factor determinante para que lejos de aquí, en otros sistemas solares a muchos años luz de distancia, puedan florecer otras especies inteligentes que, al igual que la especie , se pregunten por su origen y estudien los fenómenos de las fuerzas fundamentales del universo, los componentes de la materia y, nosotros, se interesen por el destino que nos espera en el futuro.
alguien oye por vez primera la historia de la vida de las estrellas, cómo nacen, viven y mueren, generalmente, no dice nada, pero su rostro refleja escepticismo. ¿Cómo puede vivir una estrella 10.000 millones de años? Después de todo, nadie ha vivido tanto tiempo como ser testigo de su evolución.
En cualquier Nebulosa podemos cúmulos de estrellas
Cuando mentalmente me sumerjo en las profundidades inmensas del universo que nos acoge, al ser consciente de su enormidad, veo con claridad meridiana lo insignificante que somos en realidad con relación al universo. una colonia de bacterias que habitan en una , allí tienen su mundo, lo más importante para ellas, y no se paran a pensar que puede llegar un niño que, de un simple puntapié, las envíe al infierno. Y, sin embargo, por otra , al pensar en la Mente de la que somos poseedores, me paso a otro pensamiento que es, totalmente opuesto y me dice que, algo más que simples seres vivientes sí que somos. El simple hecho de ser conscientes del Universo que nos da cobijo, es ya un síntoma de una más elevada categoría.
Igualmente, nosotros nos creemos importantes de nuestro cerrado y limitado mundo en el que, de momento, estamos confinados. Podemos decir que hemos dado los primeros pasos para dar el salto otros mundos, pero aún nos queda un largo recorrido por delante. Uno de los principales problemas con los que tenemos que luchar, es el hambre en el mundo, la igualdad de los pueblos, y, seguidamente, tendremos que pensar en nuevas fuentes de energías que cubran las exigencias de una población creciente y exigente.
En todo galimatias de conocimientos restringidos por una enorme ignorancia, lo conveniente sería poder saber lo que realmente son los fotones y los electrones, esas dos minúsculas partículas elementales de las que sospecho, que pueden encerrar las verdades del mundo, es decir, los secretos más profundos de la Naturaleza. (¿Os acordáis de aquel número puro y adimensional? El 137 que surge del enlace con e, h, y c, donde pueden estar escondidas las cuestiones más profundas de lo que no sabemos: ahí está la esencia de la relatividad, nos habla de cuanto de acción de Planck y, por si fuera poco, el electromagnetismo está representado por el electrón.
¿Sabremos alguna vez? Hilbert, en su tumba, tiene grabado que sí, en su epitafio nos dice: “Tenemos que saber , ¡sabremos!”.
Me gustaría que tal predicción fuera cierta.
emilio silvera
el 19 de mayo del 2014 a las 19:36
El universo y las leyes universales,estan limitadas a nuestro 3D….una vez dejemos de percibir la dualidad podremos ver otro universo con otras leyes parametros y directrices….mientras tanto estaremos en este!!.
Un Abrazo Fraternal.·.
el 20 de mayo del 2014 a las 3:53
Sí, amigo mío, mientras tanto… ¡Seguiremos en este! Presentimos esos otros “universos”, esas otras dimensiones pero, como bien apuntas… ¿Dónde están? No será fácil para nosotros encontrarlas viviendo en este mundo tridimensional.
Un cordial saludo.
el 30 de abril del 2015 a las 15:36
Muy interesante, soy novata en esto de la física cuántica y metafísica, mas bien soy una simple mortal que desea conocer mas el espacio que habita y además lo deseo compartir con quienes me rodean. Muchas gracias por esta publicación
el 1 de mayo del 2015 a las 7:28
Amiga mía:
Todos somos novatos en cierta manera, nadie lo puede saber todo y, cada día, aprendemos alguna cosa nueva. Eso es, precisamente, lo que nos tiene “vivos” y llenos de curiosidad persiguiendo continuamente el saber del que carecemos. El día que lo pudiéramos saber todo, ese día, comenzaría el declive, la decadencia de nuestra especie que se mueve por el Amor y la Curiosidad. ¡Necesitamos saber!
Es mucha la ignorancia que nuestra especie ha podido alejar de sí a lo largo de nuestra Historia. Sin embargo, todavía cargamos con ese gran peso conformado por todo lo que no sabemos. Son muchas más las preguntas que las respuestas.
Sigamos aprendiendo y alimentando esa gran curiosidad que nos mueve.
Saludos cordiales.