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Monopolos magneticos

Autor por Emilio Silvera    ~    Archivo Clasificado en Física Cuántica    ~    Comentarios Comments (10)

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Cuando el LHC se ponía en marcha, algunos hablaron de que se podían crear monopolos magnéticos.

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“Desde el punto de vista teórico, uno se siente inclinado a creer que los monopolos han de existir, debido a la belleza matemática de su concepción. Aunque se han hecho varias tentativas de hallarlos, ninguna ha tenido éxito. Debiera deducirse de ello que la belleza matemática en sí no es razón suficiente para que la naturaleza aplique una teoría. Nos queda aún mucho que aprender en la investigación de los principios básicos de la naturaleza.”

P. A. M. DIRAC, 1981

En los años treinta del pasado siglo Paul Dirac realizó unos cálculos teóricos que indicaban que si existieran los monopolos magnéticos, entonces se podría cuantizar fácilmente la carga del electrón. Bastaría que existiera un sólo monopolo magnético en el Universo para que los electrones tuvieran la carga que tienen y no otra.

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La imagen de arriba vino acompañada de la noticia siguiente: “Afirman haber podido detectar por primera vez monopolos magnéticos como un estado de la materia que se daría a partir de una disposición especial de los momentos magnéticos dentro de un cristal a baja temperatura.”

En realidad, cohabitamos una naturaleza llena de fenómenos enigmáticos. Uno de estos fenómenos es la asimetría insólita que se observaba entre el magnetismo y la electricidad: no hay cargas magnéticas comparables a las cargas eléctricas. Nuestro mundo está lleno de partículas cargadas eléctricamente, como los electrones o los protones, pero nadie ha detectado jamás una carga magnética aislada. El objeto hipotético que la poseería se denomina monopolo magnético.

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         Montaje experimental. Foto: HZB, D.J.P. Morris y A. Tennant.

El grupo de investigadores dispuso un montaje experimental especial para poder detectar estas cuerdas de Dirac. Hicieron que un chorro de neutrones impactara sobre una muestra a la que aplicaban un campo magnético. En el interior de la muestra se formaban cuerdas de Dirac que dispersaban los neutrones con un patrón específico que delataba su presencia.

Imagen relacionada

La muestra era un cristal de titanato de disprosio. La estructura cristalina de este compuesto tiene una geometría notable, de tal modo que los momentos magnéticos de su interior se organizan en lo que se llama un “espagueti de espines”. El nombre viene de la ordenación de los dipolos, que forman una red de tubos contorsionados (cuerdas) por los que se transporta flujo magnético.

Estos tubos pueden “hacerse visibles” cuando los neutrones interaccionan con ellos; pues los neutrones, aunque no tienen carga eléctrica, sí tienen momento magnético. El patrón de dispersión de los neutrones obtenido es una representación recíproca de las cuerdas de Dirac contenidas en la muestra. Con el campo magnético aplicado los investigadores podían controlar la simetría y orientación de las cuerdas. A temperaturas de entre 0,6 a 2 grados Kelvin los investigadores pudieron ver pruebas de la existencia de monopolos magnéticos (la temperatura suele ser la peor enemiga del magnetismo, pues tiene a desordenarlo todo) en forma de este tipo de cuerdas según se acaba de describir.

Además pudieron ver la firma que en la capacidad calorífica dejada el gas de monopolos, viendo que estas cuerdas interaccionan de manera similar a como lo hacen las cargas eléctricas, lo que era de prever para el caso de monopolos magnéticos. En este resultado los monopolos no son partículas, sino que emergen como un estado de la materia, en concreto a partir de un arreglo especial de los dipolos que forman parte del material.

Para hacernos una idea de cómo sería un monopolo magnético si existiera, imaginemos una barra imantada que, como sabemos, posee en cada extremos un «un polo magnético» por el cual se atraen o se repelen. Estos polos son de dos tipos, llamados «norte» y «sur», y se comportan como las cargas eléctricas, positiva y negativa. Esa configuración del campo es un ejemplo de «campo bipolar», y sus líneas de campo no paran: giran y giran interminablemente. Si partimos por la mitad la barra imantada, no tenemos dos polos, el norte y el sur, separados, sino dos imanes. Un polo norte o sur aislado (un objeto con líneas de campo magnético que sólo salgan o que sólo entren) sería un monopolo magnético. De hecho, es imposible aislar una de estas cargas magnéticas. Nunca se ha detectado monópolos magnéticos, es decir partículas que poseyeran una sola carga magnética aislada. Puede que ello se deba a razones no aclaradas, o bien la naturaleza no creó monopolos magnéticos o creó poquísimos.

Resultado de imagen de Los polos magnéticos norte y sur

Todos sabemos que hay cargas eléctricas de distinto signo, tanto positivas como negativas. De este modo podemos reunir unas cuantas cargas de un signo dado en un recinto espacial y ver cómo todas las líneas de campo entran o salen del mismo a través de su superficie. Esto viene dado por la ley de Gauss del campo electrostático, que es una de las leyes de Maxwell. En su forma diferencial se escribe de la siguiente forma:

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Donde E es el campo eléctrico. Mientras que en su forma integral viene dada por:

 

 

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O lo que es lo mismo: si sumamos las líneas de campo E que salen y entran en una superficie cerrada nos dará la distribución de carga total encerrada dentro de esa superficie. Para situaciones con geometría esférica este problema es trivial, pues el campo será equivalente al generado por una carga puntual, pero no lo es tanto si es de otro modo. También nos dice que el campo dentro de una esfera hueca cargada es nulo, puesto que cualquier superficie cerrada interior no contiene ninguna carga.

Resultado de imagen de Monopolos eléctricos

En cambio, los monopolos eléctricos (partículas que llevan carga eléctrica) son muy abundantes. Cada chispa de materia contiene un número increíble de electrones y protones que son auténticos monopolos eléctricos. Podríamos imaginar las líneas de fuerza del campo eléctrico surgiendo de una partícula cargada eléctricamente o convergiendo en ella y empezando o acabando allí. Además, la experiencia ha confirmado la ley de conservación de la carga eléctrica: la carga monopólica eléctrica total de un sistema cerrado no puede crearse ni puede destruirse. Pero en el mundo del magnetismo, no existe nada similar a los monopolos eléctricos, aunque un monopolo magnético sea fácilmente concebible.

La teoría electromagnética unifica la fuerza eléctrica y la fuerza magnética. La fuerza eléctrica es generada por la presencia de cargas eléctricas (el electrón, por ejemplo), mientras que la fuerza magnética surge por el movimiento de estas mismas cargas. El campo magnético de un imán proviene del movimiento de los electrones alrededor de los núcleos de hierro.

James Clerk Maxwell, el físico escocés que unificó matemáticamente los campos magnético y eléctrico en 1864, incluía en sus ecuaciones electromagnéticas fundamentales la existencia de cargas eléctricas, pero no incluyó la posibilidad de cargas magnéticas. Le habría resultado fácil hacerlo; la inclusión, a nivel estético, habría hecho sus ecuaciones bellamente simétricas respecto a la electricidad y el magnetismo. Pero al igual que otros físicos, Maxwell no halló prueba alguna de que hubiera en la naturaleza cargas magnéticas y las excluyó, por principio, de sus ecuaciones. Los físicos consideran desde entonces extraña la asimetría natural de la electricidad y el magnetismo.

Resultado de imagen de la asimetría natural de la electricidad y el magnetismo.

El magnetismo es un fenómeno físico por el que los materiales ejercen fuerzas de atracción o repulsión sobre otros materiales.

Siguieron profundizando en sus estudios del campo electromagnético maxwelliano. Sabían que las ecuaciones de Maxwell podían simplificarse si se derivaban matemáticamente los campos eléctrico y magnético de otro campo aún más básico: un campo de medida. El campo de medida electromagnético es el ejemplo primero y más simple de la concepción general de campo de medida que descubrirían mucho después Yang y Mills. Curiosamente, al aplicar las ecuaciones de Maxwell al campo simple de medida, los físicos comprobaron que la ausencia de carga magnética se explicaba matemáticamente. Recíprocamente, pudieron demostrar que la ausencia de carga magnética entrañaba matemáticamente la existencia de un campo de medida. El campo de medida introdujo así una asimetría entre los campos eléctrico y magnético.

       En realidad, ¿quién sabe lo que puede haber en el Universo?

Pero la introducción del campo de medida como estructura subyacente del electromagnetismo se consideraba entonces una novedad matemática, un truco conceptual y no verdadera física. De la idea del campo de medida sacabas exactamente (ninguna carga magnética) lo que ponías en ella (ninguna carga magnética). Luego, en los años veinte, el matemático Hermann Weyl demostró que la incorporación de los campos eléctrico y magnético en la nueva teoría cuántica exigía concretamente una interpretación en términos del campo de medida. Y se empezó así a comprobar que el campo de medida electromagnético era físicamente importante, además de interesante matemáticamente. La mecánica cuántica parecía hecha a la medida de los campos de medida, y, curiosamente, los campos de medida presuponían la ausencia de monopolos magnéticos. Este planteamiento teórico coincidía tan absolutamente con la experiencia que la idea del campo de medida electromagnético se asentó con mucha firmeza. Pero luego, llegó Paul Dirac.

“Uno puede describir la situación diciendo que el matemático juega a un juego en el que él mismo inventa las reglas, mientras que el físico juega a otro en que las reglas vienen fijadas por la naturaleza, pero con el transcurrir del tiempo se hace cada vez más evidente que las reglas que los matemáticos encuentran interesantes son las mismas que ha elegido la naturaleza”.

En 1931, Dirac empezó a examinar las consecuencias físicas de la «belleza matemática» del campo de medida electromagnético en la teoría cuántica. Según él: «Cuando realicé este trabajo, tenía la esperanza de encontrar una explicación de la constante de estructura fina (la constante relacionada con la unidad fundamental de carga eléctrica). Pero no fue así. Las matemáticas llevaban inexorablemente al monopolo.» En contra del punto de vista teórico predominante, Dirac descubrió que la existencia de un campo de medida electromagnético y la teoría cuántica unidas presuponían que en realidad los monopolos magnéticos podían existir… siempre que la unidad fundamental de carga magnética tuviese un valor específico. El valor de la carga magnética que halló Dirac era tan grande que si en realidad existiesen monopolos magnéticos en la naturaleza, tendrían que ser fácilmente detectables, debido a los efectos de sus grandes campos magnéticos.

Para entender mejor las consecuencias de las investigaciones de Dirac imaginemos una barra imantada delgada de kilómetro y medio de longitud, con un campo magnético en cada extremo. En este caso, el campo magnético se parece al de un monopolo magnético porque el imán es muy delgado y los extremos están muy alejados. Pero no es un auténtico monopolo, porque las líneas del campo magnético no terminan realmente en la punta ,del imán; se canalizan a través de éste y surgen por el otro extremo.

Imaginemos luego que un extremo de este delgado imán se extiende hasta el infinito, reduciéndose su grosor matemáticamente a cero. El imán parece ahora una línea matemática, o una cuerda, con un campo magnético radial que brota de su extremo: un auténtico monopolo magnético puntiforme: Pero, ¿y esa cuerda infinitamente delgada (llamada cuerda de Dirac) que canaliza el flujo del campo magnético hasta el infinito? Dirac demostró que si la carga magnética del monopolo, con un valor g, cumplía la ecuación

ge = n/2

n = 0, ± 1, ± 2…

en la que e es la unidad fundamental de carga eléctrica (una cantidad conocida experimentalmente), la presencia de esa cuerda no podría detectarse nunca físicamente. Según Dirac, la cuerda se convierte entonces sencillamente en un artilugio matemático descriptivo sin realidad física, igual que las coordenadas de los mapas son artilugios matemáticos que utilizamos para describir la superficie de la Tierra, carentes de significado físico. La cuerda de Dirac con un monopolo magnético en la punta era matemáticamente una línea en el espacio, a lo largo de la cual el campo de medida electromagnético no estaba definido. Pero sorprendentemente esta falta de definición no tenía consecuencias mensurables, siempre que la carga del monopolo magnético cumpliese la condición de Dirac. Otra consecuencia más del monopolo de Dirac era que la carga magnética se conservaba rigurosamente como la carga eléctrica.

paul dirac 1907 250x212 Paul Dirac cuando era niño

¿Quién diría, viendo a este niño, que de mayor, desarrollaría un trabajo sobre el electrón que nada tiene que envidiar a las teorías de Einstein? Es Paul Dirac de niño, allá por el año 1907. Después de los importantes trabajos de Dirac, los físicos teóricos aceptaron la posible existencia de monopolos magnéticos, pensando que si ninguna ley física rechazaba su existencia, quizá existiesen.

Resumiendo, nada se opone, a priori, a la existencia de cargas magnéticas aisladas. Estos monopolos magnéticos producirían una fuerza magnética, mientras que sus movimientos engendrarían una fuerza eléctrica. Pero, por una razón misteriosa, la naturaleza no parece haberse jugado aquí por la simetría, pues creó «monopolos eléctricos» y aparentemente no monopolos magnéticos.

¿Causa problemas esta asimetría, ¿Deberían existir los monopolos magnéticos? La respuesta tradicional de los físicos es: no necesariamente. La teoría sugiere su existencia, pero no la exige, y se acomoda muy bien con su ausencia.

Resultado de imagen de En el momento del quiebre. de la simetría de gran unificación, se engendraron cantidades de monopolos magnéticos

Mas en el marco de la teoría del Big Bang la situación es diferente. En el momento del quiebre. de la simetría de gran unificación, se engendraron cantidades de monopolos magnéticos. Estas partículas, casi tan masivas como las X y las Y, ¡deberían ser tan numerosas como los protones! Masas tan gigantescas deberían poder señalarse fácilmente. ¿Por qué no se dejan percibir por nuestros detectores?

De hecho, con esta masa y esta población, los monopolos magnéticos, si existiesen, otorgarían al universo una densidad bastante superior que la densidad crítica. Bajo su efecto gravitatorio, ¡el universo se habría cerrado hace mucho tiempo! Y ¿de nosotros? Ni hablar…

No están aquí y tanto mejor. Pero, ¿por qué? El problema de los monopolos ausentes es otra de las patologías de las debilidades del Big Bang.

emilio silvera


  1. No dejamos de imaginar el Universo : Blog de Emilio Silvera V., el 3 de septiembre del 2012 a las 7:47

    […] que si existieran los monopolos magnéticos, entonces se podría cuantizar fácilmente la carga del electrón. Bastaría que existiera un sólo monopolo magnético en el Universo para que los electrones […]

  2. ¿Monopolos magnéticos? Yo diría que sí : Blog de Emilio Silvera V., el 4 de febrero del 2014 a las 6:35

    […] tubos pueden “hacerse visibles” cuando los neutrones interaccionan con ellos; pues los neutrones, aunque no tienen carga […]

 

  1. 1
    Filomeno Augusto
    el 13 de junio del 2012 a las 23:47

    Hola Don Emilio Silvera, le tengo una pregunta sobre magnetismo que quisiera me brindara su opinión.
    He visto en videos motores magnéticos que se retroalimentan así mismos y brindan energía limpia y autosuficiente por tiempo ilimitado, ¿realmente funcionan este tipo de motores?, que tan importantes podrían llegar a tener la utilización de estos motores para por ejemplo, el consumo eléctrico de un hogar?.
    He investigado un poco el asunto y me tope con este artículo en Wikipedia http://es.wikipedia.org/wiki/Joseph_Newman , que dice lisa y llanamente que no funcionan.

    Le dejo aquí algunos de los videos en dónde se muestra supuestamente el correcto funcionamiento de este tipo de motores, hay muchos…
    http://www.youtube.com/watch?v=OgTc-CuSb-Y&feature=related
    http://www.youtube.com/watch?v=1UcgeBpjEqE&feature=related

    Un gran abrazo!

    Responder
  2. 2
    Filomeno Augusto
    el 14 de junio del 2012 a las 15:24

    Hola pongo nuevamente el comentario ya que me dice que está pendiente de moderación y no lo pública, gracias igualmente.

    Hola Don Emilio Silvera, le tengo una pregunta sobre magnetismo que quisiera me brindara su opinión.
    He visto en videos motores magnéticos que se retroalimentan así mismos y brindan energía limpia y autosuficiente por tiempo ilimitado, ¿realmente funcionan este tipo de motores?, que tan importantes podrían llegar a tener la utilización de estos motores para por ejemplo, el consumo eléctrico de un hogar?.
    He investigado un poco el asunto y me tope con este artículo en Wikipedia http://es.wikipedia.org/wiki/Joseph_Newman , que dice lisa y llanamente que no funcionan.
    Le dejo aquí algunos de los videos en dónde se muestra supuestamente el correcto funcionamiento de este tipo de motores, hay muchos…
    http://www.youtube.com/watch?v=OgTc-CuSb-Y&feature=related
    Un gran abrazo!
     

    Responder
    • 2.1
      emilio silvera
      el 14 de junio del 2012 a las 16:02

      Estimado amigo:
      http://es.wikipedia.org/wiki/Joseph_Newman
      Usted mismo se dio la respuesta. Tal como están las cosas, con la demanda de energía que hoy en día impone la Sociedad moderna, el encontrar una fuente energética de ese tipo, sería de un valor incalculable pero, desgraciadamente, no es así. El aparato que aparece ahí viene a producir la misma energía que consume.
      Hoy por hoy, la única energía limpia e inagotable que podríamos tener en el futuro, sería la misma que se genera en las estrellas, es decir: La de Fusión.
      Claro que, todavía estamos algo verdes para poder conseguirlo y la cosa es compleja: Fusión de Deuterio con Tritio produciendo helio-4 liberando un neutrón, y generando 17,59 MeV de energía, como cantidad de masa apropiada convertida de la energía cinética de los productos, de acuerdo con E = Δm c2. En física nuclear , la fusión nuclear es el proceso por el cual varios núcleos atómicos de carga similar se unen para formar un núcleo más pesado. Se acompaña de la liberación o absorción de una cantidad enorme de energía, que permite a la materia entrar en un estado plasmático.
      Este proceso puede liberar enormes cantidades de energía. Sin embargo el proceso no es tan simple, requiere de una enorme energía de activación a una temperatura del orden de los millones de grados. De haber esta energía, surge otra dificultad: la estructura material de un reactor puede fundirse a tan elevada temperatura.
       
      Dentro de unos treinta años estaremos en el camino correcto, la energía de fusión sería una realidad que estará en plena expansión de un comenzar floreciente. Sin residuos nocivos peligrosos como las radiaciones de la fisión nuclear, la fusión, nos dará energía limpia y barata en base a una materia prima muy abundante en el planeta Tierra.
      Nuestro Sol fusiona Hidrogeno en Helio a razón de 4.654.000 toneladas por segundo. De esta enorme cantidad de Hidrógeno, 4.650.000 toneladas se convierten en Helio. Las 4.000 toneladas restantes, son lanzadas al espacio en forma de luz y calor, energía termonuclear de la que, una parte, llega al planeta Tierra y hace posible la vida.
      Resulta pues que, el combustible nuclear de las estrellas es el Hidrógeno que mediante su fusión hace posible que genere tal enormidad de energía. Así lleva el Sol unos 4.500 millones de años, y se espera que, al menos durante un período similar, nos esté regalando su luz y su calor.
      No debemos confundir la Fisión con la Fusión, la primera es la que se emplea en las Centrales nucleares para producir energía y, ya sabemos todo lo peligrosa que resulta (Japón, en sus propias carnes ha sufrido y sufre sus consecuencias), las radiaciones del Uranio y del Plutonio son fatales para la vida. Por el contrario, la fusión es limpia pero…de momento, inalcanzable.
      Pero ¿tenemos Hidrógeno en el planeta Tierra para tal empresa?
      La verdad es que sí. La fuente de suministro de Hidrógeno con la que podemos contar, es prácticamente inagotable…
      ¡El agua de los mares y de los Océanos!
      Todos sabemos que el hidrógeno es el elemento más ligero y abundante del Universo. Está presente en el agua y en todos los compuestos orgánicos. Químicamente, el hidrógeno reacciona con la mayoría de los elementos. Fue descubierto por Henry Cavendisch en 1.776. El hidrógeno se utiliza en muchos procesos industriales, como la reducción de óxidos minerales el refinado del petróleo, la producción, de hidrocarburos a partir de carbón y la hidrogenación de los aceites vegetales y, actualmente, es un candidato muy firme para su uso potencial en la economía de los combustibles de hidrógeno en la que se usan fuentes primarias distintas a las energías derivadas de combustibles fósiles (por ejemplo, energía nuclear, solar o geotérmica) para producir electricidad, que se emplea en la electrolisis del agua. El hidrógeno formado se almacena como hidrógeno líquido o como hidruros de metal.
      Bueno tanta palabrería y explicaciones solo tiene por objeto hacer notar la enorme importancia del Hidrógeno. Es la materia prima del Universo, sin él no habría estrellas, no existiría el agua y, lógicamente, tampoco nosotros podríamos estar aquí sin hidrógeno.
      Si finalmente somos capaces de conseguir energía a través de la fusión nuclear, la Humanidad habrá dado un paso gigante hacia su futuro. Pero sigamos con las explicaciones. Cuándo dos moléculas de Hidrógeno se junta con una de Oxígeno (H2O), tenemos el preciado líquido que llamamos agua y sin el cual la vida no sería posible.
      Así las cosas, parece lógico pensar que, conforme a todo lo antes dicho, los seres humanos, deberán fijarse en los procesos naturales (en este caso el Sol y su producción de energía), y, teniendo como tiene a su disposición la materia prima (el Hidrógeno de los océanos), procurar investigar y construir las máquinas que sean necesarias para conseguir la fusión, la energía del Sol.
      Esa empresa está ya en marcha y, como he dicho al principio de este comentario, posiblemente, en unos treinta años, sería una realidad que nos dará nuevas perspectivas para continuar el imparable avance en el que estamos inmersos. La energía, a lo largo de la historia, ha permitido elevar el nivel de vida del ser humano. La energía es la base de todo sistema económico, de ella depende el coste de todos los productos, desde un chicle a una limusina: a más escasez de energía, más cuesta ganarse la vida. El carbón, en primer lugar, posibilitó la extinción de la servidumbre; el petróleo, mientras fue abudante, logró que la economía mundial viviese su época dorada durante 1950-1973; la energía de fisión actual se presenta, a veces, como única alternativa. Sin embargo, todas estas energías tienen un vicio común: o son escasas o contaminan.
      Tenemos que huir de esto, la Fisión nuclear no es la solución Pero no me gustaría cerrar este comentario sobre la fusión sin contestar a una importante pregunta… ¿por qué la fusión?
      Porque tiene una serie de ventajas muy significativas en seguridad, funcionamiento, medio ambiente, facilidad en conseguir su materia prima, ausencia de residuos peligrosos, posibilidad de reciclar los escasos residuos que genere, etc. Los recursos combustibles básicos (deuterio y Litio) para la fusión son abundantes y fáciles de obtener.

      Los residuos son de helio, no radiactivos.
      El combustible intermedio, Tritio, se produce del Litio.
      Las centrales eléctricas de fusión no estarán expuestas a peligrosos accidentes como las centrales nucleares de fisión.
      Con una elección adecuada de los materiales para el propio dispositivo de fusión, sus residuos no serán ninguna carga para las generaciones futuras.
      La fuente de energía de fusión es sostenible, inagotable e independiente de las condiciones climáticas.

      Para producir la energía de fusión solo tenemos que imitar lo que hace el Sol. Tenemos que hacer chocar átomos ligeros de Hidrógeno para que se fusionen entre sí a una temperatura de 15 millones de grados Celsius, lo que, en condiciones de altas presiones (como ocurre en el núcleo del Sol) produce enormes energías según la formula E=mc2 que nos legó Einstein demostrando la igualdad de la masa y la energía.
      Claro que, el problema que surge en la fusión es que para que este tipo de reacciones se produzca se necesita un enorme aporte energético que logre que los nucleos venzxan la fuerza de repulsión que existe entre ellos (ambos cargados positivamente), y puedan universe. Este aporte energético se logra mediante el calor, aplicando temperaturas de millones de grados.
      El problema comentado anteriormente proviene de la dificultad de conseguir un reactor nuclear que pueda aguantar esas temperaturas sin destruirse. El estado de la materia a fusionar a esta temperatura se denomina plasma, y su estructura atómica es un completo desorden en este punto. Sí, es verdad que estamos jugando con fuerzas muy poderosas, ¡querer imitar lo que hacen las estrellas!
      Actualmente se está investigando en este tipo de reactores en un consorcio denominado ITER.
      Las dos formas que se están experimentando para poder confinar la materia a fusionar son el confinamiento magnético y confinamiento inercial.

      Confinamiento magnético: Se logra crear y mantener la reacción de fusión gracias a grandes cargas magnéticas.

      Confinamiento inercial: El calentamiento se obtiene mediante láseres y el confinamiento del plasma con la inercia de la materia que se encuentra en el interior.

      Todas las respuestas a nuestras necesidades están en la Naturaleza. Sin embargo, debemos ir con exquisito cuidado, tantear suavemente los resortes que nos puedan llevar a conseguir las respuestas deseadas, ya que, no podemos jugar a ser dioses cuando sólo somos humanos, y, existen fuerzas que ni podemos imaginar. Tratar de buscar soluciones…Sí, hacerlo de cualquier manera…No.
      ¿Te imaginas una fuente de energía limpia, barata y casi inagotable? ¿Que utilizara agua como combustible y no produjera ningún tipo de residuo? Son estos sueños los que alimentan la esperanza de la fusión nuclear. Pero, ¿es factible? Pues parece ser que todavía no pero, estamos en el camino.
      El ojo humano tiene sus limitaciones para ver, sin embargo, la imaginación no tiene barreras y, a lo largo de la historia de la Humanidad se han dado pruebas de lo lejos que pueden llegar nuestros pensamientos. Hasta no hace mucho se creía imposible que se pudieran lograr muchos de los avances que ahora, nos parecen cosas cotidianas, y, en el futuro no muy lejano, es posible que podamos gozar de esa energía limpia y de contaminación ausente que nos pueda abrir el camino hacia una nueva era. Nuestra Casita Azul necesita que la cuidemos y, un paso muy importante para ello sería…La Fusión Nuclear.
      De todas las maneras y a pesar de lo mucho que nuestras mentes pueden imaginar, no será fácil lograr,  aquí en la Tierra el mismo proceso que se produce en nuestro Sol, y, tantas dificultades se presentan para ello que, por eso, muchos hablan de la fusión fría.
      ¿Puedes imaginar que pudiéramos producir en la Tierra 15 millones de grados de temperatura? ¿Qué máquinas podrían soportarlo? y, desde luego, aislar esas instalaciones del exterior para que el calor no saliera y se produjera una debacle de proporciones inmensas…no parece nada fácil tampoco. Habrá que esperar y seguir trabajando sin desmayo, nuestro futuro lo necesita.
      En fin amigo, poco más puedo decir.
      Un saludo cordial.

      Responder
    • 2.2
      emilio silvera
      el 15 de junio del 2012 a las 6:28

      Hola, amigo:
      Las Sociedades modernas ha llevado a la Humanidad a la necesidad imperiosa de consumir cantidades inmensas de energía para poder sobrellevar el confort y el (no siempre justificado) consumo en el devenir diario de nuestras vidas. Mires por donde mires, la energía está ahí presente de mil maneras diferentes y, tanto es así que, sin ella, no podríamos pasar.
      Claro que esta realidad nos lleva a que, muchos imaginativos, quieran sacar tajada de tal necesidad y, de esa manera, surgen por aquí y por allá, inventos de ese tipo que, en defintiva, no son nada prácticos toda vez que, su rendimiento está equilibrado con su consumo y siendo así, no existe sobrante neto para consumir, es decir: es lo comido por lo servido como se suele decir.
      Aparte de los modelos energéticos que conocemos actualmente, el llegar a una fuente barata y limpia (al menos eso es lo que parece), nos lleva a fijarbnos en la Naturaleza y, de hecho, la hemos encontrado en las estrellas que, mediante la fusión nuclear, fusiona hidrógeno en helio y en el mecanismo necesario para ello, se libera una inmensa energía.
      Así que, en esas andamos, queriendo “copiar” lo que hacen las estrellas: “fusión del hidrógeno”. Claro que nos hemos topado con un problema enorme al tener que hacerlo estando una temperatura presente de unos 15 millones de grados y, eso, amigo, funde hasta las paredes de la Central donde se instale el complejo.
      El material necesario, es decir, la materia prima, la tenemos ahí, en las aguas de los mares y océanos, no es difícil separar el Hidrógeno del Oxígeno, y, los residuos (el Helio) no son nosivos y, además, se reciclan fácilmente.
      Se espera que en unos 30/40 años podamos disfrutar de esa energía limpia y “barata” y, mientras tanto, hay que escuchar a los muchos “ingeniosos” que consiguen obtener energía de la “nada” limpia y que resolverá el problema del mundo.
      ¡Ah! Pero erso sí, no niego ni me aparto de que, algún día, seámos capaces de obtener otras fuentes de energías que ahora, ni pensamos que existen pero, de momento, lo que se vislumbra es eso.
      Un saludo cordial.

      Responder
  3. 3
    Tom Wood
    el 15 de junio del 2012 a las 3:27

    Eso me chocaba, me hacia tratar de buscar un acomodo geométrico, donde cupiera la  posibilidad de que el sistema tomara alguna simetría, donde fuera posible una carga magnética. Y así fue que me percate, desde las primeras topologías de confinación que me invente, cuando logre entender la forma aproximada [es mas compleja aun] en que se confinan los fotones electromagnéticos para formar las energíasmasas, que para una energíamasa [partícula], no hay posibilidad ninguna de carga magnética.
    -Sin embargo si es posible polo norte y polo sur, cuando el sistema tiene como mínimo dos energíasmasas.
    – Nunca es posible ese efecto, con una sola energíamasa.
    -Y también es posible, antes de que una partícula y su antipartícula se aniquilen.
     
    A pesar de que no buscaba eso al tratar de determinar que pasaba con los fotones electromagnéticos, que se confinaban para formar las energíasmasas; eso me lleno de regocijo, y me sirvió para de cierta forma ver que iba por el camino correcto, al menos eso es lo archidemostrado experimentalmente. He dicho por ahí que la no existencia de una carga magnética tiene una explicación geométrica en mi modelo, y de hay se infiere de forma muy evidente el porque no existen cargas magnéticas. Las propiedades magnéticas, conviven con las eléctricas, en la misma energíamasa. El problema interpretativo surge, de que tengas un sistema de al menos dos cargas. Están analizando un sistema y ahí si esta bien definido el polo norte magnético y el polo magnético sur. Aun cuando sean fermiones iguales.
    Es decir, la naturaleza usa simple el mínimo de elementos indispensables en sus estructuras, ¡tiene un rendimiento increíble! y aunque parezca una falta de simetría y belleza que no exista la carga magnética; en realidad la lógica que siguió es la mas que bella y simétrica posible. Tener todas las propiedades en un solo ente y que salgan de pura geometría, más que fascínate, más que increíble; es para mi imposible pedir más sencillez. Solo a la naturaleza, a una fuerza sobrehumana, se le podía ocurrir un sistema tan eficiente. Cuando me percate de eso, cuando tuve conciencia de que lo que me parecía feo, tosco y no me encajaba [mi mente estaba predispuesta por la relación externa que todos conocemos de lo eléctrico, con lo magnético, esas eran las ideas que me habían metido en la cabeza, era mi programación cerebral. También les he escrito por ahí, que yo estuve un largo tiempo descontaminándome,…], no me gustaba para el modelo; era en realidad una obra arte, construida con la arquitectura de un Dios; eso me tubo atontado de la emoción por algún tiempo; quería gritarlo a los cuatro vientos, salir corriendo y contárselo a todos, aunque no supieran nada de física. En rigor ni existe carga eléctrica, ni carga magnética; sino energíasmasas que portan esas dos propiedades y las demás externas que se derivan de ellas. Que los efectos eléctricos externos, estén privilegiados sobre lo magnéticos; eso internamente se explica o se entiese con claridad infantil, incluso al analizar cuasiclasicamente la geometría topológica con la que se confina un fotón electromagnético. Es decir, es tan evidente de que eso es así, que no se necesita ningún conocimiento profundo de física para entenderlo. Es algo sencillo que se extrae de la geometría con que se confina la circulación del electromagnético.
    He explicados las circunstancias físicas, las reales en la naturaleza, en los laboratorios, que obligan a un fotón electromagnético a confinarse; para que se convierta en una energíamasa (la gravedad de los cuerpos supermasivos, los campos de los núcleos atómicos pesados, láseres superpotentes, campos electromagnéticos superintensos,…); yo no invento fantasmas oscuros o cosa que no existan, o no puedan ser medidas,… en mi modelo uso lo que se conoce muy bien.
    También les he explicado como es el proceso, hasta donde creo pertinente. Cuando una  energíacampo (fotón electromagnético, gravitatorio, neutrinico,… ustedes piensen nada mas en Luz. Porque yo de tanto lidiar con esto los puedo confundir.), comienza a disminuir su velocidad, su momento magnético lineal (p=mv; pero como las energíascampos no tiene masa se usa la relación de D’ Broglie,… Emilio ha explicado eso con sencillez artística, el sabe hacerlo mejor que yo) se hace cero (esto no lo creen posible los físicos, pero ya la relatividad de forma “torcida” lo admite para taquiones, es una conclusión natural de esa teoría,… ellas desde sus limitaciones,… no lo niegan del todo), pero no los otros vectores perpendiculares, el eléctrico y el magnético; ni tampoco la energía interna de esos campos. Y como la energía no existe en reposo, esa Luz cambia de topología; según creo, según me sale, según imagino, para evitar el reposo.
    -La nueva topología es a lo que llamamos energíamasa (partículas), para aclarar que adquieren esa nueva propiedad, la masa. O la relación masa-energía que da la relatividad; otra forma de decir lo que concluye mi modelo. O la masa fuerza que se siente cuando las tratas de sacar del estado cinemático en que se encuentre (Ley de la inercia), debido al complejo y simétrico momento angular que genera la circulación de confinación.
    -Aun cuando se crea una energíamasa, la energía sigue conservando su identidad fundamental, el movimiento perenne.
    -Esa nueva topología internamente distribuye lo eléctrico y lo magnético de tal forma, que externamente medimos todas las propiedades que se conocen de las energíasmasas.
    – Se puede analizar el movimiento conjunto del campo eléctrico y el magnético o por separados. Es decir, siguen siendo como algo vectorial.
    -Cuando los analizas por separados (esto no quiere decir que estén separados, piensen en una onda Luminosa, please), es que te das cuenta, del porque aparece la falsa ilusión externa de que lo eléctrico esta privilegiado a sentirse mas.
    -Y es por separado, al ver la circulación topológica que describe la circulación de lo magnético, es que rápidamente llegas a la conclusión de que es imposible una carga magnética pura, sin lo eléctrico.
    Si tratas de introducir todas las variantes topologías de confinación posibles, en todas las demás, acabas perdiendo o menguando las propiedades más fundamentales que le medimos a las partículas. Acabas teniendo dificultades para explicar los experimentos y efectos físicos conocidos (una vez que entiendes y dominas el modelo, lo puedes explicar todos, con naturalidad, sencillez y claridad impresionante). Así que no te queda otro remedio que decir, la naturaleza lo confina así, esta es la única forma posible. La que tiene menos elementos y a la vez mas propiedades equilibrantes. A pesar de que así, es imposible la existencia de alguna carga magnética. [Aunque ahora lo veo mejor; para ver eso he pagado un precio inimaginable. Ni tampoco a estas alturas, es pan comido, hay muchas cosas que veo que no puedo explicárselas a nadie, ni imagino como podré hacerlo.] Y después te das cuenta, que sacrificar una hipotética carga magnética, le permitió a la naturaleza, lograr tener todas las propiedades en un solo ente y de paso un mundo en equilibrio físico. Cuando analizas el factor riesgo/beneficio que se pensó el Dios natura y ves la belleza de tal rendimiento; es que cualquier ser sensible a las construcciones naturales, a las ciencias naturales, le dan ganas de gritárselo a todos, aunque te crean una persona que aloqueció. O te escriban: ¿que tu estas fumando?…
    Es cuando te dices, con razón no se encontraron cargas magnéticas.
    http://bibliotecadigital.ilce.edu.mx/sites/ciencia/volumen1/ciencia2/11/htm/sec_29.html

    Responder
    • 3.1
      emilio silvera
      el 15 de junio del 2012 a las 6:29

      Amigo Tom, cada día aprendo alguna cosa nueva cuando expones tus interesantes ideas.
      Un abrazo.

      Responder
  4. 4
    Tom Wood
    el 15 de junio del 2012 a las 3:39

    Hay una errata de contenido, donde dice momento magnetico lineal; es solo: momento lineal.
    Claro tambien tengo muchas otras erratas, pero esas perdonelas, son por causas bien justificadas, que no vienen al caso,… Me duele inculcar esos patrones negativos en ninos y jovenes,…

    Responder
  5. 5
    emilio silvera
    el 31 de mayo del 2013 a las 11:22

    A pesar de las muchas visitas que aquí se reciben (son miles diarias), la sensación que tengo muchas veces es la de que, ¡yo me lo guiso y yo me lo como! No se producen movimientos lógicos que demuestren que los visitantes están ahí para algo más que para leer los contenidos de los trabajos expuestos. Si al menos dijeran alguna cosa, sabríamos qué piensan sobre el tema que en cada momento tratemos. Sin embargo, el silencio más profundo nos lleva, alguna vez, a sentir la soledad en medio del gentío.
    ¡Qué extraño!

    Responder

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