May
22
¿¿Habrá alguna forma de vida, en las “lunas” de Júpiter y...
por Emilio Silvera ~ Clasificado en a otros mundos ~ Comments (0)
Hace tiempo que se sabe de las “lunas” que orbitan alrededor de Júpiter, y, algunas, pudieran tener las condiciones necesarias para que, la Vida, estuviera presente en ella. La nave espacial Galileo investigó Júpiter y sus lunas durante algunos años y tuvo la oportunidad de volar a travéz de una enorme pluma de vapor de agua que salió de la superficie de Europa en forma de géiser que alcanzó la altura de cientos de kilómetros.
El estudio realizado, parece que confirma la idea que surgió a partir de unas investigaciones del Hubble, de imágenes tomadas allá por el año 2012.Y, más tarde, un satélite de la Agtencia Espacial que investigó Júpiter a fondo, detectó y sobrevoló aquel penacho del Géiser expulsado de Europa, y, su composicoón nos loleva a pensar que tiene presente los ingredientes de la Vida.
Claro que, los datos no son suficientes y se necesita de nuevas tecnologías que nos puedan refrendar lo que “dicen”, de tal manera que, podamos cxomprobarlo in situ, tomando muestras del océano salado que bajo la superficie de aquel pequeño mundo bulle lleno de formas de vida… ¡Se espera!
En 1997, cuando la sonda Galileo estaba volando a unos 200 Km por encima de la superficie de Europa, el equipo encargado de su seguimiento, no sospechó que había sobrevolado y traspasado una pluma de vapor de agua salida de la luna helada.
Las aguas ocultas en Europa son un objetivco primordial en la búsqueda de vida extraterrestre, y enviar una nave espacial para tomar unas muestras de ese tipo de géiser podría ser la forma más práctica de verificar si, realmente allí pudiera estar presente alguna forma de vida. Al parecer, los ingredientes para la vida están presentes en el oculto océano de Europa.
“Io, la más interna de las cuatro lunas de Júpiter y el cuerpo con mayor actividad volcánica del Sistema Solar, alberga en su superficie un gran lago de lava llamado Loki Patera (en honor al dios nórdico relacionado con el fuego y el caos). El cráter de 200 km de ancho pudo ser observado por primera vez con un telescopio terrestre hace apenas dos años. Ahora, investigadores de la Universidad de California en Berkeley han obtenido un mapa excepcionalmente detallado de la zona y han descubierto que el lago no es un aburrido plato de sopa, sino que dos olas cruzan su superficie.”
Artículo publicado en MysteryPlanet.com.ar: La luna Titán tiene un nivel del mar como la Tierra http://mysteryplanet.com.ar/site/la-luna-titan-tiene-un-nivel-del-mar-como-la-tierra/
Pero por primera vez desde que comenzó la misión Cassini ya disponemos de un mapa radar de toda la región, en la que destacan tres grandes mares: Ligeia Mare, Punga Mare y Kraken Mare. Kraken Mare, o el mar Kraken, es el más grande todos ellos con diferencia. No obstante, hoy en día sabemos que en realidad Kraken está formado por dos cuencas independientes -denominadas Kraken-1 y Kraken-2-, separadas por un estrecho canal de 17 kilómetros de ancho y 40 kilómetros de largo situado a 64º de latitud norte y 42º de longitud este. La presencia de este accidente geográfico debe causar curiosos efectos sobre este mar titánico.
Si analizamos los datos de radar de la Cassini y tenemos en cuenta las profundidades estimadas de los mares (350 metros para el Kraken y 300 metros para el Ligeia), se cree que el volumen combinado de los mares de Titán debe rondar los 33.000 kilómetros cúbicos de metano y etano (otras estimaciones dan valores de entre 15.000 kilómetros cúbicos y 70.000 kilómetros cúbicos). Estas profundidades de centenares de metros en los lagos del hemisferio norte contrastan con los apenas diez metros de profundidad que parece tener el único lago destacable en las regiones australes, el Ontario Lacus. Si estos cálculos son correctos, el Ontario solamente tendría unos 200 kilómetros cúbicos, o sea, menos del 1% de todos los cuerpos líquidos superficiales de Titán.
Y aquí viene lo interesante. La presencia de la garganta podría causar corrientes de marea entre las dos cuencas con velocidades de hasta 1,8 km/h si asumimos que la diferencia entre la marea baja y la alta es de unos cuatro metros de altura. No parece mucho, pero no olvidemos que hasta hace no mucho se pensaba que la superficie de los lagos de Titán estaban prácticamente libres de corrientes y olas. Este estrecho tiene unas dimensiones comparables a las del estrecho de Gibraltar en la Tierra, aunque morfológicamente se parece más al estrecho de Åland que separa el golfo de Botnia del Mar Báltico. Y, al igual que este estrecho terrestre, además de la garganta, existe una serie de islas estrechamente agrupadas que comunica las dos zonas del Kraken. La influencia hidrológica -o metanológica- de este pequeño archipiélago no es significativa al tratarse de ‘aguas’ muy poco profundas.
La corriente de marea podría además generar olas en el estrecho independientemente de la velocidad del viento, que en Titán es especialmente baja. Por este motivo, quizás sea el único lugar en los mares de Titán con oleaje sea precisamente la garganta del Kraken. En el resto de la superficie de los mares las olas no superarían los 20 centímetros de alto suponiendo vientos del orden de 1 m/s. El pasado marzo la sonda Cassini detectó el reflejo especular de lo que parecen ser pequeñas olitas de dos centímetros de altura creadas por vientos de 0,75 m/s. Está claro que para los futuros exploradores surfear las olas de Titán no será una actividad de mucho riesgo.