Abr
10
¿Otra Tierra?
por Emilio Silvera ~ Clasificado en Otros mundos ~ Comments (0)
Un planeta a 1.200 años luz que pdria ser habitable. Kepler 62f es un mundo rocoso un poco más grande que la Tierra que tiene todas las características para tener océanos
Recreación de Kepler-62f – NASA Ames/JPL-Caltech/T. Pyle
Astrónomos de la NASA anunciaron en 2013 el descubrimiento de un nuevo sistema planetario compuesto por cinco mundos que orbitan alrededor de una estrella algo más pequeña y fría que el Sol, a 1.200 años luz de la Tierra, en la constelación de Lira. El más exterior de ellos, bautizado como Kepler-62f, resultó el más esperanzador para albergar vida. Pequeño -es un 40% más grande que el nuestro-, se encuentra dentro del rango de los mundos que pueden ser rocosos, e incluso es posible que tenga océanos o que sea un mundo acuático parecido al de la película «Water World». Pero la misión no produjo información sobre su composición, su atmósfera o su órbita.
Ahora, para determinar si Kepler-62f podría albergar vida, el equipo de Aomawa Shields, investigadora de la Universidad de California en Los Ángeles, ha planteado distintos escenarios sobre cómo podrían ser su atmósfera y su órbita. Los resultados son bastante optimistas: «Hemos encontrado que hay múltiples composiciones atmosféricas que le permiten ser lo suficientemente cálido como para tener agua líquida en la superficie», dice Shields. «Esto hace que sea un fuerte candidato para planeta habitable».
En la Tierra, el dióxido de carbono es el 0,04% de la atmósfera. Debido a que Kepler-62f está mucho más lejos de su estrella de lo que la Tierra está del Sol, sería necesario que tuviera mucho más dióxido de carbono para ser lo suficientemente caliente como para mantener agua líquida en la superficie, y para evitar la congelación.
El equipo realizó simulaciones por ordenador en las que contemplaba los siguientes escenarios para Kepler-62f:
-Una atmósfera cuyo espesor oscila desde el de la Tierra hasta doce veces más grueso.-Varias concentraciones de dióxido de carbono en su atmósfera, que van desde la misma cantidad que está en la atmósfera de la Tierra hasta 2.500 veces ese nivel.-Varias configuraciones posibles de su trayectoria orbital.
Dentro de todas esas hipótesis, encontraron muchos escenarios que permiten al planeta ser habitable, asumiendo diferentes cantidades de dióxido de carbono en su atmósfera. Shields estima que para que el planeta sea consistentemente habitable durante todo el año, se requeriría una atmósfera que es de tres a cinco veces más gruesa que la de la Tierra y compuesta en su totalidad de dióxido de carbono. (Esto sería análogo a la sustitución de cada molécula en la atmósfera de la Tierra con dióxido de carbono, lo que significa que el planeta tendría 2.500 veces más dióxido de carbono en su atmósfera).
Congelado
Tener una concentración tan alta de dióxido de carbono sería posible para el planeta porque, dado lo lejos que está de su estrella, el gas podría acumularse en la atmósfera cuando las temperaturas se enfrían para mantener el planeta caliente. «Pero si no tiene un mecanismo para generar gran cantidad de dióxido de carbono en su atmósfera para mantener la temperatura cálida, y todo lo que tiene es una cantidad de dióxido de carbono similar a la Tierra, ciertas configuraciones orbitales podrían permitir que la temperatura de la superficie de Kepler-62F estuviera por encima de la congelación durante una parte de su año», explica.
Los científicos calcularon la órbita y el clima del exoplaneta, el término para designar a los mundos fuera del Sistema Solar, con novedosos modelos informáticos. Shields cree que la misma técnica podría aplicarse para entender si exoplanetas mucho más cerca de la Tierra podrían ser habitables, siempre que parezcan ser rocosos.
Los científicos no saben si podría existir vida en un exoplaneta, pero Shields es optimista sobre la búsqueda de vida en el Universo. Más de 2.300 exoplanetas han sido confirmados, y algunos otros miles se consideran candidatos. Sin embargo, sólo un par de docenas están en la «zona habitable», lo que significa que orbitan su estrella a una distancia que les permite ser lo suficientemente cálidos como para tener agua líquida en su superficie. Los nuevos telescopios que están en camino pueden ayudar a ampliar esta lista para la esperanza.