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¿Tendrá memoria el Universo?
por Emilio Silvera ~ Clasificado en Física de vacío ~ Comments (1)
Lo que pasó siempre deja un rastro que nos cuenta la historia del suceso. Las nebulosas son el resultado de la “muerte” de una estrella que, al final de su vida, si es masiva, explosiona como supernova sembrando el espacio de los materiales que conforma sus capas exteriores y que son expulsados al Espacio Interestelar. De esos materiales nacerán nuevas estrellas y nuevos mundos, y, ¿Quién sabe? si nuevas formas de vida. En las Nebulosas han sido halladas moléculas de materiales y aminoácidos necesarios para la vida.
Todo lo que vemos en el Universo nos cuenta una historia
Así que, en cierta manera sí. El Universo tiene y conserva (como ocurre en la Tierra), las reliquias de su pasado. A lo largo y a la ancho del Cosmos podemos encontrar muestras de objetos que nos cuentan lo que antes pasó en el Universo. Una supernova es el momento de la explosión de una estrella masiva, debido a que la presión para mantener todos los átomos nucleares es insostenible. “La simetría es la armonía de posición de las partes o puntos similares unos respecto de otros, y con referencia a un punto, línea o plano determinado. Una estrella tiene forma esférica, por lo tanto se espera que si la explosión es en todas las direcciones, su remanente también presente la misma apariencia simétrica. Sin embargo los remanentes de las supernovas no son simétricos. Una posible causa de asimetría en remanentes de supernovas consiste en la variación de masas de los elementos de la estrella.
Dentro del remanente del Cangrejo, cuando profundizamos un poco, podemos decubrir con asombro, como un objeto de inmensa energía magnética, gira y gira de manera frenética. De hecho, en la Nebulosa del Cangrejo (también conocida como M1, NGC 1952, Taurus A … En su centro vive un púlsar, denominado PSR0531+121, que gira sobre sí …. entre 28 y 30 kilómetros; emite pulsos de radiación cada 33 milisegundos. … Se trata de uno de los escasos remanentes de supernova que pueden …
El púlsar PSR0531+121 que “vive” dentro del remanente del Cangrejo
Los restos de una estrella que explotó hace casi mil años forman la nebulosa del Cangrejo, una de los objetos más bellos del cielo y cuyos filamentos de plasma son estudiados por los Astronomos que, de esta manera, llegan a comprender la evolución de la materia a partir de los sucesos más energéticos del Universo.
Si observamos el Universo como un todo, podemos localizar que en él se manifiestan correlaciones bien afinadas que desafían todo lo que nos dicta nuestro sentido común. Unas de esas correlaciones pueden estar situadas en el nivel cuántico, donde, cada partícula que haya ocupado alguna vez el mismo nivel cuántico de otra partícula permanece relacionada con ella, de una misteriosa manera no energética.
Algunos creen que el cerebro estaría conectado con el cosmos a escala cuántica. Este vínculo podría explicar cómo de los procesos cerebrales físicos emerge la consciencia. Nos asombramos ante tan extraño y maravilloso hecho y nos preguntamos: ¿Cómo pueden los procesos cerebrales físicos far lugar a la consciencia, que es inmaterial? En la actividad entre la actividad neuronal y la escala cuántica del cosmos podría estar la respuesta. Sin embargo, ¿cómo poder comprender?
Sabemos que, la teoría de la evolución post-darwiniana y la biología cuántica descubren enigmáticas correlaciones similares en el organismo y entre el organismo y su entorno. Todas las correlaciones que salen a la luz en las investigaciones más avanzadas sobre la conciencia vienen a resultar igual de extrañas: tienen la forma de conexiones temporales entre la conciencia de una persona y el cuerpo de otra. Al parecer, las redes de conexiones que constituyen un Cosmos Evolutivo Coherente, para el enmarañamiento cuántico, para la conexión instantánea entre organismos y entornos y entre las conciencias entre distintos e incluso distantes seres humanos, tienen una única explicación, que es la misma en todos los casos.
La mayor parte de las neuronas posee una estructura arbórea formada en su mayor parte por dendritas que, conectadas a otras neuronas, se encargan de recibir y enviar información mediante conexiones sin fin. Esta obra de la Naturaleza, no siempre tiene explicación para nosotros, los humanos, tan ignorantes aún. Muchas veces hemos dicho aquí que a partir de la “materia inerte” llegamos a los pensamientos.
¿Será posible que, además de materia y energía, en el Universo pueda existir algún otro elemento muy sutil, aunque no por eso menos real: información en forma de “in-formación” activa y efectiva que puede conectar todas las cosas presentes en el espacio-tiempo, de manera tal que, exista una especie de memoria en el Universo que, cuando ahondamos en la observación y el estudio, allí se nos aparece y la podemos “ver” tan real como podemos ver a las estrellas.
Algunos dicen que; “Las interacciones en los dominios de la Naturaleza, así como en los de la Mente, están medidas por un campo fundamental de información en el corazón del Universo”. Así, todo el Universo es un contenedor de información dinámico que evoluciona y acumula más información a medida que el tiempo transcurre y su dinámica “viva” no deja de crear para que nada permanezca y todo se transforme.
La Nebulosa de Orión (cuyo material una vez, formó parte de una estrella masiva) y, se trata de una enorme nube de turbulencia del gas, con una formación de hidrógeno, que es iluminada por brillantes estrellas jóvenes y calientes, incluyendo una estrella llamada Trapezium, que están en vías de desarrollo dentro de la nebulosa. Esa es la dinámica a que antes me refería y que, en el Universo está presente de mil formas distintas.
Pero claro, el Universo es grande y complejo, muchas son las cosas que de él desconocemos, y, si nos preguntamos, por ejemplo, ¿Qué es el vacío cuántico? podemos responder conforme a la información que actualmente tenemos pero, ¿es la respuesta la adecuada?
El concepto de espacio-tiempo como medio físico lleno de energía virtual fue emergiendo gradualmente a lo largo del siglo XX. Al comienzo del siglo se pensaba que el espacio estaba ocupado por un campo energético invisible que producía rozamiento cuando los cuerpos se movían a través de él y ralentizaba su movimiento. Todos conocemos eso como la Teoría del Éter Lumínico o Luminífero. Cuando ese rozamiento no se pudo detectar con el experimento de Michelson-Morley, el éter quedó rechazado de la imagen del mundo físico. Sin embargo, se cree que algo permea todo el espacio.
Sus genios quedaron atrás, ahora el mundo necesita nuevos caminos, nuevos conceptos, nuevas energías. ¿Podrán, algún día, las energías llamadas de Punto Cero, suplir a estas otras de origen fósil que se agotaran en unas pocas décadas? Claro que las cosas no siempre son lo que parecen y, lo único que necesitamos es la capacidad intelectual para saber “ver” lo que hay. Siempre ha pasado igual, hemos creado teorías que más tarde, cuando se adquirieron nuevos conocimientos, tuvieron que ser desechadas y tomar las nuevas que nos decían otra realidad de cómo funcionaba la Naturaleza.
El vacío perfecto no existe… ¡Siempre hay!
Hace tiempo que se llegó a demostrar que, el vacío cósmico estaba lejos de ser espacio vacío. En las Teorías de Gran Unificación (GUT) que fueron desarrolladas durante la segunda mitad de ese siglo XX, el concepto de vacío se transformó a partir del espacio vacío en el medio que transporta el campo de energías de punto cero que, son energías de campo que han demostrado estar presentes incluso cuando todaqs las formas clásicas de energía desaparecen: en el cero absoluto de temperatura. En las teorías unificadas subsiguientes, las raíces de todos los campos y las fuerzas quedan adscritas a ese mar de energía misterioso denominado “vacío unificado”.
“Los solitones son ondas que aparecen en medios no lineales y se comportan como “partículas” al mantener su forma y velocidad al propagarse, incluso tras interaccionar con otros. Los solitones brillantes (oscuros) son resultado de un exceso (defecto) en la densidad del medio; son muy robustos porque resultan del tira y afloja de dos efectos opuestos, la dispersión y la no linealidad. Se publica en Nature la observación de solitones oscuros en un gas cuántico ultrafrío de átomos de litio-6 (fermiones) con interacción fuerte. Lo sorprendente del nuevo trabajo de físicos del MIT (Cambridge, Massachusetts, EEUU) es que la velocidad de propagación de estos solitones oscuros difiere de las predicciones teóricas para superfluidos con interacción débil en un factor de hasta 20, lo que indica que aún no entendemos bien el régimen de interacción fuerte.”
Allá por los años sesenta, Paul Dirac demostró que las fluctuaciones en los campos fermiónicos producían una polarización de vacío, mediante la cual, el vacío afectaba a la masa de las partículas, a su carga, al spin o al momento angular. Esta es una idea revolucionaria, ya que, en este concepto el vacío es más que el continuo tetradimensional de la Teoría de la Relatividad: no es sólo la geometría del espacio-tiempo, sino un campo físico real que produce efectos físicos reales.
La interpretación física del vacío en términos del campo de punto cero fue reforzada en los años 70 , cuando Paul Davis y William Unruth propusieron la hipótesis que diferenciaba entre el movimiento uniforme y el acelerado en los campos de energía de punto cero. El movimiento uniforme no perturbaría el ZPF, dejándolo isotrópico (igual en todas las direcciones), mientras que el movimiento acelerado produciría una radiación térmica que rompería la simetría en todas las direcciones del campo. Así quedó demostrado durante la década de los 90 mediante numerosas investigaciones que fueron mucho más allá de la “clásica” fuerza Casimir y del Desplazamiento de Lamb, que han sido investigados y reconocidos muy rigurosamente.
De las Placas Casimir ¿Que podemos decir? es bien conocido por todos que dos placas de metal colocadas muy cerca, se excluyen algunas longitudes de onda de las energías del vacío. Este fenómeno, que parece cosa de magia, es conocido como la fuerza de Casimir. Ésta ha sido bien documentada por medio de experimentos. Su causa está en el corazón de la física cuántica: el espacio aparentemente vacío no lo está en realidad, sino que contiene partículas virtuales asociadas con las fluctuaciones de campos electromagnéticos. Estas partículas empujan las placas desde el exterior hacia el interior, y también desde el interior hacia el exterior. Sin embargo, sólo las partículas virtuales de las longitudes de onda más cortas pueden encajar en el espacio entre las placas, de manera que la presión hacia el exterior es ligeramente menor que la presión hacia el interior. El resultado es que las placas son forzadas a unirse.
También aparecen otros efectos, algunos científicos han postulado que la fuerza inercial, la fuerza gravitatoria e incluso la masa eran consecuencia de interacción de partículas cargadas con el ZPF. Es todo tan misterioso.
Debido a que el Universo es finito, en los puntos críticos dimensionales, las ondas se superponen y crean ondas estacionarias duraderas. Las ondas determinan interacciones físicas fijando el valor de la fuerza Gravitatoria, la Electromagnética, y las fuerzas nucleares Débil y Fuerte. Estas son las responsables de la distribución de la materia a través del Cosmos pero, a quién o a qué responsabilizamos de esa otra clase (hipotética) de materia que, al parecer está por ahí oculta. ¿Tendrá, finalmente el vacío algo que ver con ella?
El Observatorio de rayos X Chandra, el tercero de los grandes observatorios de la NASA, ha descubierto un excepcional objeto según la página web de la propia NASA, y, de la misma manera, hay descubrimientos recientes que confirman la presencia de ondas de presión en el vacío. Utilizando el Observatorio de rayos X Chandra, los Astrónomos han encontrado una onda generada por el agujero negro super-masivo en Perseus, a 250 millones de años luz de la Tierra. Esta onda de presión se traduce en la onda musical Si menor. Se trata de una nota real, que ha estado viajando por el espacio durante los últimos 2.500 millones de años. Nuestro oído no puede percibirla, porque su frecuencia es 57 octavas más baja que el Do medio, más de un millón de veces más grande de lo que la audición del hombre puede percibir.
Los siete colores del Arco Iris: Rojo, Naranja, Amarillo, Verde, Azul, Añil y Violeta. El arco iris es un fenómeno óptico y meteorológico que produce la aparición de un espectro de frecuencias de luz continuo en el cielo cuando los rayos del sol atraviesan pequeñas gotas de agua contenidas en la atmósfera terrestre.
Recuerdos de la niñez y los Siete pecados capitales: Lujuria, Gula, Avaricia, Pereza, Ira, Envidia, Soberbia. Los siete pecados capitales son una clasificación de los vicios mencionados en las primeras enseñanzas del cristianismo para educar a sus seguidores acerca de la moral cristiana. En los colegios de entonces, nos predicaban estas cosas que, como suele ocurrir, cuando de niño te machacan una y otra vez con estos cánticos… ¡Set te quedan grabados!
Las Siete notas musicales: Do, Re, Mi, Fa, Sol, La y Si Los nombres de las notas musicales se derivan del poema Ut queant laxis del monje benedictino friulano Pablo el Diácono, específicamente de las sílabas iniciales del Himno a San Juan Bautista. Las frases de este himno, en latín, son así: Ut queant laxis/Resonare…
Se dijo que Dios creó el mundo en siete días: Lunes, Martes, Miércoles, Jueves, Viernes, Sábado y Domingo. Los siete cuerpos celestes que dieron lugar a estos nombres fueron la Luna, Marte, Mercurio, Júpiter, Venus, Saturno y el Sol. En español, sábado procede de la fiesta hebrea “Sabbat” y domingo de la palabra latina “Dominus”, el señor… Como podéis ver, el pasado siempre estará con nosotros. Incluso el nombre de algunas constelaciones provienen del pasado, de otras civilizaciones que dejaron señalado el camino. Siempre ha sido así y lo seguirá siendo.
Las sumas de las caras opuestas de un Dado, siempre es igual a Siete: 1+6; 2+5; 3+4
También decimos que un gato tiene Siete vidas: En el mundo hispano hablante se dice que los gatos tienen siete vidas. La creencia en las siete vidas del gato tiene un origen tanto supersticioso como esotérico. No cabe duda de que la excepcional resistencia del gato, su capacidad de salir indemne ante las situaciones más complicadas.
Muchas más serían las cosas relacionadas con el Número Siete. De todas las maneras, ¡cómo somos los humanos! a todo le tenemos que sacar punta… Lo dicho, nuestra curiosidad que nos lleva en volandas hacia la Casa de la Sabiduría que, ¡está en tantos lugares!
¡AH! Yo tengo Siete Hijos
emilio silvera
el 21 de marzo del 2021 a las 6:47
Si, el Universo tiene memoria y no lo cuenta todo. Lo que ha pasado es que, al principio, nosotros no teníamos oído oara escuchar lo que nos decía (al decir oído he querido decir conocimiento para entender lo que veíamos). Ahí están todas las huellas del pasado más o menos lejano, simplemente hay que observar y entender lo que estamos viendo.
Hoy por ejemplo, podemos hablar de lo que es un remanente estelar (de supernova), es decir, la estrella masiva que, agotado su combustible nuclear de fusión, expulsa gran parte del material estelar al Espacio Interestelar a una gran velocidad cercana a los 3.000 Km/s., ésta estructura nebulosa es la resultante de una enorme explosión. El resto de la Supernova está rodeado por una onda de choque que se expande más y más esparciendo el material por una inmensa región.
Dependiendo de la masa de la estrella que explosiona eyectando parte de su masa al Espacio, el resto de la masa de la estrella moribunda, implosiona, es decir, se contrae bajo su propio peso y la fuerza de gravedad que genera la aplasta literalmente, dejando una estrella de Neutrones o, si es muy masiva, un Agujero negro.
Del material eyectado, con el paso de los años, se forman anomalías gravitatorias y se forman enormes “grumos” que se van densificando en el centro a medida que giran atrayendo más y más material, y, de esa manera, cuando la temperatura del centro es muy alta, los átomos de Hidrógeno se fusionan y nace una estrella nueva.
Este es, de forma muy reducida, uno de los episodios que el Universo nos “cuenta” de los muchos que hemos podido “escuchar” cuando observamos con los grandes telescopios espaciales especializados para diversas ramas de la radiación que dichos objetos pueden emitir.
Sí, el Universo tiene memoria y le gusta contarnos sus historias.