Dic
19
El otro Galileo
por Emilio Silvera ~ Clasificado en General ~ Comments (0)
¡Qué cosas!
“Me gustaría deciros, a vosotros que preparáis la celebración del 350 aniversario de la publicación de la gran obra de Galileo Galilei, Dialoghi sui due massimi sistema del mondo, que la experiencia de la Iglesia, durante el caso Galileo y después, la ha llevado a una actitud más madura y a una comprensión más exacta de la autoridad que le es propia. Repito ante vosotros lo que afirmé ante la Academia Pontificia de Ciencias el 10 de noviembre de 1979:
“Espero que los teólogos, los eruditos y los historiadores, animados por un espíritu de sincera colaboración, estudiarán el caso de Galileo con mayor profundidad y, en franco reconocimiento de los errores, sean del lado que sean, disiparán la desconfianza que todavía constituye un obstáculo, en los espíritu de muchos, para fructificar concordia de la ciencia y la fe”.
Su Santidad el papa Juan Pablo II, 1986
Vincenzo Galilei
Dic
18
Elo ojo desnudo no ve los Espacio Vacíos de la materia
por Emilio Silvera ~ Clasificado en General ~ Comments (0)
Es bien sabido que los átomos están conformados, en su mayor parte, por espacios vacíos. Veamos.
Dic
18
Aquella triste cancioncilla
por Emilio Silvera ~ Clasificado en General ~ Comments (0)
De esto nos hablaban en el colegio a todos los niños por estas fechas
Hay cosas que nunca olvidamos. Cuando era un niño y vivía con mis padres y mis tres hermanos, yo dormía en una habitación que daba a la calle que podía ver por la ventana. En estas fechas navideñas, aparte del jolgorio natural de las fiestas y de las visitas a los nacimientos (eran otros tiempos), la gente acostumbraba a formar reuniones de familias y celebrar, después de la cena, la Navidad con canciones apropiadas al evento que se conmemoraba.
Recordémoslo él no estará este fin de año con nosotros
Recuerdo que siempre me quedaba dormido y, casi arrastras, podía llegar a la cama que cogía con tantas ganas que era llegar a ella y caer en profundo sueño. Generalmente, era despertado al amanecer por algunos que seguían la fiesta por las calles cantando a voz en grito y, una de aquellas cancioncillas, nunca me dejó, cuando llegan estos días, su recuerdo vuelve y, como cuando era pequeño, vuelvo a oír aquellas voces cantar:
Los Campanilleros de la Virgen de la Cinta en Huelva
Con gran algarabía recorrían las calles los campanilleros cantando canciones como esta:
El año nuevo ya viene
el año viejo se va,
y nosotros nos iremos
y no volveremos más.
Eran cantares muy tristes
con un fondo de verdad,
no había temor a la muerte
era cosa natural.
tampoco miedo a la vida
la sabían disfrutar.
Se reunían en la mesa,
esa mesa familiar.
donde siempre había un lugar y
no faltaba nunca un pan.
A las doce se reunían
en la plaza principal.
Zambombas y panderetas,
turrones y mazapán.
Todo el mundo se abrazaba
se daban besos de paz.
Algunos se emocionaban
no dejaban de llorar,
ni tampoco de cantar.
El recuerdo de una pena
tal vez de felicidad.
Un amor que se ha perdido,
un familiar que no está.
El año viejo se ha ido
y nunca más volverá.
Los años se van volando y
la vida los ve pasar.
El Nuevo año ha llegado
todo el mundo a festejar y,
cuando pasa la euforia,
todo el mundo a trabajar.
¡Feliz Año Nuevo! a todos los amigos de este lugar y, también, para todos en general. Aprovecho la oportunidad para haceros una recomendación:
Ahora que podéis, decirle a la persona amada cuánto la queréis.
No dejéis pendiente, por más tiempo, esa buena obra que puedes hacer.
Es triste mirar hacia atrás y, al recordar, decirte a ti mismo… ¡Si hubiera…!
La vida es corta, muy corta, y, si no tenemos claras las prioridades, cuando queremos darnos cuenta…¡es tarde! No siempre se puede rectificar y, algunas veces, cuando se hace a destiempo, los efectos pueden ser contrarios a los esperados. Pensad que no siempre lo mejor es lo más caro, ni la felicidad se compra con tesoros.
Si quieres te querrán y, como decimos en física, todo es causa de lo que antes pasó, es su consecuencia.
¡Sed felices!
emilio silvera
Dic
18
Un año más… ¡Un año menos!
por Emilio Silvera ~ Clasificado en General ~ Comments (0)
A finales del pasado año, os dejaba aquí nuestros buenos deseos que, desgraciadamente, no se están cumpliendo y, cada día, podemos ver el deterioro al que se ha llegado en muchas naciones: el paro y la pobreza inundan las casas de muchas familias, llevando la humillación y la desesperación a padres de familia que, impotentes, contemplan a la clase política que continúan disfrutando de sus privilegios. ¿Cómo podríamos revertir ésta nefasta situación?
Con el mayor deseo de bienestar para todos, os decíamos: Unas felices fiestas en familia
Este año en muchos hogares la reunión familiar será más triste, El Gobierno nos empobrece
Los artífices de este humilde lugar, Shalafi como Administrador y experto informático y emilio silvera como “obrero” imaginativo de la divulgación científica, no tienen más remedio que, desde aquí, mostrar su agradecimiento a los muchos amigos que nos han distinguido con su presencia en tan humilde y sencillo lugar desde el que hemos tratado (no siempre con acierto) de llevar a todos, un poco del conocimiento del mundo, del saber del Universo, de los secretos de la Naturaleza, de las complejidades de la Mente, del origen de la Vida y, de nuestro destino en las estrellas.
Que vuelva la normalidad y la felicidad en todos los hogares
A nuestros amigos de habla hispana, a los que están más allá del atlántico y se entienden en otras lenguas, a todos ellos, les quedamos muy agradecidos por habernos hecho compañía y haber compartido con nosotros sus pensamientos y, para aquellos que nunca alzaron su voz pero nos leyeron en silencio, que sepan y estén seguros, de que son parte de este lugar por derecho propio, a todos ellos, sin excepción, les enviamos desde aquí, el más sincero deseo de felicidad para ellos y sus familias, y, sobre todo… ¡Que la salud les acompañe!
La mejor manera de pasar las fiestas, en familia
Sí, puede que sólo sea un año más. Sin embargo, seguimos estando aquí para ser testigos de las muchas cosas que se verán durante los próximos doce meses. En todos los ámbitos del saber humano: Física, Astronomía, Biología y Química y tantas otras disciplinas, todas ellas (sin excepción) apoyadas en las Matemáticas, las raíces del árbol de la Ciencia, las otras son las ramas que salen y crecen sin cesar hasta llegar…¡A las estrellas!
Como en ocasiones anteriores, la Ciencia alejará de nosotros ese mal que nos acecha
La Navidad (así nos lo enseñaron desde nuestra más tierna infancia), es el sentimiento que vuelve al corazón de las personas, la generosidad de compartirla con otros y la esperanza de seguir adelante. Cada uno de nosotros pasará el fin de año a su manera, dentro de las costumbres de su lugar de nacimiento. Sin embargo, en una cosa todos seremos iguales (salvo excepciones por distintos motivos), todos procuraremos estar con los seres queridos y recordaremos a los ausentes, los que se fueron y que, de alguna manera, también estarán en nuestros corazones.
Imágenes como la de arriba dice poco en nuestro favor que lo consentimos
Acordémonos, dentro de lo posible, de los que no tienen tanta suerte. En la imagen de arriba, conforme a los datos que tenemos, podemos contemplar, junto a dos de sus cuatro perros a un sin techo en Santiago de Chile. Le dijo a la autora de la foto, Pilar Almagro Paz, que era español de Carballo, Ourense, Galicia. Curiosamente, a Pilar le costó fotografiarlo, el pudor y la dignidad estaban ahí, como en todos los seres humanos. Como él, muchos otros están repartidos por todas las ciudades del mundo. Al verlo, al pensar que, como todos debe tener una familia…, ¿No sentís un estremecimiento? Nadie sabe las vueltas que el mundo puede dar y, ¿Quién sabe las historias que llevaron a este pobre hombre a tal situación?
No son invisibles y tienen sentimientos
Calladamente y dentro de lo posible, hagamos lo que buenamente podamos por aquellos que no tuvieron tanta suerte como nosotros y, solos, sumidos en la triste soledad en estos días de familia y sin amigos, démosle un poco de lo que tengamos que, de seguro, nos dará más satisfacción que otras “cosas” que no llevarán una carga de humanidad tan profunda como esta que arriba podemos contemplar. ¡Qué barbaridad! Cosas así deberían ser erradicadas para siempre.
Ahí está nuestro hogar pero, unos, estarán más abrigados que otros
Seamos felices haciendo felices a otros. La mayor parte de nuestro tiempo no prestamos atención, la vorágine de la vida moderna nos arrolla, estamos inmersos en un mundo cada vez más deshumanizado y, los sentimientos, se quedan en el reducido ámbito familiar. Pero, la cosa no es tan sencilla y debemos despertar a esa realidad que nos grita: ¡Todos somos uno! Ser Humanos es sentir el dolor ajeno como propio.
Acordémonos de los demás.
¡Felicidades para todos! y, sobre todas las cosas que, ¡La Salud esté con vosotros!
Un abrazo colectivo para esta gran familia.
emilio silvera
Dic
17
¿El Misterio? Persistirá, ¡como el Tiempo!
por Emilio Silvera ~ Clasificado en General ~ Comments (1)
Tras un largo y penoso caminar por el planeta Tierra …
Los habitantes de este mundo, hemos conseguido construir un cuadro plausible del Universo, de la Naturaleza que tratamos de comprender. Hemos llegado a ser conscientes de que, en ella, en la Naturaleza, están todas las respuestas que buscamos y, nosotros mismos no hemos llegado a conocernos por ese mismo hecho de que, formando parte de la Naturaleza, y, también, somos parte del enigma que tratamos de desvelar.
Parece que ahora estamos entrando en la edad adulta, quiero significar que después de siglos y milenios de esporádicos esfuerzos, finalmente hemos llegado a comprender algunos de los hechos fundamentales del Universo, conocimiento que, presumiblemente, es un requisito de la más modesta pretensión de nuestra madurez cosmológica.
Sabemos, por ejemplo, dónde estamos, que vivimos en un planeta que gira alrededor de una estrella situada en el borde de la Galaxia espiral a la que llamamos Vía Láctea, cuya posición ha sido determinada con respecto a varios cúmulos vecinos que, en conjunto, albergan a unas cuarenta mil galaxias extendidas a través de un billón de años-luz cúbicos de espacio.
También sabemos más o menos, cuando hemos entrado en escena, hace unos cinco mil millones de años que se formaron el Sol y los planetas de nuestro Sistema Solar , en un Universo en expansión que probablemente tiene una edad entre dos y cuatro veces mayor. Hemos determinado los mecanismos básicos de la evolución de la Tierra, hallado prueba también de evolución química a escala cósmica y hemos podido aprender suficiente física como para comprender e investigar la Naturaleza en una amplia gama de escalas desde los Quarks saltarines en el “mundo” microscópico hasta el vals de las galaxias.
El Tiempo inexorable nunca dejó de fluir y mientras eso pasaba, nuestra especie evolucionaba, aprendía al observar los cielos y cómo y por qué pasaban las cosas. Hay realizaciones humanas de las que, en verdad, podemos sentirnos orgullosos.
El Zigurat sumerio y los jardines colgantes de Babilonia
Emperadores Chinos y Faraones de Egipto
Aquellos habitantes de Sumer y Babilonia, de Egipto o China y también de la India y otros pueblos que dejaron una gran herencia de saber a los Griegos que pusieron al mundo occidental en el camino de la ciencia, nuestra medición del pasado se ha profundizado desde unos pocos miles de años a más de diez mil millones de años, y la del espacio se ha extendido desde un cielo de techo bajo no mucho mayor que la distancia que nos separa de la Luna hasta el radio de más de diez mil millones de años-luz del universo observable.
Tenemos razones para esperar que nuestra época sea recordada (si por ventura queda alguien para recordarlo) por sus contribuciones al supremo tesoro intelectual de toda la Humanidad unida al contexto del Universo en su conjunto por unos conocimientos que, aunque no suficiente, sí son los necesarios para saber dónde estamos y, ahora, debemos buscar la respuesta a esa pregunta: ¿Hacia dónde vamos?
Claro que…, ¡el futuro es incierto!
Como en la física, en el mundo y en nuestras vidas, también está presente el principio de incertidumbre y, de ninguna manera, podemos saber del mañana. Sin embargo, cuanto más sabemos del universo, tanto más claramente comprendemos lo poco que sabemos de él. La vastedad del Universo nos lleva a poder comprender algunas estructuras cósmicas y mecanismos que se producen y repiten como, el caso de la destrucción que nos lleva a la construcción. Es decir, una estrella masiva vieja explota y siembre el Caos y la destrucción en una extensa región del espacio, y, es precisamente ese hecho el que posibilita que, nuevas estrellas y nuevos mundos surjan a la vida. Sin embargo, la grandeza, la lejanía, esa inmensidad que se nos escapa a nuestra comprensión terrestre, nunca nos dejará comprender el universo en detalle y, siendo así, siempre tendremos secretos que desvelar y misterios que resolver.
Si añadimos a todo eso que, si poseyésemos un atlas de nuestra propia Galaxia y que dedicase una sola página a cada sistema estelar de la Vía Láctea (de modo que el Sol y sus planetas estuviesen comprimidos en una página), tal atlas tendría más de diez mil millones de volúmenes de diez mil páginas cada uno. Se necesitaría una biblioteca del tamaño de la de Harvard para alojar el Atlas, y solamente ojearlo al ritmo de una página por segundo nos llevaría más de diez mil años. Añsdánce los detalles de la cartografía planetaria, la potencial biología extraterrestre, las sutilezas de los principios científicos involucrados y las dimensiones históricas del cambio, y se nos hará claro que nunca aprenderemos más que una diminuta fracción de la historia de nuestra Galaxia solamente, y hay cien mil millones de galaxias más.
Sabiendo todo todo esto, siendo consciente de que, realmente, es así, tendremos que convenir con el físico Lewis Thomas cuando dijo: “El mayor de todos los logros de la ciencia del siglo XX ha sido el descubrimiento de la ignorancia humana”.
El “ignorante” sabio
La ignorancia, como todo en el Universo, es relativa. Nuestra ignorancia, por supuesto, siempre ha estado con nosotros, y siempre seguirá estando, es una compañera con la que cargamos toda nuestra vida y que nos pesa. Algunos procuramos que pese lo menos posible para hacer más llevadero el viaje. Lo nuevo está en nuestras consciencias y de ellas, ha surgido nuestro despertar al comprender de sus abismales dimensiones, y es eso más que otro cosa, lo que señala la madurez de nuestra especie. El espacio puede tener un horizonte y el tiempo un final pero la aventura del aprendizaje siempre será interminable y eterno, quizá (no me he parado a pensarlo) pueda ser esa la única forma de eternidad que pueda existir.
La ciencia tiene límites. Foto CC-BY Galería de NASA
La dificultad de explicarlo todo no se debe a nuestra debilidad mental, sino a la estructura misma del universo. En los últimos siglos hemos descubierto que la trama del cosmos puede abordarse en varios niveles diferentes. Mientras no se descubre el siguiente nivel, lo que ocurre en el anterior no se puede explicar, sólo puede describirse. En consecuencia, para el último nivel que se conoce en cada momento nunca hay explicaciones, sólo puede haber descripciones.
Teorema de incompletitud de Kurt Gödel
La Ciencia es intrínsicamente abierta y exploratoria, y comete errores todos los días. En verdad, ese será siempre su destino, de acuerdo con la lógica esencial del segundo teorema de incompletitud de Kurt Gödel. El teorema demuestra que la plena validez de cualquier sistema, inclusive un sistema científico, no puede demostrarse dentro del sistema. Es decir, tiene que haber algo fuera del marco de cualquier teoría para poder comprobarla. La lección que podemos haber aprendido es que, no hay ni habrá nunca una descripción científica completa y comprensiva del universo cuya validez pueda demostrarse.
No es que pertenezcamos al Universo, formamos parte de él
Y, a todo esto, debemos alegrarnos de que así sea, de que no podamos comprender el Universo en toda su inmensa dimensión y diversidad. Nuestras mentes necesitan que así sea y, tendrán, de esa manera, el escenario perfecto para seguir creciendo a medida que busca todas esas respuestas que nos faltan y, lo bueno del caso es que, cada respuesta que encontramos, viene acompañada de un montón de nuevas preguntas y, de esa manera, esa historia interminable de nuestra aventura del saber…llegará hasta la eternidad de nuestro tiempo que, necesariamente, no tiene por que ser el tiempo del universo.
emilio silvera.