May
6
La que se nos viene encima
por Emilio Silvera ~ Clasificado en General ~ Comments (0)
May
6
Existen otras Tierra que debemos encontrar
por Emilio Silvera ~ Clasificado en General ~ Comments (0)
Estrellas como el Sol, solo en la Vía Láctea, existen unos 30.000 Millones. ¿Os imagináis cuantos sistemas planetarios habrá? Y, en estos sistemas planetarios, cuantos de esos planetas podrían estar en la zona habitable?
El problema que se nos presenta es el de siempre… ¡Las distancias que nos separan! Y, la insuficiente tecnología que actualmente tenemos para llevar con pleno éxito estas misiones a buen término.
Próxima Centauri b), es un planeta prometedor que orbita a Próxima Centauri, y, con nuestros medios de hoy, podríamos tardar unos 30.000 años en llegar. Y, no digamos de los inconvenientes e imprevistos del largo camino, y, a todo eso, podríamos preguntar que, en ese tiempo se sucederían muchas generaciones que viajando en la ingravidez…. ¿No mutarían?
Seguramente, los viajeros que llegaran al planeta Próxima b… ¡No serían humanos!
May
6
Otra vez Marte
por Emilio Silvera ~ Clasificado en General ~ Comments (0)
May
5
Lo que tenga que pasar… ¡Pasará! El futuro es incierto
por Emilio Silvera ~ Clasificado en General ~ Comments (6)
Claro que, algunas cosas son bien sabidas. Lo que no sabemos es si estaremos aquí cuando sucedan. Aunque Andrómeda viene hacia nosotros a gran velocidad, la distancia es grande y, para cuando llegue… ¿Dónde estará la Humanidad?
Un estudio de varios astrónomos de la NASA, que operan el Telescopio Espacial Hubble, han conseguido cartografiar con detalle el halo de Andrómeda. Es decir, la envoltura de gas que la rodea. También han descubierto que la Vía Láctea y la Andrómeda ya han chocado entre sí.
Sin embargo, lo más sorprendente fue que ese halo se extiende hasta 1,3 millones de años luz de la galaxia. También han comprobado que se extiende hasta dos millones de años luz en otras direcciones.
Esto significa que la Andrómeda y la Vía Láctea ya chocan entre sí. El halo de la Andrómeda y el de la Vía Láctea ya se tocan.
“Comprender los enormes halos de gas que rodean a las galaxias es inmensamente importante”, explica la investigadora Samantha Berek, de la Universidad de Yale.
El halo de la Andrómeda está hecho de un gas ionizado y enrarecido que no emite radiación detectadle. Por lo que rastrear la absorción de luz es una mejor manera de sondear este material.
Cuando el momento llegue, estarán bailando un Valls durante un tiempo, hasta que se fusionen para la eternidad. Será una gran galaxia
La Galaxia Andrómeda se nos acerca a una velocidad de 400.000 kilómetros por hora (o, nosotros nos acercamos a ella a esa velocidad, según se mire). La cuestión, aunque irreversible, no es tema de preocupación para nadie toda vez que, la distancia que nos separan de 2,3 millones de años-luz, nos habla de un tiempo cifrado en miles de millones de años para que el encuentro de produzca.
De tal encuentro se han hecho algunas simulaciones por ordenador y, en el primer contacto, la Vía Láctea, de menor tamaño, pasará a través de Andrómeda. El impacto arrancará una gran cola de estrellas. La escena coincide con algunas imágenes reales captadas por el Hubble en las que otras galaxias similares a Andrómeda y la Vía Láctea, ya ha tenido ese encuentro.
Simulación por ordenador del choque
Mucho es lo que se ha hablado de ese posible suceso futuro y, cada cual imagina a su manera lo que allí pasará: “El Sol no será dañado pero, sí desplazado de su lugar actual. Las estrellas están tan separadas las unas de las otras que no hay peligro de colisiones, y, finalmente, ambas galaxias, después de un baile en el que se acercan y separan distorsionadas por las fuerzas gravitatorias y los los vientos estelares, quedaran fundidas en una enorme galaxia.
Las galaxias conocidas como los ratones que están en esa fase de fusión
NGC 2207 e IC 2163 que se juntan en el baile que las llevará a la inexorable fusión
La Galaxia del Remolino con su galaxia satélite NGC 5195
Galaxia de las antenas. Éste es posiblemente el aspecto que presentarían vistas desde lejos la Vía Láctea y Andrómeda mientras se alejaran la una de la otra. Y, desde luego, viendo esta desgarrada imagen de las dos galaxias medio fundidas y desgarradas en el vaivén de la inercia y de la atracción gravitatoria, es difícil de imaginar que no ocurran auténticas catástrofes en todos los objetos que están ahí presente: Nebulosas que serán desgarradas, mundos que colisionaran con estrellas, estrellas de todo tipo que se fusionaran para hacerse estrellas mayores y más masivas. Agujeros negros giratorios que, al colisionar de manera violenta, saldrán despedidos hacia el espacio, otros, se podrán fusionar. Las explosiones, los vientos solares, la radiación gamma y ultravioleta… Todo eso presente en un inmenso revoltijo de los primeros momentos será un espectáculo asombroso que, con el paso de algunos miles o millones de años, se irá calmando hasta dejar una sola gran galaxia ¡Androlact!
Debe ser impresionante estar asomado al ventanal de tu casa y poder contemplar como se acerca Andrómeda hacia nosotros. La escena, aunque la podemos imaginar, nunca será lo mismo que si la pudiéramos vivir in situ. Por otra parte, no creo que el suceso sea tranquilo de contemplar como si de una puesta de Sol se tratara.
Algunos dicen que nuestro Sistema solar podría ser lanzado hacia el espacio sin sufrir daño alguno, o, por el contrario, resultar aniquilado por la enorme radiación que en el ambiente se formará debido a colisiones que destaran energías que ni podemos sospechar. Supernovas en explosión, inmensos Jets, Nebulosas creadas por eyecciones de material de estrellas masivas que se verán distorsionadas por los acontecimientos. De todo ello, saldrá con el tiempo una nueva y mayor galaxia que… ¡No será lo mismo! Ni Andrómeda ni la Vía Láctea existirán tal como la conocíamos y, los seres vivos… ¿Qué suerte correrán en todo esto, si no han podido escapar a lugares lejanos?
Según un estudio de la NASA, la Tierra dejará de ser habitable dentro de un período de tiempo que va de los 1.750 millones de años a los 3.250. A mí, tal resultado no me extraña en lo más mínimo. Sabemos que todo cambia y que nada permanece y, al fin y al cabo, dentro del Sistema solar, sus componentes son objetos dinámicos expuesto a cambios y transiciones de fase por motivos diversos, e incluso, imprevistos.
El destino de la Humanidad es un misterio, y, posiblemente, su salvación, estará en nuestras manos
Científicos llegan a esta conclusión por nuestra distancia del Sol y las temperaturas a las que es posible que el planeta tenga agua líquida, aunque estiman que la humanidad desaparecerá mucho antes, ya que, un estudio les lleva a pensar que el tiempo está marcado en º1.750 M de años, y, si es así, la fusión con Andrómeda, la conversión en gigante roja del Sol, y, posibles acontecimientos que ahora desconocemos, estarán lejos de nuestra presencia.
Esta foto de la NASA junto al reportaje, lo publicó ABC en su apartado de Ciencia
“Astrobiólogos de la británica Universidad de Anglia del Este (UEA) acaban de publicar en la revista Astrobiology una investigación en la que estiman el tiempo que le queda a nuestra querida bola azul para seguir resultando acogedora. La Tierra mantendrá de habitabilidad, según calculan, por lo menos otros 1.750 millones años, una conclusión que tiene en cuenta nuestra distancia del Sol y las temperaturas a las que es posible que el planeta tenga agua líquida. Después, la desolación.
¿Planetas habitables? ¡Muchos! La cuestión estriba en cómo llegar a ellos
El equipo se fijó en planetas recientemente descubiertos fuera de nuestro sistema solar (exoplanetas) como ejemplos para investigar su potencial para albergar vida. «Hemos utilizado el concepto de ‘zona habitable’ para hacer estas estimaciones, la distancia de un planeta a su estrella en la que las temperaturas son propicias para que tenga agua líquida en la superficie», explica Andrew Rushby, de la escuela de Ciencias Ambientales de la Universidad de East Anglia y responsable del estudio.
«Hemos utilizado los modelos de evolución estelar para estimar el final de la duración de la vida habitable de un planeta determinando cuándo dejará de estar en la zona habitable. Creemos que la Tierra dejará de ser habitable en algún dentro de 1.750 a 3.250 millones de años. Después de este punto, la Tierra estará en la ‘zona caliente’ del Sol, con temperaturas tan altas que los mares se evaporarán. Se producirá un evento de extinción catastrófico y terminal que afectará a todas las formas de vida», relata Rushby
Ellos fueron los primeros y… ¡También serán los últimos habitantes del planeta Tierra! Los microbios
Por supuesto, las para los seres humanos y otras formas de vida complejas ya se habrán vuelto imposibles mucho antes. «Y esto está siendo acelerado por el cambio climático provocado por el hombre. Los humanos tendríamos problemas incluso con un pequeño aumento en la temperatura», apunta el investigador. Cerca del final solo los microbios en nichos ambientales serían capaces de aguantar el calor. Después, también desaparecerán.
«Mirando hacia atrás una cantidad similar de tiempo, sabemos que hubo vida celular en la Tierra. Tuvimos insectos hace 400 millones de años, dinosaurios hace 300 millones de años y plantas florecientes hace 130 millones de años. Los seres humanos anatómicamente modernos sólo han existido durante los últimos 200.000 años, lo que significa que hace falta mucho tiempo para que la vida inteligente se desarrolle», apunta Rushby.
Las posibilidades de Gliese 581d
El equipo cree que saber esto de nuestro planeta ser útil para conocer la vida en otros, ya que nos habla de la posibilidad de la evolución de la vida compleja y en qué etapa puede estar otro lugar de la galaxia, si es que esto fuera posible. «Por supuesto, gran parte de la evolución es cuestión de suerte, pero sabemos que las especies complejas e inteligentes, como los humanos, no pueden aparecer después de solo unos pocos millones de años, ya que llevó el 75% de toda la vida útil habitable de este planeta que evolucionara. Creemos que es probable que la historia sea similar en otro lugar» .
Casi 1.000 planetas fuera de nuestro Sistema Solar han sido identificados por los astrónomos. El equipo de investigación analizó algunos de estos ejemplos, y estudió la naturaleza evolutiva de la habitabilidad planetaria con el tiempo astronómico y geológico. Compararon la Tierra con ocho planetas que se encuentran actualmente en su fase habitable, incluido Marte, y descubrieron que los mundos que orbitan estrellas con masas más pequeñas tienden a pasar más tiempo en su zona de habitabilidad.
Uno de los planetas a los que aplicaron su modelo es Kepler 22b , que mantenerse en la zona de habitabilidad de su estrella entre 4.300 y 6.100 millones años. Aún más sorprendente es Gliese 581d, con una duración de vida habitable de entre 42.000 y 54.700 millones de años. «Este planeta ser cálido y agradable diez veces más tiempo del que ha existido nuestro Sistema Solar».
Los astrobiólogos creen que es posible que se encuentre un planeta habitable, similar a la Tierra, a una distancia de 10 años luz, lo que está muy cerca en términos astronómicos. Aunque llegar a él llevaría cientos de miles de con la tecnología actual.
«Si alguna vez necesitamos movernos a otro planeta, Marte es probablemente nuestra mejor apuesta. Está muy cerca y se mantendrá en la zona habitable hasta el final de la vida del Sol . 6.000 millones años a partir de », concluye Andrew Rushby.”
Claro que, no todo queda ahí. Sabemos que Andrómeda se nos acerca y la Vía Láctea se acerca a ella a 5oo.ooo Km/h, que la Tierra, es muy probable que dentro de un tiempo cifrado en 1.750-3.250 millones de años, podría salir de la zona habitable del Sol. Es decir, esa zona en la que no es posible la presencia del agua líquida y por lo tanto, tampoco de la vida como la conocemos.
Además, hay otro suceso futuro que nos amenaza y que no tiene reversión alguna, es la evolución natural del Sol que, al agotar su combustible nuclear de fusión, dentro de unos pocos miles de millones de años, se convertirá en una gigante roja y crecerá y crecerá, su órbita engullirá a Mercurio y a Venus y posiblemente quede muy cerca de la Tierra. Para cuando eso llegue, mucho antes, la atmósfera de la Tierra habrá sufrido transiciones de fase y las temperaturas serán tan elevadas que los océanos se evaporarán, ya no será un planeta habitable. Después de todo eso, al final, se convertirá nuestro Sol en una enana blanca dentro de una Nebulosa Planetaria. Nosotros no podremos estar por aquí.
Es cierto que hablamos de miles de millones de años y, en un tiempo tan extenso, ni sabemos si estaremos por aquí o nuestra especie habrá desaparecido, extinguida como muchas otras que fueron antes que nosotros. Aunque por otra parte, si pensamos en todos estos sucesos futuros, nos podremos dar cuenta de que, casi los tres, están situados en el tiempo dentro de un círculo muy similar, es decir, podrían coincidir algunos de esos sucesos.
Tampoco podemos descartar que, para cuando eso pueda llegar, la Humanidad mucho más evolucionada, habrá podido salir del confinamiento del planeta Tierra y habrá viajado a las estrellas y, cómodamente instalada en otros mundos, podría observar, con sus adelantados ingenios tecnológicos, lo que sucedería en todos y cada uno de esos eventos cosmológicos que, para entonces, ya no nos afectarían.
No podemos negar nada de lo que en un futuro podamos conseguir, si profundizamos un poco en los adelantos que estamos consiguiendo en Física de materiales, de superconductores, de nanotecnología, de fotónica y electrónica, en los medios de computación y robótica y en otras ramas del saber humano… Tendremos que convenir, con Julio Verne que, todo lo que podamos imaginar se puede convertir en realidad… ¡alguna vez! Sólo necesitamos Tiempo.
emilio silvera
May
5
No podemos perder de vista estos “sucesos”
por Emilio Silvera ~ Clasificado en General ~ Comments (0)
Hace mucho que venimos hablando de esos misteriosos objetos que, algunos, dicen haber visto en una u otra circunstancia.
Nuestra Galaxia es enorme, doscientos mil millones de estrellas y mundos de distintos pelajes por todas las regiones más o menos lejanas de nuestro Sistema solar. Sabemos que todo el Universo (sin excepción), se rige en todas sus regiones por las mismas leyes fundamentales y las mismas constantes, y, si eso es así (que lo es), ¿Cómo podemos negar que existan otros seres en otros mundos?
Lo único que tengo claro en este tema es que, no seremos nosotros los que iremos los primeros a esos otros mundos, nuestra tecnología está muy lejos de poder realizar tal hazaña. Sin embargo, no sabemos el grado tecnológico que puedan tener otras especies que vivan por ahí fuera. Algunas de esas posibles Civilizaciones pudieron surgir a la Vida antes que la Humana, llevarnos algunos miles o incluso millones de años de adelanto, y, si es así, pudieran tener los medios para venir a visitarnos y observar, curiosos, a esta Humanidad que vista desde fuera… ¡Podría ser una sensación!
¿Otros mundos habitados? ¡Seguro!
¿Qué han estado por aquí? No podemos negarlo ni afirmarlo.
¿Qué deberíamos tener miedo de que sean “ellos los primeros en llegar a nosotros? Es probable pero, si están tan adelantados, también sería posible que sus ideas sean menos aguerridas que las nuestras y piensen de manera distinta a las conquistas. Hay que pensar que si tienen tanta sabiduría tendrán medios más que suficiente para tener de todo, y, ese “cuento” que exponemos en las películas de que vienen a quitarnos el agua (el Universo está de agua hasta los topes), o, a llevarse algo nuestro que pudieran encontrar en cualquiera de los planetas abandonados que existen y que son miles de millones,
En fin, tendremos que decir como decía aquel sabio: “La ausencia de pruebas no es prueba de ausencia”.