Mar
11
¿Cuando llegamos aquí, y, para qué?
por Emilio Silvera ~ Clasificado en El Universo y... ¿nosotros? ~ Comments (0)
¿Qué cómo se originó la vida?
Nadie lo sabe, no había allí ningún cronista que pudiera narrar los acontecimientos que dieron lugar a tan asombroso acontecimiento. Sin embargo, el estudio, el experimento, los fósiles encontrados en las rocas más antiguas de la Tierra, nos dieron una idea de cómo pudo ser.
Cuando hablamos de materia inerte, nos referimos a todos los cuerpos y sustancias que no forman parte de un organismo viviente, o sea, que no se encuentran insertos en algún ciclo de vida: nacer, crecer, reproducirse y morir. En ese sentido, la materia inerte se contrapone a la materia viva o a los seres vivos.
Vida y materia inerte:
Una evoluciona de la otra.
Vida y materia inerte: Seres y células
Entonces, ¿la vida es la agregación de todos estos procesos reactivos?
En una sola célula se producen millones de reacciones químicas cada segundo. Una compleja orquesta.
Una célula puede crear varios miles de tipos de proteínas, algunas muy simples, otras que son máquinas microscópicas complejas.
Imaginemos manejar un automóvil a cien kilómetros por hora, a la vez que reconstruimos constantemente todas sus partes con lo que encontramos en la calle. Eso es lo que hacen las células.
Pero ninguna porción de la célula está viva, todo es materia inerte sujeta a las leyes del universo.
Materia viva y materia inerte
A esa supuesta producción de materia viva a partir de materia inerte se le llama abiogénesis y es el principio «científico» que guía la teoría de la generación espontánea, surgida a partir del descubrimiento de la aparentemente inexplicable aparición de moscas en la carne podrida, de cochinillas en los lugares húmedos.
Esporas de vida que llegaron a la Tierra y germinaron: PANSPERMIA
Es la pregunta del millón. Unos opinan que se originó fuera de la Tierra y que un cometa sembró de organismos el planeta. Otras versiones apuestan por el océano y, otras, por un caldo primordial, o pequeñas charcas templadas bombardeadas por rayos ultravioletas y gamma en una atmósfera poco evolucionada, o en las cercanías de turbulencias termales de chimeneas situadas en los fondos marinos, en cuyo ambiente existirían nutrientes, energías y protección contra agresiones exteriores, principalmente impactos extraterrestres, otros han optado por superficies de granos de pirita, donde la capacidad de adsorción de este mineral para una gran diversidad de moléculas y la energía proporcionada por la síntesis de dicho cristal permiten suponer que tal vez constituyeron una serie de circunstancias favorables para la aparición de la materia viva.
Como veréis, todos estos que han opinado en las distintas maneras en que pudo llegar aquí la vida, saben tanto de ello, como se yo, o sea, nada. Sólo tenemos aproximaciones e ideas que, pueden ser más o menos certeras, pero al fin y al cabo, hipótesis. Sin dejar atrás, la posibilidad de que, esporas llegadas del Espacio, germinaron en nuestro planeta aprovechando la química de elementos presentes y que contenían la Nebulosa de la que se formó la Tierra.
Lo que si parece una cosa segura es que, la Vida, es inevitable, las materiales que la conforman se “fabrican” en las estrellas y se esparce por los mundos, y, si eso es así como se supone que es… ¡Todo el Universo estará lleno de vida! Si señor, ha oído usted perfectamente. La vida en el Universo es inevitable. Son muchas las cosas que han influido para que eso sea así.
Pensemos un momento:
Si la fuerza nuclear fuerte,
la nuclear débil,
el electromagnetismo,
y, la Fuerza de Gravedad universal.
Las constantes Universales fundamentales,
la masa y la carga de las partículas elementales,
la diversidad de las familias de partículas,
la energía de las estrellas y de los planetas, y, los elementos,
y un sin fin de detalles más…
¿Sin todo eso, la vida nunca se podría haber formado y evolucionado hasta el nivel de la Conciencia?
Si todo esto fuera de otra manera, si simplemente la carga y masa del electrón, fuera distinta, nosotros no podríamos estar aquí, y nuestro Universo sería otra cosa, incluso un Universo sin vida.
Y digo yo, ¿Qué puñetas es un Universo sin vida?
¡La Nada! No habría ningún ser inteligente que pudiera hablar de él, y, precisamente por eso, el Universo nos trajo para poderse contemplar así mismo a través de nosotros.
Que gracias a todas las confluencias de los parámetros a los que antes me refería, no es nuestro caso. Si existe el espacio es porque existe la materia. Y, la materia evolucionó hasta… ¡La Vida!
Aquí hemos tenido a los mesopotámicos, a los egipcios, babilónicos, griegos, y, tantas Civilizaciones que fueron… Hasta llegar a nosotros que, aunque algo irracionales algunas veces, hemos sido capaces de avanzar y extender los primeros conocimientos de las matemáticas, la física, la astronomía, la química, la biología, la filosofía, la música, …, y tantas cosas más. ¡Ah, también, el poderoso sentido de la familia!
No está nada mal ¡Es el motor que mueve el mundo de los Humanos!
He procurado concretar aquí de muchas cosas relacionadas todas ellas en algún punto del espacio-tiempo, en nuestra línea de Universo, y, desde luego, en tan corto espacio, es imposible reseñarlo todo, este comentario es una simple reflexión y, para tener una idea más amplia, habría que haber abordado:
Sin ellos… ¡No estaríamos aquí!
– De nuestros antepasados ancestrales, sus entornos y formas de vida, su evolución. El enorme camino recorrido.
– De lo que entendemos por la conciencia, lo que nos dicen los grandes pensadores sobre el Ser. El poder saber y sentir que un instante puede contener un universo entero, lleno de matices, sentimientos y fuerzas que luchan entre sí.
– De lo que está conformado todo, la materia “inerte” y la materia viva. Aunque sería más apropiado decir la materia “dormida ” o la materia ” despierta “.
– De lo que entendemos por materia y como esta conformada desde lo más pequeño que, toma complejidad y se hace grande.
– De los posibles orígenes de la vida que ahora conocemos en el Planeta Tierra.
Y, de otras muchas cuestiones y conceptos que, no han sido tratados aquí en este momento y si en otros trabajos presentados de manera sencilla y sin demasiada profundidad, pero sí lo suficiente como para ser comprendido de manera básica y somera de cuestiones que, de alguna manera, a todos debía interesar. Aquí, en otras ocasiones se habló de lo que hemos sido, de lo somos y, posiblemente, de lo que podemos llegar a ser, y, con más o menos acierto, lo que sí debemos tener en cuenta es la buena intención del autor.
La perfecta proporción
La belleza se presenta de muchas maneras
También aquí, en la proporción aurea está la belleza presente
No sé si la belleza es un principio físico, lo que sí se, es que el cariño y la amistad es un principio del espíritu y del alma del Ser consciente. Los sentimientos: Si no los tenemos, en realidad no somos. El hombre es un animal social, necesita de los demás, y, está claro que el Ser está en la unión de dos partes, al igual que sin quarks no tenemos núcleo ni átomo, sin dos partes contrapuestas no tenemos ese uno esencial.
En realidad… ¡Dos son Uno!
Todo en el Universo es equilibrio, y, de la misma manera, nosotros, los seres vivos, tenemos el equilibrio en la unión de esas dos partes que hacen el todo, haciendo posible la continuidad.
Por todas partes estamos rodeado de grandes cosas, de maravillas que, normalmente, nos pasan desapercibidas, no pensamos en la grandeza de todo lo que tenemos y de todo lo que podemos hacer. Muchas veces, cuando caemos en la cuenta, ya es tarde.
Muchos más de lo que pensamos, cuando ya no tiene remedio piensan: “Lo pude hacer mejor. Tenía que haberla respetado más. Le tendría que haber dicho cuanto la quería. Me tenía que haber comportado de otra manera.” Y, así podríamos seguir. La vida es muy corta, y, la mayoría, la desperdicia de manera lastimosa. Los egoísmos mezquinos nublan las mentes y no les dejan ver donde reside lo importante.
emilio silvera