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Viajamos en una enorme nave espacial llamada “Sistema Solar”

Autor por Emilio Silvera    ~    Archivo Clasificado en General    ~    Comentarios Comments (1)

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Find & Share on GIPHYCómo orbita realmente el Sistema solar? - Naukas

 

https://youtu.be/fSMmA0a9puE

 

La Tierra es la nave que nos lleva en un viaje trepidante por el cosmos. El planeta se desplaza a 107.280 kilómetros por hora alrededor del Sol. Y rota sobre su eje a unos 1.666 kilómetros por hora en el ecuador.

No acusamos estas velocidades por el simple hecho de que son constantes, ni aceleran ni desaceleran, se mantienen fijas y los ocupantes del planeta no la siente.

¡Qué cosas!

 

  1. 1
    emilio silvera
    el 18 de marzo del 2025 a las 7:51

    No prestamos atención a las maravillas en las que estamos inmersos:

    – Somos beneficiarios de que la Tierra cuente con un núcleo magnético que forma a su alrededor un invisible cinturón que forma unas especie de cúpulas en el Polo Norte y en el Polo Sur que impiden, cuando llegan a la Tierra, que los fuertes vientos solares nos hagan daño y que esa radiación penetre en nuestros cuerpos.

    Vemos como algo muy natural que se sucedan las estaciones (Verano, otoño, invierno y primavera),que hacen posible que los ciclos de la Tierra la tengan renovada y en forma para que la vida crezca y evolucione en ella.

    Y, no es que no prestemos atención, es que ni somos conscientes de que, nuestro planeta, nos ofrece todo lo necesario para poder vivir en el de una manera maravillosa: La Atmósfera, los Océanos y los Mares, los ríos, las montañas, las praderas, las zonas húmedas, la variedad química de minerales, las especies que pueblan nuestro mundo, e, incluso, los fenómenos naturales que, aunque no siempre nos damos cuenta y solo vemos la parte negativa de ellos, lo cierto es que sirven para renovar y que el planeta se pueda reciclar.

    Y, en relación a lo que se expone en este trabajo, no es que no prestemos atención, ¡es que no somos conscientes de que viajamos a una velocidad endiablada por regiones muy lejanas de la Galaxia y cruzamos zonas de inmensos peligros sin que nada nos pueda afectar gracias a la cúpula que nos preserva de todas esas regiones ponzoñosas por las que pasamos.

    A veces, pensando en la inconmensurable grandiosidad del Universo y en que nosotros (todo el Sistema solar junto), no somos, en comparación con el Universo, mucho más que una manzana ocupada por una colonia de bacterias que, ni saben ni comprenden, la realidad de su suerte y de su verdadera situación en este incomprendido universo.

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