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La Religión de aquellos tiempos: La Cosmología

Autor por Emilio Silvera    ~    Archivo Clasificado en El hombre en el Universo    ~    Comentarios Comments (18)

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Presentar a estas alturas a Isaac Asimov, sería un ejercicio inútil por ser alguien al que todos conocen por su faseta de escritor científico y de ciencia-ficción. Él escribió más de trescientos libros que iban desde la bioquímica y la física hasta Schakespeare y la Biblia. Todo lo quería tocar y, se introdujo en las más diversas ramas del saber humano para explicar sus ideas con respectos a esas muchas cuestiones que abordó con más o menos éxito. En lo que más destacó y se hizo más popular, fuen en la rama de la Ciencia-Ficción en las que nos dejó novelas inolvidables que, como la Saga de La Fundación conocida en todo el mundo. Como hoy tratamos sobre cosmología, se me ocurre que, podríamos utilizar una de sus obras como comienzo de este sencillo trabajo:

Una de sus mejores obras fue temprana. En 1941 publicó “Nightfall”, una historia sobre una civilización condenada a un destino funesto y ubicada en el planeta Lagash, que no giraba en torno a un único Sol, como lo hace la Tierra, sino que estaba inmerso en el campo gravitatorio de generado por seis soles independientes. Él no explicaba, en la obra, cómo era la órbita de ese planeta -sería un problema nada menos (y nada más) que de siete cuerpos-, nada fácil de explicar.

Recreación artística de Kepler-35b, orbitando dos estrellas

Para los habitantes de un planeta con más de un Sol, no sería fácil sobrellevar las diferencias que esto supondrían. Los planetas ahora desvelados, llamados Kepler-34b y Kepler-35b-, giran alrededor de un par de estrellas unidas gravitatoriamente que se orbitan entre sí. El primero se encuentra a 4.900 años luz de la Tierra y el segundo, aún más lejos, a 5.400 años luz. Si tuvieran habitantes, ¿qué sensación tendrían con esos dos focos luminosos sobre ellos?

Pero sigamos con la historia de los habitantes de Lagash que, en tal situación de estar iluminados por seis soles era que, recibían luz constante proveniente de los soles, cuando no eran unos eran los otros los que les enviaba sus rayos de luz y su calor.

Dado que no conocían ningún tipo de cielo nocturno, los astronómos extrapolan la idea de qué en su universo sólo existen unas pocas docenas de estrellas. Se trataba de unas luces misteriosas apenas visibles contra el resplandor de los seis soles. Así, los que consideraban importantes las estrellas estaban en minoria y eran considerado como gente “especiales” y, algo raras.

Además, en Lagash existía una silenciosa sensación incómoda. Los arqueólogos habían hallado restos de nueve culturas anteriores, cada una de las cuales había podido alcanzar una cultura muy avanazada del nivel de la cultura presente y luego, habían desaparecido. Los estratos geológicos indican que cada una de aquellas civilizaciones había permanecido durante un período de alrededor de dos mil años.

La historia de Asimov nos parece una fantasía pero, lo que hasta ahora sólo había sido cuestión de ciencia ficción, un grupo de astrónomos trabajando con el satélite espacial Kepler  han encontrado a un planeta desde el que, si se pudiera uno parar en él, se podrían apreciar amaneceres y atardeceres con dos soles, justo cómo el que apareció en la primera entrega de Star Wars desde el planeta Tatooine.

Así es, resulta que este planeta recientemente descubierto, que por lo pronto lleva el nombre de Kepler-16b,  se encuentra orbitando a un sistema binario de estrellas. Esto es, un par de estrellas girando una al rededor de la otra, mientras que el planeta gira al rededor de ese sistema.

planeta dos soles estrellas

 

 

 

Nos podríamos preguntas cómo serían en ese mundo de seis soles las cosas. Lla fotosíntesis de una planta queda afectada por el color de la luz que recibe. En la Tierra, la mayoría de las plantas evolucionaron al color verde con el fin de aprovechar el color amarillento de la luz solar que recibe la superficie de nuestro planeta. Nuestro sol, clasificado como una estrella enana amarilla, puede parecer de un brillo blanco visto desde el espacio, pero nuestra atmósfera nos hace verlo amarillo.

Existen muchas otras clases de estrellas que no son como el Sol en el vasto Universo, y muchas de ella están, como el el mundo de Lagahs compartiendo órbitas múltiples con otros tipos de estrellas: enanas rojas, estrellas azules, gigantes rojas, enanas blancas…Las estrellas  poseen diferentes colores dependiendo de su composición, edad, tamaño y temperatura. Quizás estemos acostumbrados al amarillo, pero la naturaleza realmente no tiene preferencias,  y, en un sistema de seis soles…para el planeta que depende de ellos, la cosa no sería fácil.

Gliese 667 55 CnC sistema solar multiple doble

 

 

Aquí teneis a Gliese 667, un sistema solar múltiple de dos estrellas. Lástima que no haya podido encontrar ninguna imagen que pusiera representar el sistema Solar de Lagahs, el planeta de seis soles que, tendría que ser una verdadera alucinación para sus habitantes.

Al final de la Historia del planeta Lahahs que estaba en un sistema de seis soles, se descubrió la terrible verdad de por qué, casi de dos mil en dos mil años, desaparecían las civilizaciones que estaban allí aposentadas y firmemente establecidas. Cada 2.049 años los seis soles se ponen y cae la noche, algo totalmente desconocido para los lagashianos que consecuentemente, sienten un inmenso terror hacia la oscuridad y el frío (seis soles les enviaban su luz y su calor durante todas sus vidas). El Miedo y el terror de aquel nuevo y aterrador escenario, les hace volverse locos y comienzan a provocar fuegos hasta que la cultuira muere y, como las anteriores, desaparece.

http://g.cdn.mersap.com/esoterismo/files/2012/03/cataclismo.jpg

La oscuridad total del mundo parece ser un denominador común en todas esas profecías. Seguramente por eso la escogería Asimov. Un físico, Anthony Peratt, que ha trabajado en el National Laboratory de los Álamos y en el Departamento de Energía, afirma que a los lagashianos los destruyó algo más que el fuego. La apición del cielo nocturno y de incontables estrellas destruye su cosmología; socava su fe y los cimientos filosóficos de su sociedad, que entonces se derrumba.

Todos sabemos que la Cosmoogía es el estudio del Universo como un todo, de su historia y de su origen. Habitualmente, aunque no siempre, se basa en la Astronomía, así como en la religión y en las creencias sociales.

 

 

El antropólogo George P. Murdock hizo una lista de sesenta y ocho civilizaciones que han configurado sus cosmologías. Algunas de estas civilizaciones han desarrollado poco la ciencia y escasamente la astronomía. Nosotros los seres humanos, en cuanto identificamos un puñado de estrellas, pretendemos construir una imagen de todo el universo. La Directora del Programa de de religión del Hunter College de la City University de Nueva York, expresa su desacuerdo con la cifra de las 68 civilizaciones de dadas por Murdock: “Todas las civilizaciones tienen cosmologías de algún tipo que dicen como está estructurada la realidad. Al decir “realidad” se refiere a sus distintos universos, como ellos lo podían percibir”.

No pocas de aquellas Civilizaciones antiguas coincidieron en muchas cuestiones del “mundo que veían” y, destacaron de las demás: Sumerios, Babolonios, Hindúes, Chinos, Egipcios y Griegos, todos ellos, nos dejaron su impronta y, el resultado de todas aquellas culturas, fue recopilado y traducido por el mundo del Islam cuando llegó el oscurantismo en la Edad Media. Mucho despúes, en el Renacimiento, volvieron a florecer aquellos saberes del mundo para que pudieran lelgar hasta hnuestros días.

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Existe un  monstruo en el centro de nuestra galaxia está a punto de alimentarse del material presente en esa nube de gasEn efecto, recientes observaciones del VLT  indican que una nube de gas pronto se aventurará peligrosamente cerca del agujero negro supermasivo  que ocupa el centro de nuestra galaxia. La nube está siendo desgarrada, estirada y calentada. Los investigadores predicen que durante los próximos dos años parte de la nube será engullida por el agujero negro. ¿Os podeis imaginar que, nuestro mundo estuviera cerca de un monstruo estelar semejante? ¿Cuál sería nuestra reacción cuando el planeta comenzara a ser espaguetizado por esa fuerza de atracción descomunal? ¿Que reacciones y fuerzas se desatarían en el planeta?

Hoy, nuestros conocimientos del Universo son bastante aceptables y hemos podido comprobar que, nuestros modelos cosmológicos, se acercan a la realidad que podemos observar. Aqueloos tiempos lejanos en los que prevalecian las creencias y la intuición, han pasado para dar paso a la auténtica Ciencia que guía el camino que tenemos que seguir.

Claro que, si alguien me pidiera una justificación de la cosmología como ciencia, me vería en un gran apuro para poder dar una respuesta. La raíz de la palabra Cosmos nos remite a una palabra que abarca el todo. ¿Cómo se puede tener una Ciencia basada en que conozcamos todo? Cuando ni siquiera sabemos cuál puede ser el tamaño real del Universo.

Claro que, aunque eso resulta ser así, no por ello, la Cosmología deja de ser interesante y también, importante. Dado quen está estrechamente entrelazada con las creencias y aptitudes generales de nuestra sociedad, la cosmología puede ser una clave para conocer la psicología colectiva de una civilización. Generalmente, también suele haber algo de ciencia en esto.

emilio silvera


  1. La materia oscura podría estar presente en la Vía Láctea, el 25 de mayo del 2012 a las 20:11

    […] que hacer una larga revisión de la literatura sobre materia oscura… y tal vez hasta de la cosmología. Se cree que la Vía Láctea (Milky Way) está rodeada por un halo esférico de materia oscura […]

 

  1. 1
    emilio silvera
    el 26 de mayo del 2012 a las 5:09

    Posiblemente, en no mucho tiempo, podamos ser testigos de uno de los descubrimientos más “asombrosos”: La Materia Oscura NO EXISTE. Claro que, eso es mentar al diablo en casa del creyente. Los Cosmólogos ¡están tan convencidos de su existencia! que, de ser finalmente descubierto el bulo, no me extrañaría que algunos, trataran hasta de suicidarse. ¡Han hablado tanto de la Materia Oscura que, descubrir su inexistencia…¿dónde les dejaría?
    El artículo dejado en el enlace de más arriba, nos habla de que unos Astrónomos han hecho pruebas que demuestran que la Materia Oscura no está presente y, de inmediato y todos como un rayo, han saltado los Cosmólogos para desmentir la noticia y darle la vuelta arrimando el “ascua a su sardina”.
    Yo, de momento y desde hace mucho tiempo, estoy con los Astrónomos: “No hay materia oscura”, lo que en realidad hay (en abundancia) es mucha ignorancia.
    Saludos.

    Responder
  2. 2
    Fandila
    el 10 de noviembre del 2012 a las 13:17

    De ser como dices el problema se mantendría, ¿De qué se compone el inmenso vacío? Pues energía y materia son una misma cosa, o el vacío vendrá a ser otra dimensión, un universo asociado con éste, pero compatibles ambos.
    A lo mejor la nada “sostiene” al todo y al revés, pero cómo podrían relacionarse. O todo es materia como la que vemos pero en la forma de ondas no visibles pues el espectro electromagnético es muy ámplio, ¿pero y los propios campos…?
    El misterio continúa. Encontrar y detectar esas materias sutiles requerirá de muy grandes energías y unas formas de detección que aún no están disponibles. Si pese a eso no se encontrase nada, habrá que darse por vencidos y hacerse a la idea de que en lo cuántico y más allá las cosas son radicalmente distintas, el verdadero misterio.
    Pienso que el verdadero handicap reside en nuestra propia limitación. Más allá de nuestro entorno dimensinal no funcionamos, y nuestra mente no es capaz de comprender fuera del entorno material de que se compone, los entresijos se nos escapan, porque quizás sean la verdadera mente ¿Será preciso morir para vagar por esas dimensiones sutiles y otras que ni imaginamos? Si fuera así la cosa parece tan irreversible como la flecha del tiempo. Quién o quienes de los que fueron podrían volver a ser y contárnoslo.
    Como decía el gran Antonio Machado: Al andar se hace camino y al volver la vista atrás…
    Feliz sábado compañeros.

    Responder
  3. 3
    emilio silvera
    el 11 de noviembre del 2012 a las 6:55

    ¡Amigo mío!
    ¡Estamos limitados por un Universo de cuatro dimensiones! Ese es nuestro ámbito, el único que podemos captar y, más allá, pudiera ser posible que existan otras que no podemos “detectar”, físicamente no estamos acondicionados para ello, y, no sería extraño que, como apuntas, en ese mundo paralelo del “vacío” pudieran existir otras cosas que, aunque nos afectan y las de nuestro mundo a ellas (un mundo simbiótico, compuesto de dos partes que, siendo imprescindibles la una a la otra, nunca llegarán a conocerse), nunca se verán frente a frente y cada uno de esos universos siguen su camino dependiendo del otro sin el que no podrían ser.
    ¡Qué extraño resulta todo esto!
    Lo cierto es que, sabemos que algo anda por ahí, en ese otro plano o dimensión, o vacío cuántico, o lo que pudiera finalmente ser que, incide en nosotros, en nuestro mundo y que no llegamos a poder “tocar” con los dedos del intelecto que, frustrado, se limita a conjeturar lo que podría ser eso que sospechamos que está en alguna parte… ¿inmaterial? No creo, ya que como bien dices todo es energía y, esa otra parte desconocida (si realmente está ahí) también estará determinada por los cuantos de energía que finalmente conforman alguna clase de materia.
    Si no ocurre nada extraordinario, algún suceso que determine nuestra extinción, entonces, dado que no cejaremos en nuestra eterna búsqueda del saber sobre el Universo, la Naturaleza, esperémos que algún día lejos en el futuro aún, podremos haber conseguido los utensilios precisos para poder acceder a ese “otro mundo” que presentimos y que, de alguna manera, nos pudiera dar la opción a no desaparecer como espcie. ¿Quién sabe?
    Por el momento, lo único que sí tenemos son muchas dudas, y en el interior de nuestras mentes oímos voces que, como en una jaula de grillos nos gritán: ¡Seguid buscando! ¡Hay mucho más de lo que se ve!
    Esas voces, amigo mío, sólo podrán ser calladas poco a poco, a medida que conquistemos esa sabiduría que ahora no tenemos, entonces y sólo entonces, nuestras mentes estarán tranquilas y en paz, al fín habrán podido comprender el “mundo”, su naturaleza. Ahora sí, con todas las respuestas en nuestro poder, ¿qué se puede oponer a que seámos los señores del Hiperespacio, del Universo y, si apuramos esa esperanza…de todos los Universos que pudieran ser.
    ¿Será por pedir?
    Un abrazo amigo y buen fin de semana a todos en cualquier parte que se puedan encontrar que estén acompañados por la Salud y por los seres queridos que, al fin y al cabo, es nuestra mejor verdad.

    Responder
  4. 4
    emilio silvera
    el 13 de mayo del 2013 a las 9:46

    Como forma parte de nuestra Historia, siempre metemos la religión en las actividades humanas del pasado, en las que, de una u otra manera, estaban relacionadas y, la Astronomía, la mayoría de las veces, se adecuaaba a los intereses de los santones de turno. Hoy día, por el contrario, la Ciencia ha podido avanzar hasta límites muy avanzados y se saber, que Ciencia y Religión, han tomado caminos divergentes. La Ciencia tiene que demostrar lo que dice y, la Religión, sólo se apoya en la Fé para que sus seguidores crean en lo que cada una de ellas predica.
    ¡Me quedo con la Ciencia!
     

    Responder
    • 4.1
      Fandila
      el 16 de mayo del 2013 a las 8:38

      ¿Nunca os habeis planteado que quizá la Ciencia sea un nuevo modo de religión?
      Una religión dinámica mediante la meticulosa búsqueda del conocimiento. Muy diferente a la tradicional, pero con iluminados más pragmátcos. Tal vez esa “iluminación” tenga las mismas raices y el mismo temor a lo desconocido.
      Religión significa, o proviene, de religare, verbo latino: la vuelta al ser superior. Cada vez disponemos de más conocimientos y herramientas para “comprender” el origen y el final de todo lo que es dentro de un Todo. Pobres ilusos, que no columbramos siquiera “los límites” de nuestras limitaciones.
      Hay voces que casi identifican el Todo, que en Cosmologia, como Emilio dice, la palabra Cosmos lo significa. Consideremos la infinitud, y estaremos más cerca, solo más cerca, de una idea o concepto de Dios. Relativamente, somos tan incultos o faltos de conocimientos como aquellos humanos primeros que se plantearon dónde estaban y qué era la inmensidad a su alrededor del que dependían.
      En la novela de Alex Haley, Raices. nada más nacer Kunta Kinte, Omoro, su padre, lo saca fuera de la cabaña y sobre las palmas de sus manos lo eleva hacia la noche estrellada para decirle: Mira hijo, solo el cielo es más grande que tú.
      Ahora, más parece que se predique a la inversa: “Solo tú eres más grande que el cielo”
      Seguramente a lo que antes se llamaba Dios ahora se le dé otro nombre e incluso otras caracteríaticas, pero a pesar de la religiones el misterio continua aunque con otros matices, el misterio último del origen y el final, y entre tanto el intermedio.
      Saludos
       

      Responder
      • 4.1.1
        emilio silvera
        el 16 de mayo del 2013 a las 9:41

        ¡Pero hombre, Fandila! Mira que poner a la Ciencia a la par de la Religión. En Ciencia, la fe, está ausente y son los deseos, la intuición, lo presentido y, finalmente lo comprobado de manera tal que, si no refleja la realidad… ¡Nunca se dará por bueno! el resultado y, a seguir buscando.
        No puedo afirmar que, en algún punto del camino, pueda dar la sensación de ser (ambas, religión y ciencia) convergentes en algunos matices religiosos y científicos pero, rápidamente divergen para tomar, cada cual su camino: La una basada en una creencia ciega de lo que nunca se podrá comprobar, y, la otra, por el contrario, con la esperanza de poder comprobarlo todo y, mientras que eso no ocurra, se llamará de otra manera (conjetura, teoría…) pero, nunca ciencia.
        No hay “seres superiores” en el sentido que la religión le quiere dar al término. Todos nacemos, vivimos y morimos como ocurre con las estrellas, y, la variante a nuestro favor aunque provenimos de ellas, es que, una vez evolucionados, hemos llegado a pensar y, en esos pensamientos entran elucubraciones y dilucidaciones que… ¡Abasrcan todos los géneros! Inclusos aquellos que no entendemos bien.
        Saludos.

        Responder
        • 4.1.1.1
          Fandila
          el 16 de mayo del 2013 a las 13:13

          No es ese el sentido que yo le doy, sino el que ambas nacen de una Cosmogonía, y que al cabo vienen a perseguir respuestas últimas.
          Religiones no deistas no se plantean tal cosa, es decir su lógica nada tiene que ver con  ninguna Revelación, sino con el sentido común.
          Claro que sí, Religión y Ciencia  divergen, y tanto. Mientras la una queda establecida y anclada en sus “sabios” primeros e irrepetibles, la otra pone a los suyos en entredicho cada vez y razona sine qua non.
          Yo me quedo con la Ciencia, pero aborrezco su lentitud y sus cambiantes límites.
          Saludos

        • 4.1.1.2
          Fandila
          el 16 de mayo del 2013 a las 14:01

          Me ha sorprendido lo de los seres superiores. Supongo que te refieres a santos, ángeles y demoniso, o aun ser llamado Dios.
          ¿Cual es el Dios que se pregona? ¿El fabricado a nuestra imagen y semejanza?
          ¿Dónde se aprecian las funciones o cualidades antropomórficas del Universo, las bondades o las maldades?
          Pienso más bien en unas fuerzas y materias, “azarosas” o “ciegas” que no lo son tanto, pues como conjunto tienen un sentido, que sí que experimentamos. Por qué es así y no de otra manera, otra manera que también pudiera haber sido. ¿Que hay de razón o de lógica en todo lo que existe? ¿Cuántas puedan ser las variaciones de “existencia” no conocidas?
          Pese a todo, existe un orden y un sentido en la mero existencia.
          ¿Entonces, a qué llamaríamos Dios? Desprovisámoslo de cualquier magnificencia. Identifiquémoslo con los infinitos, con un punto infínito co del Todo físico que imaginamos..
          Qué sería Dios ¿el poder total de toda la existencia, su gobierno, su sustancia global?
          Y si todo lo que existe y su energía, potencial o en acción, se reduce al instante presente. ¡!Menudo presente! Ni panteismos ni nada.
          ¿Qué sería ese Dios, no fabricado a nuestra imegen y semejanza?
          ¿Podríamos concluir en algo siquiera sin la ayuda de la Cienca?
          ¿Estamos seguros de que no existe más consciencia que la que nos aportan nuestras parcialísimas neuronas? ¿No hay algo distinto y más complejo(O más simple) todavía? ¿Se puede saber si el Universo en su conjunto es consciente?
          Reflexiones y reflexiones, que sin respuesta no tienen sentido. ¿Pero porque no darles la nuestra particular como forma de eludir el desvarío?
           
          Saludos.

  5. 5
    Abdel Majluf
    el 16 de mayo del 2013 a las 3:03

    Excelente artículo y no me refiero a solo este, sino a todos y cada uno de los que hoy veo publicados en tu sitio. Amigo mio, hoy has logrado un cambio en mi, siempre que leo un artículo, trato de entregar mi parecer o a veces aportar algo de mi cosecha, hoy en cambio, la lectura que encontré en tu sitio, me dejó completamente satisfecho, ” el crítico que habita dentro de mí, hoy quedo conforme con la información publicada. Por esto, solo dire:
    ” Y un buén día, el crítico leyó el periodico y luego de enterarse de las noticias, se hecho a dormir”.

    Saudos y un gran abrazo.

    Abdel Majluf

    Responder
    • 5.1
      emilio silvera
      el 16 de mayo del 2013 a las 4:57

      ¡Hola amigo Abdel!
      Es cierto lo que dices y, una veces, cuando finalizas de leer un artículo, un trabajo científico, o, una información sobre algo que te gusta y llama tu atención, si te satisface lo que la lectura te aporta, sientes que el momento ha sido placentero y satisfactoria la información recibida, tu estado de ánimo se ve de esa manera alimentado y, de alguna manera, sientes que, todo aquello forma parte de tí y lo compartes por completo.
      Sin embargo, en otras ocasiones, sólo parcialmente te satisface esa información que te llega y, sin poder evitarlo, tratas de apuntalar todo aquello con tu propio aporte, con tu perspectiva de lo que allí se cuenta y dice, y, de esa manera, alimentas una exigencia de tu mente que te pedía esa completitud de algo que, por conocerlo, te parecía estar a falta de algún que otro detalle que en tu lectura no habías encontrado.
      Creo que, tal cosa nos pasa a todos por igual y, a veces, damos con algo que nos satisface por completo y, en otras ocasiones, la satisfacción es parcial y se queda a falta de alguna cosa, de algún matiz que se escapó. Precisamente, esa inquietud, es la que hace que consigamos, finalmente, completar, entre todos, las ideas que nos llevan hacia la meta.
      Así que cambiaré tu último pendsamiento para decir:

      El sabio encontró un nuevo saber,
      Un desconocido “tesoro” escondido en aquel relato,
      Su mente se pudo encender, con los nuevos datos,
      La lectura le hizo comprender…
       
      Notando el cansancio de un largo día,
      Quedóse dormido en un sueño reparador,
      Soñaba que comprendía,
      Que todo era parte de un mismo fulgor.

       
      Cuando leo mis poesías, me dan ganas de reir, son malas con avaricia, y no tienen porvenir. Sin embargo, para tapar un hueco y entre amigos, se perdona el desliz.
      Un abrazo.

       
       

      Responder
  6. 6
    kike
    el 16 de mayo del 2013 a las 6:22

      Está bastante bien Emilio; no seas tan humilde, pues puedes comprobar que otros no lo somos tanto.

     Por cierto, hablando de humildad, un par de citas:
       
    »La humildad es algo muy extraño. En el momento mismo en el que creemos tenerla ya la hemos perdido. San Agustín de Hipona «

    »Causa mucho mejor efecto que los demás descubran tus cualidades sin tu ayuda. Judith Martín«
     
     “Sabiduría y humildad van forzosamente de la mano, ya que el saber otorga el conocimiento de nuestra propia ignorancia; únicamente el ignorante cree ser sabio.” Kike (jejejeje)

    Responder
    • 6.1
      emilio silvera
      el 16 de mayo del 2013 a las 9:27

      ¡Qué atinadas todas ellas! Sobre todo esa que nos da el conocimiento, para saber, lo ignorante que somos. Conocer nuestra ignorancia, aunque parez<ca una paradoja, será el motor que nos hará saber. La verguenza nos empujará para que, al menos, intentemos echarla de nuestro lado, y, aunque nunca lo consigamos del todo, al menos que tengamos la menor cantidad posible que… por desgracia, siempre será ¡Infinita! ¡Qué cosas!
      Me confieso aprendiz de todo pués, de todo quisiera saber.
      Un abrazo amigo mío.

      Responder
  7. 7
    emilio.silvera
    el 17 de mayo del 2013 a las 4:51

    Nuestro amigo Fansila, en 4.1.1.1. y 4.1.1.2., se introduce en las profundidades de preguntas que nadie ha podido antes contestar, y, desde luego, el que pueda existir un Dios tal como lo pintan las religiones, está muy alejado de ese otro “dios” que pueda representar la misma Naturaleza y que, sigue su camino sin tener en cuenta ni nuestra presencia aquí, ni tampoco nuestros problemas. El Universo tiene un ritmo marcado por las fuerzas en él presentes y no se separa ni un sólo Tiempo de Planck de su cometido, sigue y sigue cumpliendo lo que debe cumplir sin que nada, le distraiga de sus “actividades” aunque, algunas de ellas sean, traer hacia él a seres que pueden llegar a pensar, a adquirir unas consciencias que, como ahora tú mismo, les haga plantearse preguntas de imposibles respuestas.
    Ninguna estrella, en ninguna parte, dejará de brillar cuando alguno de nosotros dejemos de existir, para ellas, nada significamos a pesar de ellas fueron las que hicieron posible nuestra presencia aquí pero, en el Universo, todo tiene un sentido que no es religioso, ese ingrediente lo hemos metido nosotros (por conveniencia), en la historia del Cosmos para poder explicar, aquello que no sabíamos y, de camino, aprovecharnos de la ignorancia del mundo.
    ¡Religiones! Puede que a muchos les pueda servir de ayuda aferrarse a ellas para no sentir el peso insoportable de la realidad pero, para mí, son creencias del pasado que, nada tienen que ver ni con la Ciencia ni con los tiempos que se avecinan de Ciborgs y viajes espaciales a otros mundos.
    Y, sin ninguna duda por mi parte te siré que sí, en el Universo existen muchas más conciencias que las nuestras propias, la de los humanos ubicados en este pequeño terroncito de roca y agua que, algunos, creen que es el “universo entero” cuando, en realidad y como tú mismo bien sabes, es simplemente una ínfima parte de un conjunto mucho mayor. Lo mismo pasa con nosotros en el conjunto del inmenso universo.
    Lo cierto es que, en la fábrica del Universo no existen huecos para “divinidades” ni “dioses” Recuerda querido amigo que, en aquella Grevcia clásica de hombres sabios, uno de ellos, Tales de Mileto, dejó a un lado la mitologia para emplear la lógica y, en ese preciso momento, comenzó allí la verdadera ciencia. De la misma manera, debemos nosotros dejar a un lado “nuestras” propias “mitologías” que ahora llamamos religiones y, mirar más atentamente a lo que hace la Naturaleza que, al fin y al cabo, es la única que podría ser considerada, de alguna manera, como una especie de “ser supremo”, en ella están todas las respuestas y, su proceder, está marcado por unas leyes que no han escrito los hombres.
    Si el Universo es un conjunto consciente es difícil de aseverar, nada tenemos en nuestro vagaje y conocimientos que nos permita afirmar tal cosa. Sin embargo, sí podemos decir que el Universo tiene memoria. Es decir, nos va dejando un rastro que, a medida que sabemos, podemos localizar y que nos cuenta su propia historia. De esa manera podemos llegar a saber de ddonde vino y hacia donde se dirige y, por ninguna parte en ese largo camino, hemos encontrado “dioses”, simplemente surgieron criaturas que llegaron a creerse como tales, tal era su inmensa ignorancia.
    Lo supremo está en la Naturaleza a la que pertenecemos y de la que formamos parte pero, ésta, a pesar de ser ella nuestra creadora, actuará siempre como si no estuviéramos aquí. Lo que pase será cosa del Azar y, si logramos alcanzar un nivel aceptable de sabiduría, incluso podremos llegar a tener en nuestras manos niuestro propio destino.
    ¿Dios? ¿Qué es eso?
    Un abrazo amigo mío.
     

    Responder
  8. 8
    Fandila
    el 17 de mayo del 2013 a las 8:45

    Sin embargo el universo se deja modular y es modulador de los seres que lo componen.
    La interconexión cósmica es total y con arreglo a cada una de sus partes. El entrelazamiento cuántico es, o parece ser, un hecho.
    El universo, el Todo, o cualquier asintótico imaginables son formales. Digamos, que cumplen con su compromiso en el tiempo relativo, pero siempre derivan (En el tiempo) hacia otros derroteros. Si no, no estariamos aquí ni permaneceríamos. Los racionales somos nosotros, y cambiantes de la noche al día, para probar de nuevo una y otra vez adaptándonos a esa linea de experiencia que es la razón al fin y al cabo, como  espejo de la realidad que percibimos.
    La diosa razón. El engreimiento humano que piensa que todo es como su sistema neuronal lo concibe. Sin discernir, que dicho sistema no es otra cosa que una resonancia. Un receptor emisor que elabora una respuesta según una norma que le viene impuesta desde fuera, el medio.
    ¿Qué esperamos encontrar?, el sometimiento a una generalidad, que nos supera porque somos un producto suyo.
    Eso significa que las partes, como nosotros mismos, damos cuerpo a la existencia tal como la percibimos.
    ¿A la medida de cada cual, y no hablo solo de seres inteligentes, la realidad se transforma?
    Las leyes ciegas, sobre todo cuanto más nos adentramos en la cuantica, ya no parecen serlo. Como si ese fuera el sistema “consciente” del universo que va su bola. Todo no ocurre igual en todo tiempo y con la evolución formas nuevas aparecen.
    ¿Podría ser de otra manera? ¿Se puede hablar de un ser fuera de todo al que se llamó Dios? ¿Por que?
    ¿Sería ese Dios un ser libre? De ser independiente del resto, claro que sí. Pero si el libre albedrío no existe o es cuestionable, tambien lo sería para ese ser supremo que estaría “pendiente” de su obra. ¿El automatismo sería suficiente? Aparentemente así lo vemos.
    ¡La Naturaleza. La que nos trae y nos lleva! Sus principios universales e inmutables. ¿Realmente existen unos pricipios inmutables. ¿Los establecidos por la Ciencia son únicos e imperecederos? Parece ser que no. o por lo menos a largo plazo. Afortunadamente todo ocurre en un tiempo que nosotros estimamos muy grande y casi eterno. Pero estamos hartos de saber que las variables varían según cambios de dimensiones.
    En definitiva ¿podríamos vivir, o qué existiría si el tiempo fuese tan breve como un soplo? La constancia de los principios… Cualquiera sabe si solo son aplicables a un movible espacio tiempo
    Todo es racional porque nosotros lo interpretamos según la racionalidad. Pero ha de haber algo (Estructuras más sofisticadas)que seguramente nos interprete a nosotros  según nos percibe, y cuánto, si domina todos nuestros resortes(La globalidad que nos engloba).
    La razón es “nuestro mejor instrumento”, la manera de llegar pasito a pasito a conocimientos cada vez más desconocidos.
    Qué le vamos a hacer, las cosas son, como sean. Como dijo el Maestro: “No por mucho cavilar añadireis un solo codo a vuestra estatura”
    Cuantas maravillas conocemos y cuantas conoceremos. Y como decía aquel ateo, si Dios quiere.
    Saludos
     

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  9. 9
    emilio silvera
    el 17 de mayo del 2013 a las 12:05

    Filosofar es bueno, despeja la mente y amplía los pensamientos, al menos, a nosotros los humanos, nos causa la sensación de haber profundizado, algo más, en las cosas que creemos conocer. Tu mismo te respondes a los muchos planteamientos que todos nos hacemos y que nadie sabe contestar.
    Lo cierto es que, todo es relativo, y cada cosa en su lugar y en su tiempo, tiene marcada “su vida” que, si es consciente, será una vida entera y aprovechada más o mneos en función de cada “cosa” o “ser”, ya sabes, lo que decía el sabio: “Todas las cosas son” y, elevó a todas las “cosas” a la categoría de Ser.
    Un neutrónn tiene una vida media de un cuarto de hora y, un protón, en cambio, tiene una vida larga, muy larga, tanto que, hasta el momento presente, nadie ha vistyo a ningún protón “morir”. Las cosas que la Naturaleza hace son secretos que sólo ella conoce y, nosotros, simples mortales, tratamos de saber, el por qué de las cosas.
    Como bien dices, vamos sabiendo poco a poco y, cada vez, añadimos algo nuevo al repertorio de cosas que creemos conocer. Construímos modelos de todo y tratamos de sondear la Naturaleza para tratar de ver si las fuerzas y las contantes del Universo son inamovibles como parecen.
    Hemos llegado a saber que el paso del tiempo, las temperaturas, las transiciones de fase y otros fenómenos más o menos comprendidos, son los causantes de cambios y transformaciones. Sin embargo, en lo más profundo de del Universo, sabemos que existen cosas que no comprendemos y otras que pueden existir y que ni somos conscientes de ello, ya que, nuestra realidad es eso “nuestra realidad” pero, no la realidadl del mundo, de la Naturaleza, del Universo.
    La conclusión a la que mejor podemos llegar es que, nososotros, a pesar de todo lo que podamos creer, arrastramos una inmensa ignorancia que será, precisamente, la que nos lleve a saber, toda vez que, nos avergonzamos de ello cada día.
    Ya sabes amigo mío: Son muchas más las preguntas que las respuestas.
    Saludos.

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  10. 10
    Fandila
    el 17 de mayo del 2013 a las 12:49

    Relacionado con todo esto, me sorprende el hallazgo de unas pretendidas matemáticas vorticiales, cuyos adeptos consideran, a lo que se ve, como el fundamento último de todo.Tal como suena, de todo.
    Yo que procesaba un respeto por la teoría de vórtices, y que me parecen de lo más adecuado para los fenómenos emergentes del vacío y de fluidos en general, ya sean de caos o no caos, casi repudio algo que es coherente y probable.
    Vienen a decir, que el principio (Y todo lo que le sigue) es una cuestión matemática, y aún más, de números, ciertos números.
    El estudio preliminar lo hacen en las antiguas culturas y cuyos símbolos y representaciones traducen a matemática, a un significado de los números y sus representaciones, siempre en base 10.
    ¿Qué pensar de algo tan rebuscado? Llegan a identificar al Máximo Hacedor, es decir a Dios, con el número nueve. Y dan sus razones en una especie de cuanto original y sus movimientos.
    Pero mejor verlo que contarlo.
     
    CIENCIA > MATEMÁTICAS VORTICIALES – absolum.org
    http://www.absolum.org/ciencia_matematicas_vorticiales.htm

     Esta y toda una colección de webs o blog sobre lo mismo.
    ¿Habrá una lógica aceptable para esto?
     
    Saludos

    Responder
    • 10.1
      emilio silvera
      el 18 de mayo del 2013 a las 7:37

      ¿Volvemos al “Todo es número de Pitágoras?
       
      “Marko Rodin ha descubierto la fuente de la no descomposición del giro del electrón. Aunque los científicos saben que todos los electrones en el universo giran nunca han descubierto el origen de este giro. Rodin lo ha hecho. Ha descubierto la base geometríca del universo, la fábrica del tiempo en sí mismo. Lo ha hecho mediante la reducción de todas las matemáticas superiores – cálculo, geometría, matemática escala – a una matemática de discretos números.
      Con la introducción a las Matemáticas Vorticiales podrás ver cómo la energía se está expresando matemáticamente. Estas matemáticas no tienen anomalías y muestra la forma tridimensional y la función del universo como un agujero negro o una rosquilla en forma de toroide. Esta es la plantilla para el universo y todo está dentro de nuestro sistema decimal de base diez!
      El alcance potencial y la amplitud de la solución de Rodin son asombrosos, son de aplicación general en matemáticas, ciencias, biología, medicina, genética, astronomía, química, física y ciencias de la computación. La solución de Rodin va a revolucionar equipos informáticos mediante la creación de un espacio vacío crucial…”
       
      Lo cierto es que, si profundizas en todo esto, llega a tener un gran interés, toda vez que nos habla de nuevos caminos, nuevas formas, nuevos modelos y nuevas perspectivas que nos llevan al mismo sitio de siempre… ¡Querer saber! Lo que la Naturaleza y el Universo es.
       
      Habrá que dar tiempo al tiempo para poder emitir un juicio razonable y razonado de todas estas nuevas teorías matemáticas que nos hablan de cómo es el mundo en realidad.
      Un saludo amigo.

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