Feb
27
¿Cerebro y Mente? ¿Inteligencia y Sabiduría?
por Emilio Silvera ~ Clasificado en El Universo y la Mente ~ Comments (0)
« ¡El Universo! Y nosotros… ¿Seremos su parte que piensa?
El mito del eterno retorno: la Regeneración del Tiempo
Tomado literalmente, el tiempo cíclico hasta sugiere una especie de inmortalidad. Eudemo de Rodas, discípulo de Aristóteles, decía a sus propios discípulos: “Si creéis a los pitagóricos, todo retornará con el tiempo en el mismo orden numérico, y yo conversaré con vosotros con el bastón en la mano y vosotros os sentaréis como estáis sentados ahora, y lo mismo sucederá con toda otra cosa”. Por estas o por otras razones, el tiempo cíclico aún es popular hoy, y muchos cosmólogos defienden modelos del “universo oscilante” en los que se supone que la expansión del universo en algún momento se detendrá y será seguida por un colapso cósmico en los fuegos purificadores del siguiente Big Bang.
La estrella Wolf 1061 y sus tres planetas. El «c» es el potencialmente habitable – UNSW
Un equipo de astrónomos australianos ha descubierto el planeta potencialmente habitable más cercano a la Tierra fuera del Sistema Solar, a «solo» 14 años luz, una distancia que puede parecer muy larga, pero que es mucho más corta que la que nos separa de la mayoría de candidatos a albergar vida y una nadería en la inmensidad del Universo. Este nuevo mundo, que tiene más de cuatro veces la masa del nuestro, es uno de los tres que el equipo detectó alrededor de una estrella enana roja llamada Wolf 1061.
La física cuántica nos dice como es la Naturaleza
En el Universo existen muchas clases de resonancias…inesperadas
Las resonancias parecen ser solamente una especie de versión excitada de los Hadrones estable. Son réplicas que rotan más rápidamente de lo normal o que vibran de diferente manera. Análogamente a lo que sucede cuando golpeamos un gong, que emite sonido mientras pierde energía hasta que finalmente cesa de vibrar, una resonancia termina su existencia emitiendo piones, según se transforma en una forma más estable de materia.
Por ejemplo, la desintegración de una resonancia ∆ (delta) que se desintegra por una interacción fuerte en un protón o neutrón y un pión, por ejemplo:
∆⁺⁺→р + π⁺; ∆⁰→р + πˉ; o п+π⁰
En la desintegración de un neutrón, el exceso de energía-masa es sólo 0,7 MeV, que se puede invertir en poner en movimiento un protón, un electrón y un neutrino. Un Núcleo radiactivo generalmente tiene mucha menos energía a su disposición.
Visión tridimensional del gas expulsado de NGC 253. El eje vertical muestra la velocidad y el horizontal la posición. Los colores representan la intensidad de la emisión; rosa es la emisión más fuerte y rojo la más débil. : ALMA (ESO/NAOJ/NRAO)/Erik Rosolowsky.
Cerebro y Mente, son dos entes separados que depende el uno del otro… ¡Siempre nos dio mucho en que pensar! Lo cierto es que la Mente trasciende al Cerebro, allí se crea pero, cuando está constituida campa a sus anchas.
Inteligencia y Sabiduría: La primera puede ser natural en el individuo y ser elevada por el estudio. La Segunda, se adquiere utilizando esa inteligencia y añadiéndole la experiencia.
No acabamos de ponernos de acuerdo en el hecho de si, la sabiduría, o la competencia profesional o la pericia, también la Inteligencia, pueden ser catalogadas como categorías biológicas, pero lo son. La mayoría de la gente comprende, de forma general y vaga, que la mente es producto del cerebro, pero no siempre resulta fácil comprender lo íntima que es esta relación. Aunque acepte la conexión entre Mente y Cerebro en tanto que proposición abstracta, la mayoría de las personas no llegan a entender ni asimilar de forma inmediata estas cuestiones del cerebro-mente-inteligencia-sabiduría, como sí lo hacen con las cuestiones más cotidianas.
En realidad, cuando hablamos de Mente y cerebro lo hacemos como parte de un vestigio pertinaz y recalcitrante que nos viene de lejos, cuando algunos estudiosos de la Filosofía como René Descartes, proponían que mente y cerebro estaban separados y que la Mente existe de manera independiente del cuerpo. Muchos son los libros que sobre el tema han sido escritos, algunos excelentes como: El error de Descartes, La Table rasa y otros muchos. La secular incapacidad para entender que la mente es producto del cuerpo inspiró la pintoresca imagen de la mente como el ente superior, inmaterial, que viviendo en el cerebro, en realidad era sensorialmente inmaterial y podía, estar fuera o dentro de nosotros para general ideas y pensamientos.
El cerebro se estimula cuando le llega información. Las sinapsis se producen entre neuronas que reciclan los datos que le llegan desde el exterior, el estudio, la experiencia del individuo… Todo ello, crea conocimientos y genera nuevas ideas relacionadas con ellos… ¡Es el nacimiento de la Mente individual que se separa del cerebro para viajar sola hasta el “infinito”.
Todo es causa de lo que primero pasó
Las reglas de causa y efecto, tal como las aceptas, te han metido en el volumen de un cuerpo, y la duración de la vida humana. En realidad, el campo de la vida humana es abierto e ilimitado en su más profundo plano.
Tu cuerpo carece de edad y tu mente de tiempo. Una vez que te identifiques con esa realidad, que es congruente con la visión cuántica del universo, entraras en el nuevo paradigma, y tu conciencia, sé expandirá, cósmica y cuánticamente en fractales radiales exponenciales y dimensionales.
Al mirar el Microscopio electrónico, (Microcosmos) vemos como las partículas cuánticas se mueven, (virtualmente) a la velocidad de la luz, y si miramos al cielo y observamos las Estrellas, veremos la inmutabilidad del Macrocosmos. Cada uno habita en una realidad que se encuentra mas allá de todo cambio. En lo más profundo de nosotros, sin que lo sepan nuestros sentidos externos tridimensionales o físicos, existe un intimo núcleo del ser, un campo de inmortalidad, que crea la personalidad, él yo y el cuerpo. Este ser es nuestro estado esencial, es nuestra esencia (Alma), es quien realmente somos. Somos Almas en este inmutable escenario eterno.
Sólo sabemos que, su transcurrir… ¡La cambia todo!
Nadie ha sabido nunca explicar lo que el Tiempo es. Lo único que hemos podido sacar en claro es que, su transcurrir lo cambia todo. Su hermana inseparable, la Entropía, se encarga de ello. Y, de su hipotética prima, la Eternidad, no podemos decir que la tengamos localizada, ya que, todo tiene un principio y un final y, siendo así (que lo es), la Eternidad no tiene cabida aquí.
Ni una Galaxia, cuya vida se remonta a miles de millones de años… ¡Es Eterna!
Aquel pensador decía: “Que no está muerto lo que duerme eternamente, y, con el paso de los eones, hasta la misma muerte tendrá que morir.”
Otros dicen que el Tiempo existe solo como eternidad, el tiempo es Eternidad Cuantificada, es la temporalidad cortada por nosotros, en trozos o fragmentos, de tiempo que llamamos días, horas, minutos, y segundos. Lo que llamamos tiempo lineal es solo un reflejo de nuestro modo de percibir los sucesos o los cambios en que nos vemos envuelto en nuestro limitado sistema perceptual .
Si se pudiera percibir lo inmutable, el tiempo dejaría de existir tal como lo conocemos. Podemos empezar por aprender, a concebir y metabolizar lo Inmutable, la Eternidad, lo Absoluto, al hacerlo, estaremos listos para crear la fisiología de la Inmortalidad. Claro que es difícil, si se tiene una comprensión aceptable del universo, asimilar esos conceptos de eternidad, infinito o inmortalidad que… ¡En nuestro universo no están presentes! Aquí todo se transforma, todo comienza y termina, todo nace y muere.
Somos propensos los Humanos, cuando hablamos y queremos contar cosas, hacer referencias que, en realidad, sólo son metáforas de “Vacío”, de “Infinito”, o, de “Eternidad” esos tres conceptos que utilizamos para decir que hay poco, que nunca muere, y que dura siempre. Claro que, ninguno de los tres conceptos son ciertos en nuestro Universo: Ni existe el Vacío (siempre hay), Ni tampoco nada es infinito (todo muere), y, de la Eternidad que podemos decir: Sólo es una abstracción de la Mente.
Si somos capaces de entrar en ese campo transcendente de superior nivel filosófico y hasta metafísico se podría decir, ya no creeremos en ese dualismo cartesiano entre cuerpo y mente…nos podremos deposjar de vestigios del pasado y llegar a comprender, con claridad meridiana que, la Mente es algo evolucionado dentro de nuestro cuerpo que ha sido puesta ahí por mecanismos del universo que no hemos podido llegar a entender pero que, de todas formas intuimos que, la conexión entre ambos, Mente y Universo, es tan real como la vida misma.
Los mecanismos del Universo hizo posible el surgir de la Vida y, en alguna de sus modalidades (seguro que existen muchas más) se plasmó esa simbiosis primera de Cuerpo y Mente que haría posible la evolución de la segunda para que, después de algunos miles o millones de años, pudiera alcanzar el zenit en individuos que eran poseedores de rasgos e ingredientes predeterminados de personalidad e inteligencia, empuje y energía, la capacidad para entender lo que otros no entienden, el poder fijarse objetivos a largo plazo que requerían de un talento innato y especial que no era posible adquirir sino que se nace con él. Es el destino biológico de unos pocos que, a pesar de su talento, sí necesitaron del empuje y la ambición y, finalmente, los triunfos, llegaban como frutos del esfuerzo individual.
Al fin y al cabo todo el mundo acepta que el esfuerzo solo no basta para convertirse en un Mozart, un Shakespeare o un Ramanujan. Para subir esa escalera que te llevará a la cumbre, principalmente, el ingrediente necesario será el Talento, la Sabiduría y, de vez en cuando, se agrega un poquito de suerte o azar.
Claro que la Sabiduría es una buena noticia para todos nosotros. Si alguien la posee, siempre tenderá a exponerla a los demás para que, de una u otra forma podamos disfrutar de ella aunque sólo sea a través de la admiración hacia el Sabio que no la muestra pero, en realidad, en el último momento, lo que deseamos es apropiarnos de algo de esa sabiduría para nosotros. ¡Necesitamos saber!
Es el saber popular de todas las Sociedades a lo algo de la Historia, la sabiduría siempre ha sido asociada con los ancianos. La sabiduría ha sido el más preciado bien y, en torno a ella, todos nos hemos puesto en coro a escuchar esas palabras sabias que nos indicaban el camino a seguir.
No siempre hemos sabido determinar lo que es la realidad y lo que son sólo sueños. Escenarios que nuestros ojos ven y que nuestros oidos oyen, son los mensajes que el cerebro recibe y se los cree. Así que, teniendo unos sentidos limitados, es posible, que los mensajes no sean todo lo fiables que debería y, el “mundo” que el cerebro conforma… ¡Puede que no se ajuste a la realidad del “mundo”!
No todos pueden ver la misma cosa de la misma manera
¿Qué es la realidad?, ¿Cómo la definimos?, ¿Cuántas realidades hay?, ¿Cada uno de nosotros tiene su propia realidad?¿Qué realidad nos transmite el Universo en nuestro Mundo, será distinta a realidades de otros Mundos? ¿Es una realidad la cuántica? ¿Existen realidades que no podemos percibir? La realidad va en función de la percepción que se tenga de ella, y esta forma parte de la Conciencia. Nuestra conciencia actual es un condicionamiento de nuestra visión del mundo actual y colectivo, es la que nos enseñaron nuestros padres, maestros, la sociedad, gobierno y religiones. A esta manera de ver y entender el mundo, pertenece el antiguo paradigma. Y, como nos diría Tom Wood, necesitamos nuevos paradigmas para poder entender la “realidad” de la Naturaleza.
Es cierto que, algunas veces, cuando profundamente pensamos en todos estos conceptos, llegamos a la conclusión de que la realidad no existe, y, si entramos en el mundo de la filosofía podríamos argumentar que nunca nadie ha podido “ver” un pensamiento y, sin embargo, ¿Cuántos generamos durante nuestras vidas?
A partir del mundo físico de Faraday Maxwell nos pudo señalar su mundo mental de la electricidad y el magnetismo. En esas cuatro ecuaciones vectoriales nos cuenta… ¡Tantas cosas!
El mundo físico, incluido nuestro cuerpo, es una reacción del observador. Creamos el cuerpo según creamos la experiencia de nuestro mundo. En su estado esencial (micro-cósmico), el cuerpo está formado de energía e información, y no de materia sólida. Esta energía e información, surge de los infinitos campos de energía e información que abarcan todos los universos. La mente y sus cuerpos, desde el físico hasta el espiritual y sus múltiples manifestaciones multidimensionales, son inseparablemente uno, o sea la unidad YO SOY.
Esta unidad Yo Soy, la separaremos en dos corrientes de experiencia. La experimentamos primero como corriente subjetiva, como pensamientos, ideas, sentimientos, deseos y emociones. La corriente objetiva la experimentamos como el cuerpo físico, mas sin embargo en un plano mas profundo, las dos corrientes se encuentran en una sola fuente creativa, y es a partir de esta , desde donde realmente nos manifestamos y tenemos nuestro ser.
La bioquímica del cuerpo es un producto de la conciencia, las creencias, los sentimientos, las emociones, los pensamientos e ideas, crean reacciones que sostienen la vida en cada célula. La percepción parece como algo automático, pero esto es un fenómeno aprendido, si cambias tu percepción, cambias la experiencia de tu yo , y por ende de tu mundo.
Por supuesto, todos sabemos el dilema del observador en la cuántica. Se trata del enigmático principio de incertidumbre que nos impide medir una partícula sin afectar el resultado. Es posible conocer una cosa, más no la otra. Por mucho tiempo, Copenhague fue el modelo que rigió ese conocimiento específico de la cuántica pero ya existe otro. Tenemos el experimento del físico John Cramer que basó su modelo en la teoría de radiación electromagnética de Wheeler-Feynman y predice los resultados de los experimentos cuánticos tan bien como el “viejo” modelo lo hace. Lo más atractivo: el observador no tiene ningún papel especial en el resultado.
En realidad, solo somos una parte infinitesimal de lo mucho que podemos vislumbrar.
Los humanos seguimos afianzándonos a todo lo que nos ponga en el centro de las cosas. Los fenómenos que no pueden ser explicados nos excitan y hemos estado usándolos para justificar a nuestros dioses desde que descubrimos que podemos producir ilusiones para tapar nuestra ignorancia. Cada vez que algo es explicado, movemos nuestras pertenencias hacia el próximo misterio; y cuando ese enigma revela sus mecanismos nos pasamos a otro. No es la ausencia de evidencia lo que mortifica al creyente que propone afirmaciones extraordinarias como verdaderas, son las evidencias del otro, del científico en el laboratorio; él lo obliga a buscar otra casa y mudarse donde no haya iluminación.
Lo cierto es que, creamos nuestra propia realidad dentro de otra realidad más grande que resulta ser el UNIVERSO.
Claro que, esa sabiduría a la que antes me refería nos debería llevar hasta propósitos superiores, incluso de una célula podríamos aprender: Cada Célula del cuerpo acuerda trabajar por el bien del Todo; el Bienestar individual es secundario. Si es preciso, morirá para proteger al cuerpo (Lo que ocurre con frecuencia). La vida de cualquier célula es muchísimo más breve que la nuestra. Las células de la piel mueren por cientos cada hora, al igual que las inmunológicas que combaten los microbios invasores. El egoísmo resulta inconcebible, incluso cuando la supervivencia de las células está en juego.
Los paisajes cambian como todo en nuestro Universo
¿Por qué no hacemos nosotros lo mismo? ¿Acaso no hemos finalizado nuestro proceso de Humanización, o, por el contrario, simplemente se trata de que somos así. Seres egoístas en los que prima lo individual y el YO, contra el NOSOTROS, como Ente principal. Hay una cuestión que me da algo de esperanza: Cuando hablamos de nuestros hijos, de nuestro ser Amado…El Yo se queda detrás y prevalecen esos valores que, en realidad, son los que nos distinguen y nos hacen grandes.
Bueno, pero ¿no estaba hablando de la Mente, la Sabiduría y la Inteligencia? Sí, es posible. Sin embargo, todo siempre viene a desembocar en lo mismo: Nosotros y el Universo.
emilio silvera
Dic
8
El Universo y la Mente
por Emilio Silvera ~ Clasificado en El Universo y la Mente ~ Comments (0)
¿Dónde estabas tú cuando yo puse los cimientos de la Tierra? Dilo si tienes entendimiento.
Contestar a esa pregunta sólo puede ser la de otra pregunta: ¿Quién sabe realmente? So todo lo que ahora “sabemos” es el fruto (primero) de la especulación (más tarde) de la observación, y, finalmente, del experimento. Cuando no sabemos conjeturamos y hablamos de la existencia de cuerdas vibrantes, o, de “materia oscura” que tratan de justificar lo que no sabemos.
Se ha confeccionado el primer censo de las galaxias más primitivas y distantes. Un equipo de astrónomos dirigido por el Instituto Tecnológico de California (Caltech), en Pasadena, ha utilizado el Telescopio Espacial Hubble de la NASA para descubrir siete de las galaxias más arcaicas y distantes.
La más antigua de estas galaxias descubiertas ha sido observada tal como era cuando el universo tenía sólo 380 millones años de edad. Todas las galaxias recién descubiertas se formaron hace más de 13.000 millones de años, cuando el universo tenía sólo el 4 por ciento de su edad actual.
Sin embargo, lo que nadie sabe explicar es que, en presencia de la expansión de Hubble, cuando la materia corría imparable creando el espacio, las galaxias se pudieran formar. ¿Qué estaba allí presente que generaba la fuerza de Gravedad necesaria para que las galaxias se pudieran formar?
“Ylem o hylem (forma aumentativa de la palabra griega ὑλ [hylé] = materia) es el nombre dado por Aristóteles a la que consideraba sustancia fundamental de la cual procedería todo ente de materia.”
Si hablamos del Universo y de la Mente, habrá que pensar en la Vida
¿La Vida? Lo único que se me ocurre para contestar es decir que la Vida es el nivel más alto de la evolución de la Materia. Entendiendo, eso sí, que ese “nivel más alto” es aquel en el que se ha llegado hasta la consciencia de Ser. Cuando nos hemos percatado de que “somos”, entonces y sólo entonces hemos sido conscientes de que formamos parte del inmenso universo.
Podríamos decir, sin temor a equivocarnos, que somos (seguramente con otros muchos), lo más complejo que existe en el Universo, la materia evolucionada hasta el nivel de poder crear pensamientos.
Es verdaderamente admirable constatar cómo ha ido evolucionando nuestro entendimiento del mundo que nos rodea, de la Naturaleza, del Universo. Hubo un tiempo en el que, los individuos de nuestra especie deambulaban por este planeta pero, no sabían comprender el “mundo” ni podían pensar siquiera en el misterio que representaban los fenómenos naturales que a su alrededor se sucedían.
Pasado el tiempo, pudieron mirar hacia arriba y, la presencia de aquellos puntitos brillantes en la oscura y misteriosa oscuridad de la noche, despertó su curiosidad consciente y se pudieron hacer algunas preguntas. Muchas decenas de miles de años más tarde, nuestro deambular por el planeta, las experiencias y la observación de la Naturaleza, nos llevó a comprender, algunas de las cosas que antes no tenían explicación.
Pensadores del pasado dejaron la huella de sus inquietudes y los llamados filósofos naturales, hicieron el ejercicio de dibujar el “mundo” según ellos lo veían. Nos hablaron de “elementos” de “átomos” y, aunque no era el concepto que de esas palabras podamos tener, ya denotaba una gran intuición en el pensamiento humano que trataba de entender la Naturaleza y cómo estaban hechas las cosas que nos rodeaban. Ellos, a la materia primigenia la llamaron “Ylem” la sustancia cósmica.
Es cierto que siempre hemos querido abarcar más de lo que nuestra “sabiduría” nos podía permitir. , en el presente, las cosas no han cambiado y tratamos de explicar lo que no sabemos, y, para ello, si hay que inventarse la “materia oscura”, las “fluctuaciones de vacío”, los “universos paralelos”, los “agujeros de gusano”, o, cualesquiera otros conceptos o fenómenos inexistentes en el mundo material o experimental… ¡qué más da! Lo importante es exponer las ideas que nos pasen por la cabeza que, de alguna manera, pasando el tiempo, se harán realidad. Nuestras mentes, como digo, siempre fueron por delante de nosotros mismos y ha dejado al descubierto esa intuición que nos caracteriza y que, de alguna manera, nos habla de esos hilos invisibles que, de alguna manera, nos conecta con el resto del Universo del que, al fin y al cabo, formamos .
“Para Tales de Mileto el agua era el elemento primero de todas las cosas que existen, lo que dio comienzo al universo, una idea que los griegos llamaban arjé (del griego ἀρχή, fuente, principio u origen). … Al no estar sostenida sobre unas bases fijas si no que, como está flotando sobre el agua, ésta la hace tambalearse.”
Tales de Mileto fue el primero en expresar la importancia que tenía el agua para la Vida
Lo cierto es que estamos condenados a vivir en un Eterno Presente que viajó por el Pasado que podemos recordar, ¿El Futuro? Es algo que nunca podremos alcanzar, es como el horizonte, nos acercamos hacia él y siempre estará a la misma (inalcanzable) distancia.
, que hemos podido realizar un cierto avance en el “conocimiento del mundo que nos rodea”, no le damos la verdadera importancia que tienen algunos pensamientos del pasado que, en realidad, son los responsables de que ahora, nos encontremos en el nivel de conocimiento que hemos podido conquistar. Tales de Mileto, uno de los siete sabios de Grecia, fue el primero que dejó a un lado la mitología para utilizar la lógica y, entre otras muchas cosas, indicó la importancia que tenía el agua para la existencia de la vida. Empédocles nos habló de los elementos y Demócrito del a-tomo o átomo., Arquitas de Tarento (filósofo, soldado y músico), el amigo de Platón y seguidor de Pitágoras, ya se preguntaba: ¿Es el Universo infinito?
Arquitas y su ingenio volador
“Aunque Heron es el primero en recopilar datos sobre los autómatas otros anteriores a él realizaron sus aportaciones como es el caso de Archytas (428 aC- 347 aC) inventor del tornillo y la polea y famoso por su paloma mecánica capaz de volar gracias a vapor de aire en propulsión.”
“Un tornillo de Arquímedes es una máquina gravimétrica helicoidal utilizada para la elevación de agua, harina, cereales o material excavado. Fue inventado en el siglo III a. C. por Arquímedes, del que recibe su nombre, aunque existen hipótesis de que ya era utilizado en épocas mucho más antiguas en el Antiguo Egipto.”
Arquitas de Tarento (filósofo, soldado y músico), el amigo de Platón y seguidor de Pitágoras, ya se preguntaba: ¿Es el Universo infinito?
Te dan ganas de preguntar: ¿Qué habrá más allá del “borde” del Universo?
Él mismo se contestaba diciendo que todo tenía un límite y, pensaba en el final que lindaba con el “vacío”, allí donde nada impedía que su espada, lanzada con fuerza en el borde del universo, siguiera su camino sin fin, ninguna fuerza podría pararla y con ninguna clase de materia podría chocar. Así, con esos pensamientos surgidos de la mente humana, podemos constatar que, siempre, hemos tratado de saber de qué están hechas las cosas, cómo funciona la Naturaleza y de qué manera se comporta el universo y por qué lo hace de esa manera y no de otra.
El Universo se expande y nuestras mentes también. Eso que llamamos Tiempo siguió su transcurrir
Inexorable, los pensamientos de los grandes pensadores se fueron acumulando en un sin fin de conjeturas y teorías que, poco a poco, pudimos ir comprobando mediante la observación, el estudio y la experimentación hasta que, pudimos llegar a saber de qué estaban hechas las estrellas y cómo la materia se transmutaba en sus hornos nucleares crear elementos que hicieron posible el sugerir de la vida en los mundos (no creo que la vida esté supeditada a este mundo nuestro).
Creando mundos por la música y Los 9 mundos del Yggdrasill
El conocimiento que creemos que tenemos sobre cómo está conformada la materia y las fuerzas fundamentales que con ella interaccionan, nos ha llevado a escenificar un Universo algo más comprensible que aquel, que nuestros ancestros imaginaron con la presencia de “dioses” y “divinidades” que eran los que, creaban los “mundos” o, el universo mismo, cada vez que soñaban.
Es asombroso que hayamos podido llegar hasta la consciencia siendo la línea de salida la “materia inerte”. Sin embargo, el recorrido ha sido arduo y muy largo…, ¡diez mil millones de años han necesitado las estrellas poder solidificar los elementos de la vida para crear, en algunos de los muchos mundos presentes en las galaxias, el proto-plasma vivo que diera lugar a esa primera célula replicante que comenzara la fascinante aventura de la vida hasta llegar a los pensamientos.
NOS PUEDE PARECER MENTIRA PERO, EN LUGARES COMO ESE DE ARRIBA (DONDE LA QUÍMICA ESTÁ PRESENTE), LOS MATERIALES BOMBARDEADOS POR LA RADIACIÓN, EL OXÍGENO, EL AGUA LÍQUIDA… ¡PUDIERON HACER SURGIR LA RUDIMENTARIA VIDA PRIMERA!
Si nos preguntaran: ¿Es consciente el Universo? Tendríamos que contestar de manera afirmativa, toda vez que, al menos una sección importante de él, ¡la que piensa!, representada por seres vivos y que forman de ese inmenso universo, Sí que lo es. La vida es la consecuencia de la materia evolucionada hasta su más alto nivel y, a partir de ella, ha podido surgir eso que llamamos cerebro, un lugar de tal complejidad que es capaz de generar ideas y de él emana también ese algo inmaterial que llamamos mente, un ente inmaterial y superior que trasciende y va más allá, lo que los filósofos llamaron Ser y quisieron explicar mediante la metafísica, toda vez que, al estar fuera de la materia, nada podía la Física decir. Todavía, no sabemos lo que la vida es y tampoco, podemos explicar lo que es la energía, o, por exponer algún concepto de los muchos que denota nuestra ignorancia, tampoco podemos contestar a una simple pregunta: ¿Qué es el Tiempo? ¿Existe en realidad o simplemente es una abstracción de la mente? Ya hablamos aquí de eso hace unos días.
Lo cierto es que nuestra especie ha dejado profundas huellas de su deambular por el mundo. Muchos de sus “tesoros y obras” quedaron enterrados en las profundidades del tiempo o inundados por los diluvios que las distintas civilizaciones que fueron nos contaron con sus maravillosas leyendas que, en realidad, trataban de explicar algo que sucedió y que no llegaban a comprender y, ello, inventaban bonitas historias en las que, narraban hechos que quedaron difuminados por la fantasía hasta el punto de no saber, en el presente, hasta que punto eran ciertas o no las bonitas “historias” que nos contaron.
Lo cierto es que, con frecuencia sucede que, cuando surgen ideas nuevas que tienden a querer explicar científicamente lo que es la Naturaleza, aparecen viejos que relacionan esas nuevas ideas con aquellos viejos problemas. Tenemos que admitir que todavía “no sabemos” cómo es la realidad del mundo y que, nuestra realidad, no tiene que coincidir con la verdadera realidad que incansables buscamos.
De hecho, no sabemos explicar ni cómo se pudieron formar las galaxias, y, a pesar de ello, no tenemos empacho de hablar de singularidades y agujeros de gusano o de universos paralelos. ¡La imaginación!, creo que sin ella, no habríamos podido llegar hasta aquí. La imaginación unida a la curiosidad ha sido siempre, el motor que nos llevó hacia el futuro.
Si en realidad existe “el infinito”, seguro que está en nuestras mentes, o, posiblemente en otras que, como las nuestras, han imaginado cómo ensanchar el mundo y universo de los pensamientos sin límite alguno, el único límite que existe, amigos míos, es el de nuestra ignorancia llegar a comprender lo que la Naturaleza es. En la Naturaleza están todas las respuestas a las preguntas que planteamos y que nadie sabe contestar. En ella, en la Naturaleza, buscan nuestros ingenios esas respuestas y, para poder encontrarlas hemos inventado los aceleradores de partículas, los microscopios y telescopios y aparatos que, como los espectrómetros de masa y otros nos llevan a ese “otro universo” que el ojo desnudo no puede ver pero que, no deja de ser y estar en nuestro propio mundo, y, al ser conscientes de ello, también lo somos de nuestras limitaciones. En realidad, la única manera de avanzar es ser consciente de que no sabemos, toda vez que, si creyéramos que ya lo sabiamos todo… ¿para qué seguir buscando?
Todo está hecho de Quarks y Leptones. una Galaxia hasta el fiero león que habita en la selva
El pensamiento filosófico es un “mundo” que ensanchó los límites de la mente humana, nos llevó hasta la Ciencia, en un mundo en el que, las semillas de Quarks y Leptones se constituían en un universo material en el que, unas fuerzas fundamentales interaccionaban para hacer posible el ritmo de todo lo que podemos observar, de todo lo que existe y que llegó, a crear el espacio-tiempo y dentro de toda esa inmensidad, ¡los pensamientos y la imaginación! de objetos complejos que llamamos cerebro y transportan mentes creadoras de ideas como la de universos en la sombra, cuerdas cósmicas y otros muchos fantásticos fenómenos que pueblan un paisaje inmenso de “cosas” en constante ebullición que se transforman para crear otras diferentes. Para que eso sea posible, a veces podemos contemplar lugares violentos donde impera un Caos aparente pero, necesario para la creación.
Con aquellas sencillas palabras elevó a las “cosas” a la categoría de Ser. Nada de lo que existe lo hace en vano, siempre tiene un sentido predeterminado que enlaza con otra razón que explica su “ser”. Las piedras en el fondo del río, el panal de abejas, el viento, el arbusto espinoso, la lluvia, el Sol, la arena, el océano, las especies, … ¡Los pensamientos!
Con aquellas sencillas palabras, el sabio, elevó a todas las cosas a la categoría de SER. ¿Tendrá memoria la materia? ¿Será posible que eso que llamamos materia “inerte”, no sea en realidad tan inocua ni tan insensible como imaginamos? Es posible que cada de la materia sea un paso necesario para poder llegar hasta su estado de consciencia que, en este mundo, se ha revelado en nosotros.
emilio silvera
Dic
5
¿Qué somos en realidad? ¿Lo sabremos algún día?
por Emilio Silvera ~ Clasificado en El Universo y la Mente ~ Comments (0)
Si pudiéramos hacer una lista de los mundos que, como la Tierra, tienen las condiciones adecuadas para albergar alguna clase de vida… ¡La relación sería interminable! Nuestro Sol es una estrella ordinaria de la clase G2V, como ésta estrella existen, sólo en la Vía Láctea unos 30.000 millones, y, si a cada cuatro estrellas le damos un planeta como la Tierra… ¡Serían 7.500 millones las “Tierras” que existen en nuestra Galaxia.
Siendo así (que probablemente lo será), ¿Podríamos negar la existencia de vida fuera de éste planeta?
¿Vida fuera de la Tierra? El momento llegará
Viajar al pasado y conocer a personajes famosos a los que contar las novedades científicas. Algunos dicen que el viaje en el Tiempo está prohibido, aunque es posible. Siempre hemos tenido una gran imaginación y, cuando no sabíamos contestar a una cuestión compleja… ¡Inventamos la respuesta! Nuestra Imaginación no tiene límites y, uno de nuestros sueños, ha sido viajar al pasado y también, al futuro.
No es que estemos conectados con el Universo, lo cierto es, ¡que somos parte de él!
Estoy totalmente convencido de que, de alguna manera, nuestras mentes, están conectadas con el Cosmos del que formamos parte. Estamos aquí y nos parece de lo más natural, nunca nos paramos a pensar en cómo fue eso posible, en cómo surgió el “milagro”. A partir de la materia “inerte” evolucionada surgen entes pensantes y vivos, ¿cómo es posible tal maravilla? Hay que pensar (lo he referido en muchas ocasiones) que, el material del que estamos hecho (Nitrógeno, Carbono, etc.), se fabricó en las estrellas a partir del elemento más simple, el Hidrógeno que, evolucionado a materiales más complejos que llegaron hasta nuestro Sistema Solar primitivo en formación para constituirse en parte del Planeta Tierra en el que, bajo ciertas condiciones atmosféricas, presencia de agua y de radiación cósmica, dio lugar al nacimiento de aquella primera célula capaz de reproducirse y que evolucionaron hasta nosotros. No siempre fuimos así y, en el futuro, también habremos mutado.
Hemos podido llegar a saber que el cerebro, tanto si está despierto como si está dormido, tiene mucha actividad eléctrica, y no sólo por las señales individuales emitidas por una u otra neurona cuando se comunican entre sí. De hecho, el cerebro está envuelto por innumerables campos eléctricos superpuestos, generados por la actividad de los circuitos neuronales de las neuronas que se comunican. Una nueva investigación revela que estos campos son mucho más importantes de lo que se creía hasta ahora. Es posible que, de hecho, representen una forma adicional de comunicación neuronal. Se ha llegado a pensar que, con la evolución del cerebro, quizás algún día, los humanos, podamos transmitir telepáticamente. Sin embargo…
Estamos hecho de energía pura fabricada en las estrellas y nuestras mentes evolucionan formando parte de un Universo en constante expansión del que, sin que nos demos cuenta, recibimos continuos mensajes que nos mantiene conectados a esa fuerza invisible que nos hace pensar para descubrir su fuente.
En algún momento breve, he tenido la sensación de tener en mi mente la solución a un pensamiento continuado sobre un problema científico que me preocupa y quisiera conocer. La sensación de ese saber, de tener esa respuesta deseada, es fugaz, pasa con la misma rapidez que llegó. Me deja inquieto y decepcionado, estaba a mi alcance y no se dejó atrapar. Me ocurre con cierta frecuencia con distintos temas que me rondan por la cabeza. Sin embargo, esa luz fugaz del saber aparece y se va sin dejar rastro en mi mente que me permita, a partir de una simple huella, llegar al fondo de la cuestión origen del fenómeno.
¡Esa conexión invisible que nos ata a las estrellas!
La mente humana es una maravilla. Esas sensaciones que antes he mencionado, y, que en mí, llegan y se van sin dejar huellas, son las mismas que sintieron Galileo, Kepler, Newton, Planck o Einstein, lo único diferente es que en ellos, la sensación no fue tan fugaz, se quedó el tiempo suficiente en sus mentes como para que pudieran digerir el mensaje y comunicar al mundo lo que les había transmitido. Así, a fogonazos de luz del saber, avanza la Humanidad.
Nadie ha podido explicar nunca como llegan esos fogonazos de luz del conocimiento a unas pocas mentes elegidas.
El cerebro se cuenta entre los objetos más complicados del Universo y es sin duda una de las estructuras más notables que haya producido la evolución. Hace mucho tiempo, cuando aún no se conocía la neurociencia, se sabía ya que el cerebro es necesario para la percepción, los sentimientos y los pensamientos.
En tanto que objeto y sistema, el cerebro humano es muy especial: su conectividad, su dinámica, su forma de funcionamiento, su relación con el cuerpo y con el mundo, no se parece a nada que la conciencia conozca. Su carácter único hace que el ofrecer una imagen del cerebro se convierta en un reto extraordinario. Aunque todavía estamos lejos de ofrecer una imagen completa del cerebro, si podemos ofrecer retazos y datos parciales de algunos de sus complicados mecanismos. Sin embargo, carecemos de información para generar una teoría satisfactoria de la conciencia.
Estamos tratando de algo que pesa poco más de 1 kg –aproximadamente- y que contiene unos cien mil millones de células nerviosas o neuronas, generando continuamente emociones, etc.
¡Increíble, grandioso! ¿Pero sabemos encausarlo? De momento: NO.
El ADN de nuestros cuerpos contienen un registro del pasado, porque nuestros genes han sido moldeados por circunstancias ambientales. Aunque el registro genético, como el registro geológico, ha quedado envuelto y oscurecido por los estragos del tiempo, no está completamente borrado.
Sonsacando información de los genes, los microbiólogos pueden decir mucho sobre el ancestro universal que pudo haber vivido hace unos 4.000 millones de años, y con esta infromación podemos conjeturar algo sobre las condiciones que imperaban en aquella época. El mensaje que se extrae es una auténtica sorpresa. Pero debemos confiar en nosotros mismos, en ese cerebro que aún no conocemos y que, en abril de 2.003, por ejemplo, nos llevó a completar con éxito la secuenciación de 3.200 millones de letras de A D N presentes en el genoma humano.
Precisamente, ese conocimiento, se puede ver como un manual de instrucciones reconvertible en el libro de medicina más potente imaginable. Parece que ahí está el futuro de la salud humana: La Genética. El reto que tenemos por delante consiste en adoptar la forma correcta en que se deben leer los contenidos de todas esas páginas que contienen la secuenciación de los 3.200 millones de letras de A D N, y comprender el modo de cómo funcionan juntas las distintas partes para encausar la salud y la enfermedad humanas.
La consecuencia más importante de todo esto es que se ha abierto la puerta a un alentador y enorme (aunque complejo) paisaje biológico nuevo. Su exploración necesitará de pensamientos creativos y nuevas ideas.
En el Universo todo es energía y de ellas surgimos nosotros y surgió la Conciencia que tratamos de conocer. Vinimos de las estrellas y hacia las estrellas regresaremos algún día lejano en el futuro, cuando esa conciencia se expanda hasta el punto de que podamos comprender. Nadie puede negar que: ¡La energía del Universo está en nosotros! Se nos da un tiempo (si no surgen problemas) para que podamos desplegar la parte alicuota de intelecto que nos toco en “suerte”, por “azar”, “genética” o vaya usted a saber el motivo de que, algunos tengan dotes superiores a las que otros tenemos y puedan “ver” con más facilidad la naturaleza de la Naturaleza. Creo que, todos los misterios del Universo, residen en nuestras mentes en las que, se encuentran todas las respuestas que podremos encontrar con el Tiempo. Precisamente por eso, se nos ha otorgado el don de poder luchar contra la entropía y, junto con las galaxias espirales, podemos generar entropía negativa que impide el deterioro ininterrumpido del mundo.
Lo incomprensible de todo esto es que lo podamos comprender. ¡Ideas que surgen tratando de decirnos como es el “mundo”
Hace 30 años, todo esto era un sueño, nadie se atrevía a pensar siquiera con que este logro sería posible algún día ¡secuenciar 3000 millones de grafos de A D N! Sin embargo, aquí viene la contradicción o paradoja, el cerebro que aún no conocemos, lo ha hecho posible. La genómica es una auténtica promesa para nuestra salud, pero necesitaremos algunos saltos cuánticos en la velocidad y la eficacia de la secuenciación del A D N.
No será fácil llegar a comprender lo que aquí vemos
Los circuitos y conexiones cerebrales generan números que sobrepasan el de estrellas en las galaxias. Estamos tratando de algo que pesa poco más de 1,4 Kg –aproximadamente–, que contiene unos cien mil millones de células nerviosas o neuronas, generando continuamente emociones y pensamientos.
La consecuencia más importante de todo esto es que se ha abierto la puerta a un alentador y enorme (aunque complejo) paisaje biológico .Su exploración necesitará de pensamientos creativos y nuevas ideas. Hace 40 años, todo esto era un sueño, nadie se atrevía a pensar siquiera con que este logro sería posible algún día ¡secuenciar 3000 millones de grafos de A D N! Sin embargo, aquí viene la contradicción o paradoja, el cerebro ¡que aún no conocemos!, lo ha hecho posible. La genómica es una auténtica promesa para nuestra salud, pero necesitaremos algunos saltos cuánticos en la velocidad y la eficacia de la secuenciación del A D N.
Nuestra consciencia trata de “volar” hacia el universo al que pertenece
Está claro sin embargo que, dadas todas las dimensiones del ser humano, que incluyen aspectos tanto materiales como espirituales, será necesario mucho, mucho, mucho tiempo, para llegar a conocer por completo todos los aspectos complejos encerrados en nuestro interior.
El adelanto que se producirá en las próximas décadas estará y será más visible en el aspecto biológico y la curación de enfermedades como el cáncer y otras nefastas como el Sida que asolan nuestro mundo. El conocimento de la Psique, de nuestra propia conciencia, será mucho más lento.
Hay que tener en cuenta que primero debemos tener un conocimiento completo de los primates, tal conocimiento nos proporcionaría luz sobre lo que convierte en únicos a los seres humanos. Al decir únicos me refiero al hecho diferenciador de la conciencia y, desde luego, lo circunscribo al planeta Tierra, ya que, referido a todo el Universo, seguro que no somos “tan únicos”.
Una cosa es cierta: No prestamos la debida atención al poder de nuestros pensamientos que, lo mismo están presentes en nuestras vidas cotidianas, en nuestra realidad del día a día que, nos llevan en viajes alucinantes hacia mundos ignotos situados en regiones perdidas del universo, o, también, nos puede situar en un mundo mágico en el cual, llegamos a comprender, sin dificultad alguna y con una claridad de ideas que sólo una alta calidad intelectual podría lograr, esas teorías inalcanzables que no pueden ser verificadas por el hombre por falta de medios y comprensión. La Mente es una herramienta muy poderosa y, de ella, surgen las ideas que nos llevarán hacia el futuro.
emilio silvera
Nov
15
Sí, todo cambia pero…, algunos recuerdos perduran
por Emilio Silvera ~ Clasificado en El Universo y la Mente ~ Comments (1)
La gran Nebulosa de Orión el laboratorio estelar más observado
La lejanía nos impide ver los detalles y no son visibles la inmensa mayoría de los objetos que pululan por el Espacio-Tiempo que, aunque tiene inmensos espacio “vacíos”, puede que en ellos esconda secretos que no hemos sabido desvelar y otros, pueblan las inconmensurables distancia de las galaxias: Nebulosas, cuásares, radiogalaxias, miles de millones de planetas, estrellas de neutrones, y enanas blancas en el centro de bonitas Nebulosas Planetarias… ¡Un sin fin de maravillas! Todo eso perdido en la distancia que podemos acortar mediante sofisticados telescopios.
El Universo no es que sea asombroso, es mucho más de lo que podamos imaginar
El Universo Asombroso
Hasta las creencias cambian. La verdad de hoy será distinta mañana
Es lo que dice una Ley no escrita: A medida que avanzamos y adquirimos nuevos conocimientos, las verdades se vuelven mentiras y, algunas “mentiras” en forma de Teorías se vuelven verdades. Lo que hoy es… ¡Mañana no será!
Así ha sido siempre, es la ley de un Universo cambiante en el que todo evoluciona después de nacer, vivir y morir, en el que la Eternidad no existe y en el que, como decía un hombre sabio: “Lo que duerme eternamente, no está muerto; y con el paso de los eones, hasta la misma muerte tiene que morir”.
Todo cambia pero… ¡Algunos recuerdos perduran!
Hace mucho que se fueron. mis sufridos padres, que nacieron y vivieron en tiempos de penuria, vivieron aquella nefasta guerra civil entre hermanos en la que imperó el hambre y la calamidad, y, a pesar de todo eso, mis recuerdos de la niñez son claros y felices.El viejo marinero pescador salía a la Mar en aquellos destartalados barcos de madera, y, en los temporales se jugaba la vida para que sus hijos tuvieran un poco de Pan. La mujer, callada y sufrida esposa y madre, se pasó la vida trabajando incansable para llevar a sus cuatro hijos adelante.Miro hacia atrás en el Tiempo y veo con admiración aquella denodada lucha por llegar a una meta soñada que, al no tener posibilidades, había que alcanzar luchando el doble que los demás.¿Cómo poder olvidar todo aquello? Sería como olvidar quien soy y de donde vengo, y, por muy dolorosos que algunos puedan ser, son mis recuerdos y los quiero.Las mujeres en las colas de las Cartillas del racionamiento para coger un poco de comida para la familia.Los hombres amontonados esperando que lo escojan para algún trabajo.No pocos tuvieron que emigrar a la lejana Alemania dejando a las mujeres solas con la proleAquella España de Franco que ahora, si las cosas no mejoran, algunos la quieren “mejorar” en lo peor.
No es poder recordar,
sino todo lo contrario,
la condición necesaria para
nuestra existencia en paz.
Si el recuerdo es de la amada que se fue,
tendremos el dolor, y, si podemos olvidar,
retomaremos una vida en paz.
Sin embargo, y, a pesar de todo, yo prefiero el dolor que me trae ese recuerdo feliz que no volverá, de otra manera, ¿Qué vida sería la mía? No sería mi vida sin sus pasajes y vivencias.
¡La Vida! amigos míos, no se nos ha regalado,
la vida la tenemos que pagar …¡De tantas maneras!
Siempre será de la misma manera. A pesar de nuestras similitudes, ninguno de nosotros seremos nunca exactamente igual a otro. Con los mundos pasa otro tanto de lo mismo, serán casi iguales, coincidirán en muchos de sus parámetros, siempre tendrán detalles grandes o pequeños que los diferenciaran a los unos de los otros. Creo que, lo único que podemos decir que son iguales, está situado en el mundo microscópico de las partículas: dos protones son exactos al igual que dos electrones o dos Quarks dowm. Ni las Nebulosas ni las Galaxias son nunca de la misma manera aunque ambas, puedan contener los mismos elementos.
El cambio es un desafío. Vivimos en el período de mayor velocidad del movimiento de la historia humana. El mundo que nos rodea está impulsado por fuerzas que hace nuestras vidas cada vez más sensibles a cambios pequeños y respuestas repentinas. El desarrollo de Internet y los tentáculos de la Red Mundial nos ponen inmediatamente en contacto con ordenadores y con sus propietarios en cualquier parte del mundo. Los riesgos del progreso industrial desenfrenado han provocado daños ecológicos y cambios medioambientales de los que no tenemos idea de qué repercución futura tendrá en el devenir del planeta y, de nosotros mismos. Todo está sucediendo a una velocidad que, a veces, parece que se nos puede escapar de entre los dedos de la mano, sin que nada podamos hacer por frenar… ¡tal desvarío!
Los ecosistemas no permanecen si no se cuidan
Todo parece diferente. Hasta los niños parecen crecer antes y, son más listos a edades más tempranas, ¿dónde quedó aquella candidez de los niños? Ellos ahora, no te hacen preguntas, te corrigen. Los políticos, para ir a la velocidad de los tiempos, cambian de signo y de alineaciones políticas que hoy es una y mañana otra dependiente de sus intereses particulares (nunca de los generales que, en realidad, les importa un bledo). Incluso los seres humanos y la información que llevan incorporada se enfrentan a la intervención editorial que supone la ambiciosa cirugía de sustitución o la reprogramación de parte de nuestro código genético. Muchas formas de progreso se están acelerando y cada vez más fragmentos de nuestra experiencia se han entrelazado con el afán de explorar todo lo que sea posible.
Mientras unos investigaban otros imaginaban
En el mundo de la exploración científica, reconocer el impacto de cambio no es tan nuevo. Hacia finales del s. XIX se había llegado a saber que hubo un tiempo en que la Tierra y nuestro Sistema Solar no existían; que la especie humana debía haber cambiado en apariencia y en el promedio de su capacidad mental a lo largo de enormes períodos de tiempo; y que, en cierto sentido, amplio y general, el Universo debería estar degradándose, haciéndose un lugar menos hospitalario y ordenado. Durante el s. XX hemos revestido de carne la imagen esquelética de un Universo cambiante.
El clima y la topografía de nuestro planeta varían continuamente, como las especies que viven en él. Y lo más espectacular, hemos descubierto que todo el Universo de estrellas y galaxias está en un de cambio dinámico, en el que grandes cúmulos de galaxias se alejan unos de otros hacia un futuro que será diferente del presente.
Estas más que alejarse están condenadas a fusionarse
Otras llevadas por la expansión del Esoacio, serán separadas a sus vecinas lejanas, ni la Gravedad la retendrá
Las galaxias se alejan unas de otras con una tasa constante, también tienen pequeñas velocidades adicionales llamadas “velocidades peculiares” que les permite a las galaxias direccionarse lateralmente a la expansión principal. En los llamados grupos locales, en los que las galaxias están más juntas, la Gravedad les impide expandirse y, al contrario de lo que ocurre en lo general, aquí se produce en contrario, ya que cada vez están más cerca por la fuerza de atracción que tiende a juntarlas. Muchas imágenes hemos visto de galaxias que se juntan y ese, amigos míos, es el destino lejano de Andrómeda y la Vía Láctea.
Hemos empezado a darnos cuenta de que vivimos en un tiempo prestado. Los sucesos astronómicos catastróficos son comunes; los mundos colisionan, legiones de asteroides cercan las inmediaciones de nuestro planeta, así han sido descubiertos por la NASA. Tenemos las huellas del pasado en la superficie de la Tierra, que en el pasado, recibió muchas visitas exteriores en las que no siempre salieron bien paradas las especies que en aquel momento estaban presente. Un día de estos, nuestra suerte cambiará, el escudo que tan fortuitamente nos proporciona el enorme planeta Júpiter, que guarda los confines exteriores del Sistema Solar, no será suficiente para salvarnos.
Inmenso torbellino de energía y de fuerza gravitatoria a la que nasa se puede resistit
Al final, incluso nuestro Sol morirá. Nuestra Vía Láctea, primero se unirá a nuestra vecina mayor, se unirán los dos agujeros gigantes centrales y, finalmente, toda la nueva e inmensa galaxia será engullida por un enorme agujero negro central que, cada día estará creciendo.
Se acercan la una a la otra a considerable velocidad, el viaje durará 3.000 millones de años
Para que todos estos cambios se produzcan tendrán que suceder grandes acontecimientos que contamos alguna vez-
El Sol agotará su combustible nuclear de fusión, se convertirá en Gigante roja que engullirá a Mercurio y Venus quedando muy cerca de la Tierra, las temperaturas subirán y los océanos se evaporarán, la vida, tal como la conocemos… ¡Desaparecerá!
La vida, tal como la conocemos terminará. Los supervivientes tendrán que haber cambiado, llegarán mutaciones, en tal medida que, nos costaría mucho llamar humanidad a las formas de vida futuras, según nuestros criterios actuales. Todo cambia, nada permanece y, nosotros, si queremos seguir viviendo, debemos adaptarnos a lo que vendrá y, como todo, debemos cambias.
¿Y, nuestros recuerdos?
Hemos reconocido los secretos simples del Caos y de la Impredecibilidad que asedian tantas partes del mundo que nos rodea. Entendemos que nuestro clima es cambiante pero no podemos predecir los cambios. Hemos apreciado las similitudes complejidades como ésta y las que emergen de los sistemas de interacción humana -Sociedades, economías, ecosistemas- y, también algo hemos podido aprender del interior de la propia mente humana. Sin embargo, ninguno de esos conocimientos serán válidos para frenar el destino de una Naturaleza que convierte el Caos en creación y a la creación en Caos. Todo muere para que todo siga viviendo pero… ¡El final es inevitable!
Lo cierto es que todo cambia y nada permanece y algunos recuerdos se esfuman en nuestras mentes pero, hay algunos… ¡Imperecederos! Arriba dos familias: Abuela con su hija y su nieta… ¡Todas fueron niñas! El Paso del Tiempo dejó sus huellas y, a cada una la pone en el lugar que le corresponde por el _Tiempo vivido.
Todo cambia y nada permanece, igual que en nuestro planeta las Estaciones, en el Universo se producen transiciones de fase en todo lo que allí está presente, y, las cosas van cambiando, lo que hoy es mañana no será. Sólo permanecen las fuerzas fundamentales que todo lo rigen, las constantes del Universo que nos dicen como funcionan algunas de los parámetros que hacen del Universo el que podemos observar.
Todas estas sorprendes complejidades tratan de convencernos de que el mundo, es como una montaña rusa desbocada, rodando y dando bandazos; que todo lo que una vez se ha tenido por cierto podría ser derrotado algún día. Algunos incluso ven semejante perspectiva como una razón para sospechar de la Ciencia, como si produjera unos efectos corrosivos sobre los fundamentos de la Naturaleza humana y de la certeza, como si la construcción del Universo físico y el vasto esquema de las leyes debiera haberse establecido pensando en nuestra fragilidad psicológica.
Si algo de esto cambiara… ¡Sería otro Universo!
Pero hay un sentido en el que todo cambio e impredecibilidad es una ilusión. No constituye toda la historia sobre la Naturaleza del Universo. Hay tanto un lado conservador como un lado progresista en la estructura profunda de la realidad. A pesar del cambio incesante y la dinámica del mundo visible, existen aspectos de la fábrica del Universo misteriosos en su inquebrantable constancia, Son esas misteriosas cosas invariables que hacen de nuestro universo el que es y se distingue de los otros que pudiéramos imaginar.
Hay un hilo dorado que teje una continuidad a través del tiempo que siempre acompaña a la Naturaleza en su devenir. Todo eso, nos lleva a esperar que ciertas cosas sean iguales en otros lugares del espacio además de la Tierra, necesitamos tener, al menos, alguna esperanza y, esa igualdad, nos trae la tranquilidad de que, también allí, en aquellos remotos lugares de los confines del Cosmos, tenemos hermanos con los que, algún día podremos estar.
Lo que hoy está, mañana será fondo oceánico
Todo encontrado en la cúspide de altas montañas donde, hace miles de años, estaba el océano
Así, las cosas serán las mismas en todas partes y, en todas partes y en otros tiempos, también pudieron pasar las cosas que aquí pasaron; que en algunos casos, ni la historia ni la geografía importan. De hecho, quizá sin un substrato semenjante de realidades invariables no podrían haber corrientes superficiales de cambio ni ninguna complejidad de mente y materia. Parece que todo lo que ha pasado tenía un fin, uno sospecha que la Nada no existe y, todo lo que surgío, lo hizo porque había. Pero… ¿De dónde vino?
A veces, hacemos preguntas que sabemos de antemano que nadie podrá nunca contestar y, sin embargo, las seguiremos haciendo. Tenemos la tendencia de inventar las respuestas para tranquilizarnos, así surgió el Big Bang que, de momento, es la mejor explicación que pudimos encontrar para que coincidiera con la observación. Claro que saber, lo que se dice saber… ¡No sabemos!
Nuestras mentes, lo mismo que toda la materia del Universo, están estrechamente conectadas con la memoria del “mundo” en el que están inmersas y del que irremediablemente forman parte. El que cada una de “ellas”, Mente y Materia, estén en determinados momentos ocupando un diferente nivel, no desvirtúa que, de cualquier manera, siguen siendo la misma cosa: Quarks y Leptones que conforman un todo que deriva, por la evolución natural, en pensamientos.
Alguien dicjho que la única verdad son las ilusiones, y, que la sustancia, es la gran impostora.
¿Y, nuestros recuerdos? Bueno, a pesar de que me puedan causar dolor…¡Yo los quiero! Son parte de mi historia, a la que no quiero renunciar.
emilio silvera
Oct
22
¡El Universo y la Mente!
por Emilio Silvera ~ Clasificado en El Universo y la Mente ~ Comments (8)
¿Dónde estabas tú cuando yo puse los cimientos de la Tierra? Dilo si tienes entendimiento.
Contestar a esa pregunta sólo puede ser la de otra pregunta: ¿Quién sabe realmente? So todo lo que ahora “sabemos” es el fruto (primero) de la especulación (más tarde) de la observación, y, finalmente, del experimento. Cuando no sabemos conjeturamos y hablamos de la existencia de cuerdas vibrantes, o, de “materia oscura” que tratan de justificar lo que no sabemos.
Se ha confeccionado el primer censo de las galaxias más primitivas y distantes. Un equipo de astrónomos dirigido por el Instituto Tecnológico de California (Caltech), en Pasadena, ha utilizado el Telescopio Espacial Hubble de la NASA para descubrir siete de las galaxias más arcaicas y distantes.
La más antigua de estas galaxias descubiertas ha sido observada tal como era cuando el universo tenía sólo 380 millones años de edad. Todas las galaxias recién descubiertas se formaron hace más de 13.000 millones de años, cuando el universo tenía sólo el 4 por ciento de su edad actual.
Sin embargo, lo que nadie sabe explicar es que, en presencia de la expansión de Hubble, cuando la materia corría imparable creando el espacio, las galaxias se pudieran formar. ¿Qué estaba allí presente que generaba la fuerza de Gravedad necesaria para que las galaxias se pudieran formar?
“Ylem o hylem (forma aumentativa de la palabra griega ὑλ [hylé] = materia) es el nombre dado por Aristóteles a la que consideraba sustancia fundamental de la cual procedería todo ente de materia.”
Si hablamos del Universo y de la Mente, habrá que pensar en la Vida
¿La Vida? Lo único que se me ocurre para contestar es decir que la Vida es el nivel más alto de la evolución de la Materia. Entendiendo, eso sí, que ese “nivel más alto” es aquel en el que se ha llegado hasta la consciencia de Ser. Cuando nos hemos percatado de que “somos”, entonces y sólo entonces hemos sido conscientes de que formamos parte del inmenso universo.