Ago
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El verano en mi ciudad
por Emilio Silvera ~ Clasificado en Pequeño reportaje ~ Comments (0)
A unos pocos kilómetros de Huelva, tenemos algunas playas como las de Mazagón, Matalascañas, El Portil, El Rompido, La Antilla, Isla Canela y, cerca, está el Cabo de San Vivente en Portugal que hace el dibujo puntiagudo de la esquina peninsular por el Sur. La Capaital se queda prácticamente vacía los fines de semana y, todo el mundo, se desplaza hacia las playas a disfrutar del Sol, de la fina arena blanca y de los baños en la costa onubense que, son de agua templada y muy agradables.
Punta Umbría, es la playa de los onubenses (la gente de Huelva), y, en ella, desde que empezaron a colonizarla los Ingleses de las Minas de Río Tinto, se fueron ubicando las familias de la Capital y de los pueblos limítrofes hasta hacerla una playa de gran afluencia en verano (1.000.000 de personas) que, cuando pasa la época estival, desaparecen para que vuelva el pequeño pueblo de pescadores que en origen fue Punta Umbría, hoy llena de edificios de apartamentos que desnaturalizan el apacible pasado.
El municipio de Punta Umbría, en la provincia de Huelva, se ubica a solo 20 kilómetros de la ciudad de Huelva y 110 kilómetros de Sevilla.
Lugar exacto de la aparición de los restos del templo de Artemisa. La zona más clara al norte es El Almendral, donde se sitúa la ciudad islámica de Saltish (Isla Saltés). Justo enfrente del círculo, en la orilla izquierda de la ría, donde se aprecia un puerto deportivo se encuentra el yacimiento del Eucaliptal. Un poco mas al norte, en la misma orilla están los restos de La Peguera.
El misterio rodea esta aparición de los restos y se ha iniciado una investigación para datar de forma más precisa los huesos. La zona en la que han aparecido es la periferia del gancho arenoso de la Cascajera, en su unión con la marisma. Este gancho ya existía en época romana y en la zona han aparecido restos cerámicos asociados a explotaciones de salazón romanas, puestas en relación con piletas romanas de la zona del Almendral (junto a los restos islámicos de la ciudad de Saltish) y con el poblado del Eucaliptal en Punta Umbría, justamente en la orilla opuesta a la de los restos encontrados.
Esta localidad dispone de numerosos emplazamientos de gran interés, como por ejemplo el yacimiento romano de El Eucaliptal, situado en las afueras del núcleo urbano de Punta Umbría. Aquí es posible encontrar numerosos restos que dan cuenta de la vida cotidiana de la época, así como de tipo funerario, los cuales corresponden al período comprendido entre los siglos II y IV después de Cristo.
“La Iglesia de Nuestra Señora De Lourdes es el principal templo religioso del lugar, cuya construcción, que estuvo a cargo del arquitecto Pérez Carasa, finalizó en el año 1950.
Siguiendo con el recorrido, es posible visitar la Torre Umbría, una torre de defensa que fue levantada entre los siglos XVI y XVII a petición del Rey Felipe III con el fin de vigilar la costa ante el posible ataque de los piratas. La torre era custodiada por carabineros y estaba rodeaba por un pequeño poblado de pescadores. La Torre Almenara es, sin dudas, el monumento más emblemático de Punta Umbría, preside su escudo y es símbolo del pueblo.
Si de naturaleza se trata, nada mejor que trasladarse hasta los Enebrales de Punta Umbría, un paraje natural que ocupa una extensión de 178 hectáreas. Dispone de un cordón dunar, dominado por enebros y sabinas, lo cual dota de una característica singular al paisaje.
Arriba la Torre y la zona conocida como la Mata Negra y los Enebrales
Al mismo tiempo, merece la pena dar un paseo por La Norieta, un parque periurbano de 94 hectáreas, que se encuentra dentro de la reserva natural de la laguna del Portil. Es un espacio sensacional para la recreación, en donde se reúnen los habitantes de las poblaciones aledañas para disfrutar de la naturaleza.
El espacio salvaje se ve invadido por la “civilización”
La Laguna del Portil, formada por el represamiento de arroyos por acción de las dunas móviles, constituye una reserva natural de enorme belleza. Posee una vegetación palustre, que incluye especies como juncos, espadañas, castañuelas y ranúnculos. Además, cuenta con una rica fauna, conformada sobre todo por aves, ya que esta reserva es usada como lugar de paso en su ruta migratoria, además de ser una zona de invernación de ciertos ejemplares.”
En esta zona, donde vivimos muchos años cuando mis primeros tres hijos eran pequeños: Maria del Carmen, Raquel y Emilin. ¡Emilin! Un torbellino de energía que no podía quedarse quieto ni un momento, lo mismo se pasaba a la otra banda de la ría para coger bocas que, buceando en el Espigon, nos traía a casa una redecilla llena de camarones… ¡Qué personaje tan entrañable!
Arriba la parte de la Ría y debajo una escena de la Playa en Punta Umbría
Como Sevilla está muy cerca y sus habitantes huyen de los más de 40 ºC que en aquella Capital tienen que soportar, los fines de semana, la avalancha de autocares y vehículos particulares de todo tipo, las playas de Huelva son literalmente invadidas, sobre todo, las de Matalascañas que les coge más cercanas.
En Matalascañas tenemos metida a medio Sevilla en verano
Por mi parte, será porque desde pequeño la visitaba con frecuencia con mi padre, pescador de profesión, en aquellos barquitos veleros de mi abuelo Emilio que, por aquellos tiempos, se dedicaban a la pesca de la caballa que vendían en la conservera de Tejero en la Rábida (hoy desaparecida). Mi tendencia es siempre Punta Umbria, la más familiar y conocida de rincones más acogedores y panoramas más luminosos y bellos.
Desde cualquier punto que la queramos mirar, desde las distintas perspectivas que podamos encontrar, siempre nos sorprenderán la belleza natural de una zona privilegiada en la que la Naturaleza se esforzó por dejar todo lo mejor de su variado repertorio de escenarios naturales para que, nosotros los humanos, podamos gozar en paz y tranquilidad.
Como mi casa está situada a escados 15 kilómetros de todos estos lugares, los visitamos con frecuencia y podemos disfrutar de estos parajes naturales en los que, de vez en cuando en la retama del camino, podemos encontrar ¡Camaleones! que en pequeñas colonias protegidas perviven… ¡A pesar de todo!
El Camaleón en la Retama
Cuando los chicos eran pequeños y paseábamos por allí, algunos de ellos cogieron para poder verlos y asombrados miraban aquellos ojos que giraban en círculo de manera imposible. Una vez saciada la curiosidad, los volvían a dejar en sus enebrales para que siguieran su rumbo en paz. Si supiéramos respetar la Naturaleza y a todos los seres que la pueblan… ¡En otro mundo mejor viviríamos.
En esta zona se ubican los pequeños pesqueros del pueblo marinero
Sitios como este abundan en la Playa de Punta Umbría en los que, por módicos precios se puede comer bien y a gusto de todos. El marisco es el plato que más prolifera, ya que, en la zona, la Gamba Blanca de Huelva es la reina de todas las fiestas. Incluso en el verano se dedica un día a “La Fiesta de la Gamba” y, es un panorama digno de ver como llegan de todas partes para degustar el producto de la costa onubense por poco dinero.
Hay buenos hoteles para aquellos que lo pueden pagar
El Apartamento playero está cerrado y lo utiliza mi hijo Isat que vive en Madrid y se viene a descansar unos días, por mi parte, con mi mujer, acostumbro todos los días de lunes a jueves, a dar una vuelta por el Terramar, un lugar agradable junto a la Playa donde tomamos un café, y, mientras ella toma un baño compartido entre el océano y el Sol, yo escribo en una de mis libretas para sacar algún trabajo que poder ofrecer a ustedes.
Bueno que este verano sea para todos un buen recuerdo.
emilio silvera
Ago
28
El Verano en mi Ciudad
por Emilio Silvera ~ Clasificado en Pequeño reportaje, Reportajes de prensa ~ Comments (0)
A unos pocos kilómetros de Huelva, tenemos algunas playas como las de Mazagón, Matalascañas, El Portil, El Rompido, La Antilla, Isla Canela y, cerca, está el Cabo de San Vivente en Portugal que hace el dibujo puntiagudo de la esquina peninsular por el Sur. La Capaital se queda prácticamente vacía los fines de semana y, todo el mundo, se desplaza hacia las playas a disfrutar del Sol, de la fina arena blanca y de los baños en la costa onubense que, son de agua templada y muy agradables.
Punta Umbria, es la playa de los huelvanos, y, en ella, desde que empezaron a colonizarla los Ingleses de las Minas de Rio Tinto, se fueron ubicaron las familias de la Capital y de los pueblos limítrofes hasta hacerla una playa de gran afluencia en verano (1.000.000 de personas) que, cuando pasa la época estival, desaparecen para que vuelva el pequeño pueblo de pescadores que en origen fue Punta Umbría.
Follow @viajardespacio
El municipio de Punta Umbría, en la provincia de Huelva, se ubica a solo 16 kilómetros de la ciudad de Huelva y 110 kilómetros de Sevilla.
www.La Huelva-Cateta.es
Lugar exacto de la aparición de los restos. La zona más clara al norte es El Almendral, donde se sitúa la ciudad islámica de Saltish. Justo enfrente del círculo, en la orilla izquierda de la ría, donde se aprecia un puerto deportivo se encuentra el yacimiento del Eucaliptal. Un poco mas al norte, en la misma orilla están los restos de La Peguera
El misterio rodea esta aparición de los restos y se ha iniciado una investigación para datar de forma más precisa los huesos. La zona en la que han aparecido es la periferia del gancho arenoso de la Cascajera, en su unión con la marisma. Este gancho ya existía en época romana y en la zona han aparecido restos cerámicos asociados a explotaciones de salazón romanas, puestas en relación con piletas romanas de la zona del Almendral (junto a los restos islámicos de la ciudad de Saltish) y con el poblado del Eucaliptal en Punta Umbría, justamente en la orilla opuesta a la de los restos encontrados.
Esta localidad dispone de numerosos emplazamientos de gran interés, como por ejemplo el yacimiento romano de El Eucaliptal, situado en las afueras del núcleo urbano de Punta Umbría. Aquí es posible encontrar numerosos restos que dan cuenta de la vida cotidiana de la época, así como de tipo funerario, los cuales corresponden al período comprendido entre los siglos II y IV después de Cristo.
“La Iglesia de Nuestra Señora De Lourdes es el principal templo religioso del lugar, cuya construcción, que estuvo a cargo del arquitecto Pérez Carasa, finalizó en el año 1950.
Siguiendo con el recorrido, es posible visitar la Torre Umbría, una torre de defensa que fue levantada entre los siglos XVI y XVII a pedido del Rey Felipe III con el fin de vigilar la costa ante el posible ataque de los piratas. La torre era custodiada por carabineros y estaba rodeaba por un pequeño poblado de pescadores. La Torre Almenara es, sin dudas, el monumento más emblemático de Punta Umbría, preside su escudo y es símbolo del pueblo.
Si de naturaleza se trata, nada mejor que trasladarse hasta los Enebrales de Punta Umbría, un paraje natural que ocupa una extensión de 178 hectáreas. Dispone de un cordón dunar, dominado por enebros y sabinas, lo cual dota de una característica singular al paisaje.
Arriba la Torre y la zona conocida como la Mata Negra y los Enebrales
Al mismo tiempo, merece la pena dar un paseo por La Norieta, un parque periurbano de 94 hectáreas, que se encuentra dentro de la reserva natural de la laguna del Portil. Es un espacio sensacional para la recreación, en donde se reúnen los habitantes de las poblaciones aledañas para disfrutar de la naturaleza.
El espacio salvaje se ve invadido por la “civilización”
La Laguna del Portil, formada por el represamiento de arroyos por acción de las dunas móviles, constituye una reserva natural de enorme belleza. Posee una vegetación palustre, que incluye especies como juncos, espadañas, castañuelas y ranúnculos. Además, cuenta con una rica fauna, conformada sobre todo por aves, ya que esta reserva es usada como lugar de paso en su ruta migratoria, además de ser una zona de invernación de ciertos ejemplares.”
En esta zona, donde vivimos muchos años cuando mis primeros tres hijos eran pequeños: Maria del Carmen, Raquel y Emilin. ¡Emilin! Un torbellino de energía que no podía quedarse quieto ni un momento, lo mismo se pasaba a la otra banda de la ría para coger bocas que, buceando en el Espigon, nos traía a casa una redecilla llena de camarones… ¡Qué personaje entrañable!
Arriba la parte de la Ría y debajo una escena de la Playa en Punta Umbría
Como Sevilla está muy cerca y sus habitantes huyen de los más de 40 ºC que en aquella Capital tienen que sopoirtar, los fines de semana, en avalancha de caminonetas y vehículos particulares de todo tipo, las playas de Huelva son literalmente invadidas, sobre todo, las de Matalascañas que les coge más cercanas.
En Matalascañas tenemos metida a medio Sevilla en verano
Por mi parte, será porque desde pequeño la visitaba con frecuencia con mi padre, pescador de profesión, en aquellos barquitos veleros de mi abuelo Emilio que, por aquellos tiempos, se dedicaban a la pesaca de la Caballa que vendían en la consevera de Tejero en la Rábida (hoy desaparecida). Mi tendencia es siempre Punta Umbria, la más familiar y conocida de rincones más acogedores y panoramas más luminosos y bellos.
Desde cualquier punto que la queramos mirar, desde las distintas perspectivas que podamos encontrar, siempre nos sorprenderán la belleza natural de una zona privilegiada en la que la Naturaleza se esforzó por dejar todo lo mejor de su variado repertorio de escenarios naturales para que, nosotros los humanos, podamos gozar en paz y tranquilidad.
Como mi casa está situada a escados 15 kilómetros de todos estos lugares, los visitamos con frecuencia y podemos disfrutar de estos parajes naturales en los que, de vez en cuando en la retama del camino, podemos encontrar ¡Camaleones! que en pequeñas colonias protegidas perviven… ¡A pesar de todo!
El Camaleón en la Retama
Cuando los chicos eran pequeños y paseábamos por allí, algunos de ellos cogieron para poder verlos y asombrados miraban aquellos ojos que giraban en círculo de manera imposible. Una vez saciada la curiosidad, los volvían a dejar en sus enebrales para que siguieran su rumbo en paz. Si supiéramos respetar la Naturaleza y a todos los seres que la pueblan… ¡En otro mundo mejor viviríamos.
En esta zona se ubican los pequeños pesqueros del pueblo marinero
Sitios como este abundan en la Playa de Punta Umbría en los que, por módicos precios se puede comer bien y a gusto de todos. El marisco es el plato que más prolifera, ya que, en la zona, la Gamba Blanca de Huelva es la reina de todas las fiestas. Incluso en el verano se dedica un día a “La Fiesta de la Gamba” y, es un panorama digno de ver como llegan de todas partes para degustar el producto de la costa onubense por poco dinero.
Hay buenos hoteles para aquellos que lo pueden pagar
El Apartamento playero está cerrado y, con mi mujer, acostumbro todos los días de lunes a jueves, a dar una vuelta por el Terramar, un lugar agradable junto a la Playa donde tomamos un cafe, y, mientras ella toma un baño compartido entre el océano y el Sol, yo escribo en una de mis libretas para sacar algún trabajo que poder ofrecer a ustedes.
Bueno que el verano (que se acaba) sea para todos un buen recuerdo.
emilio silvera