Darling (MIT): “Comparar la inteligencia artificial con la humana no tiene sentido”
La investigadora recalca que para integrar a las máquinas en espacios fuera de las fábricas hay que entender que “no están vivas ni pueden sentir. Nosotros sentimos por ellas”.
Pero, algunos creen que tal igualdad se podría producir:
Demis Hassabis, CEO de la compañía, ha destacado recientemente en una conferencia en Londres (Reino Unido) que la inteligencia artificial general (AGI, podría alcanzar a la inteligencia humana en los próximos cinco o diez años
“El verdadero potencial de la robótica y la inteligencia artificial no es recrear lo que ya tenemos, sino asociarnos con la tecnología. No se trata de reemplazar a las personas, sino de complementarlas”.
Si limpian el suelo de la casa o nos mandan datos de Marte…
Estas palabras de Kate Darling, investigadora experta en robótica del MIT Media Lab, condensan sus ideas sobre el modo en el que personas y máquinas deberían interactuar. “Sin embargo, la retórica que se emplea en los últimos años cuando se habla de estas cuestiones puede llevar a engaño”.
Darling ha sido una de las ponentes del congreso Momentum 2021 Connect, celebrado la semana pasada en formato online y organizado por Manhattan Associates, empresa especializada en soluciones para la cadena de suministro y comercio omnicanal. “Deberíamos enfocar el uso de la tecnología en cómo puede ayudar a las personas a hacer mejor su trabajo y no en automatizarlo todo. Desechemos ya la idea de que los robots nos van a quitar el trabajo”, ha remarcado.
Despertando emociones
Algunos quieren darle emociones y sentimientos
Esta investigadora ha desarrollado sus trabajos estableciendo paralelismos entre los robots y los animales, y la relación que los humanos mantienen con ellos. “Las personas tenemos tendencia inherente a ‘antropomorfizarnos’: proyectamos rasgos, cualidades, emociones y comportamientos humanos en los no humanos”. Lo hacemos con nuestras mascotas, pero también con objetos con los que establecemos lazos emocionales.
Entre las razones, explica, está que cuando somos bebés aprendemos muy pronto a reconocer un rostro, de ahí esa tendencia a proyectar un reflejo de nosotros mismos en los demás. “Lo hacemos desde la niñez para relacionarnos y dar sentido al mundo que nos rodea”. Por cuestiones evolutivas, nuestro cerebro también reacciona ante los movimientos. “En el pasado, la especie humana ha tenido que estar atenta a lo que ocurría a su alrededor para evitar a los depredadores”.
Las personas tenemos tendencia a proyectar rasgos, cualidades, emociones y comportamientos humanos en los no humanos. La imagen de arriba nos señala una realidad que nunca podrían tener los Robots de última generación que, al fin y al cabo son artificiales.
Esto explica, según Darling, por qué sentimos cierta empatía hacia robots tan simples como un aspirador Roomba. “No se trata de la máquina más sofisticada del mundo, simplemente se desplaza por el suelo limpiándolo. Aun así, el 80 % tiene nombre propio y, según cuentan desde iRobot [la empresa fabricante], cuando tienen una avería la mayoría de la gente prefiere que lo reparen a reemplazarlo por otro”.
Sobre ese vínculo que establecemos con las máquinas, la investigadora del MIT Media Lab hace referencia a varios ejemplos y estudios que ponen en evidencia cómo empatizamos con aquellos robots que, sobre todo, están inspirados en la naturaleza. “Los primeros desarrollos de Boston Dynamics llamaron tanto la atención que organizaciones que defienden los derechos animales en Estados Unidos recibieron llamadas de ciudadanos expresando su preocupación sobre lo que estaba ocurriendo. Tuvieron que emitir un comunicando explicando que lo que aparecía en la imagen no era un perro de verdad”.
El 80 % de los aspiradores Roomba tienen nombre propio. Cuando tienen una avería, sus propietarios prefieres arreglarlos a reemplazarlos por otro.
Kate Darling admite que, incluso ella, ha experimentado esas sensaciones. En 2007 compró un Pleo, un dinosaurio robot de juguete, “porque tiene motores, sensores táctiles y una cámara de infrarrojos. Pensé que era realmente interesante porque reproducía muy bien determinados comportamientos”.
Cuenta que, cuando se lo mostró a sus amigos, estos le cogían de la cola y se la retorcían hasta que conseguían el efecto esperado: que llorara. “Aun sabiendo que se trataba de un robot, me entraba cierta angustia y se lo quitaba de las manos”.
Inteligencias complementarias
Una máquina al cuidado de mayores o de niños me produce escalofríos
A raíz de esta experiencia, la investigadora se interesó por el campo de la robótica social. Aquí los robots sí están diseñados específicamente para imitar señales, movimientos o sonidos que, automática y subconscientemente, asociamos con seres vivos, estados mentales y criaturas sociales.
“Estamos en un momento muy interesante. Durante décadas hemos tenido robots en fábricas y almacenes, y ahora están llegando a otros espacios”, afirma Darling. “Pueden pensar y tomar decisiones autónomas y aprender, pero no están vivas y no pueden sentir. Nosotros sentimos por ellos”. Recalca que es importante tener esto en cuenta para poder integrar la tecnología en nuestra vida.
Estamos en un momento muy interesante. Durante décadas hemos tenido robots en fábricas y almacenes, y ahora están llegando a otros espacios.
Entender que un robot es un dispositivo al que hay que tratar de forma diferente a una persona permitirá desarrollar interesantes casos de uso. “Ya los estamos en campos como la salud con nuevos métodos de terapia. Por ejemplo, con robots trabajando con niños autistas y tratando de tender un puente entre un terapeuta o un padre y un niño. El robot es un facilitador realmente bueno para la comunicación”.
El error está, según la investigadora del MIT Media Lab, en comparar la inteligencia artificial con la humana. “Es una analogía no tiene sentido para mí. Es verdad que ya hay máquinas que son mucho más inteligentes que nosotros, que pueden hacer cálculos infinitos, ganarnos al ajedrez e identificar patrones que no reconoceríamos. Sin embargo, no son capaces de percibir el mundo ni aprender del modo en el que lo hace un humano. Es un tipo de inteligencia diferente”. Por eso, defiende, han de verse como un complemento y no como un reemplazo.
Como se trata de una Ciencia que estudia la naturaleza Física del Universo y de los objetos contenidos en él, fundamentalmente estrellas, galaxias y la composición del espacio entre ellas, así como las consecuencias de las interacciones y transformaciones que en el Cosmos se producen, aquí dejamos una breve secuencia de hechos que, suceden sin cesar en el ámbito del Universo y, gracias a los cuales, existe la Tierra…y, nosotros.
La evolución cósmica de los elementos nos lleva a la formación de los núcleos atómicos simples en el big bang y a una posterios fusión de estos núcleos ligeros para formar otros más pesados y complejos en en el interior de las estrellas, para finalizar el ciclo en las explosiones supernovas donde se plasman aquellos elementos finales de la Tabla Periódica, los más complejos y pesados.
Hay procesos en el Universo que, si pudiera ser posible contemplarlos en directo, serían dignos del mayor asombro. Por ejemplo, a mí me maravilló comprender como se podía formar Carbono en las estrella y, de cómo éstas se valían del llamado “Efecto Triple Alfa” para conseguirlo.
La fusión en el centro de las estrella se logra cuando la densidad y temperatura son suficientemente altas. Existen varios ciclos de fusión que ocurren en diferentes fases de la vida de una estrella. Estos diferentes ciclos forman los diferentes elementos que conocemos. El primer ciclo de fusión es la fusión del Hidrógeno hacia Helio. Esta es la fase en la que se encuentra nuestro Sol.
En las estrellas con temperaturas muy altas ocurren otros ciclos de fusiones (ciclos CNO ). A temperaturas aún más altas , el helio que se quema produce Carbono. Finalmente, a temperaturas extremadamente altas se forman los elementos más pesados como el Hierro.
Cadena Protón-Protón
Las reacciones internas que ocurren en las estrellas forman a los neutrinos que llegan a la Tierra. Al detectar estos neutrinos, los científicos pueden aprender sobre las fusiones internas en las estrellas. En el proceso de fusión nuclear denominado reacción Protón-Protón las partículas intervinientes son el protón (carga positiva), el neutrón (carga neutra), el positrón (carga positiva, antipartícula del electrón) y el neutrino.
En las explosiones supernovas que viene a ser el aspecto más brillante de estos sucesos de transformación de la materia, literalmente, es que la explosión de la estrella genera suficiente energía para sintetizar una enorme variedad de átomos más pesados que el hierro que es el límite donde se paran en la producción de elementos estrellas medianas como nuestro Sol.
Pero, en las estrellas masivas y supermasivas gigantes, con decenas de masas solares, cuando el núcleo de hierro se contrae emite un solo sonido estruendoso, y este retumbar final del gong envía una onda sonara hacia arriba a través del gas que entran, el resultado es el choque más violento del Universo.
La imagen es un zoom del centro de la galaxia M82, una de las más cercanas galaxias con estrellas explosivas a una distancia de sólo 12 millones de años luz. La imagen de la izquierda, tomada con el Telescopio Espacial Hubble (HST), muestra el cuerpo de la galaxia en azul y el gas hidrógeno expulsado por las estrellas explosivas del centro en rojo.
Más arriba decíamos que aquí está el choque más violento del Universo. En un momento se forjan en la ardiente región de colisión toneladas de oro, plata, mercurio, hierro y plomo, yodo, estaño y cobre. La detonación arroja las capas exteriores de la estrella al espacio interestelar, y la nube, con su valioso cargamento, se expande, deambula durante largo tiempo y se mezcla con las nubes interestelares circundantes.
El más conocido remanente estelar, la Nebulosa del Cangrejo cuyos filamentos nos hablan de complejos materiales que la explosión primaria formó hace ya mucho tiempo, y, que actualmente, sirve de estudio para saber sobre los procesos estelares en este tipo de sucesos.
El pulsar de la nebulosa del cangrejo, en rojo del Hubble
Antes dejámos una relación de materiales que pueden ser formados en las explosiones supernovas y, cuando se condensan estrellas nuevas a partir de esas nubes, sus planetas heredan los elementos forjados en estrellas anteriores y durante la explosión. La Tierra fue uno de esos planetas y éstos son los antepasados de los escudos de bronce y las espadas de acero con los que los hombres han luchado, y el oro y la plata por los que lucharon, y los clavos de hierro que los hombres del Capitan Cook negociaban por el afecto de las tahitianas.
La muerte de una estrella supergigante, regenera el espacio interestelar de materiales complejos que, más tarde, forjan estrellas nuevas y mundos ricos en toda clase de elementos que, si tienen suerte de caer en la zona habitable, proporcionará a los seres que allí puedan surgir, los materiales y elementos necesarios para el desarrollo de sus ideas mediante la construcción de máquinas y tecnologías que, de otra manera, no sería posible. Incluso, sin estos materiales, ni esos seres podrían surgir a la vida.
¿No os parece una maravilla? Comenzando con el Hidrógeno, Helio Berilio y Litio en el Big Bang, se continuó con el Carbono, Nitrógeno y Oxígeno en las estrellas de la secuencia principal, y, como más arriba explicaba, se continúa en las estrellas moribundas con el Sodio, Magnesio, Aluminio, Silicio, Azufre, Cloro, Argón, Potasio, Titanio, Hierro, Cobalto, Níquel, Cobre, Cinc…Uranio.
¡Que maravilla!
El Hubble ha captado en los cielos profundos las más extrañas y variadas imágenes de objetos que en el Cosmos puedan estar presentes, sin embargo, pocas tan bellas como las de nuestro planeta Tierra que, es tan rico y especial, gracias a esos procesos que antes hemos contado que ocurren en las estrellas, en las explosiones de supernovas y mediante la creación de esos materiales complejos entre los que se encuentran la química biológica para la vida.
Si a partir de las Nebulosas que se forman cuando las estrellas masivas llegan al final de sus vidas, pueden surgir planetas como la Tierra, y, si la Tierra contiene la riqueza de todos esos materiales forjados en las estrellas y en el corazón de esas inmensas explosiones, y, si el Universo está plagado de galaxias en las que, de manera periódica suceden esas explosiones, nos podríamos preguntar: ¿Cuántas “Tierras” podrán existir incluso en nuestra propia Galaxia? Y, ¿Cuántos seres pueden haberse formado a partir de esos materiales complejos forjados en las estrellas?
¡Qué gran secreto tiene el Universo! ¿Cómo se las arregla para crear las precisas condiciones que dan lugar al surgir de la Vida? A veces me pregunto:
Científicos consiguen congelar la luz y hacerla sólida. Así fue publicado en distintos medios medios.
“Investigadores de Princeton han logrado ‘congelar’ las partículas fundamentales de la luz, los fotones, de forma que se comporten como si fuesen un sólido. Los fotones, las partículas de las que está hecha la luz, no se comportan como muchas otras partículas porque no tienen masa.”
Los fotones, las partículas de las que está hecha la luz, no se comportan como muchas otras partículas porque no tienen masa. Esto hace que no interaccionen entre ellas y por tanto no se unan unas a otras para formar elementos mayores y más complejos, como sí hacen otras partículas fundamentales.
Investigadores logran transformar la luz en material que es líquido y sólido a la vez.
Sin embargo, en los últimos años varios equipos científicos de todo el mundo han logrado jugar con esta característica y, de alguna forma, burlarla, deteniendo la luz y congelándola, convirtiéndola en un sólido. Se trata de un fenómeno que nos recuerda a las películas de ciencia ficción (piensen en los sables láser de La guerra de las galaxias), pero en cuyo conocimiento los investigadores avanzan cada día más. Los últimos, un equipo de la Universidad de Princeton que ha logrado convertir la luz en cristal, según sus conclusiones.
Nos interesa explorar, y eventualmente controlar y dirigir, los flujos de energía a nivel atómico. Lo han conseguido interconectando fotones, las partículas elementales de la luz, de forma que se quedasen fijos en un lugar como si estuviesen congelados. Los resultados de sus experimentos podrían servir para desarrollar nuevos y exóticos metamateriales, además de ayudar a avanzar en el conocimiento sobre el estudio fundamental de la materia.
“Es algo que nadie había visto antes, un nuevo comportamiento de la luz”, explica Andrew Houck, profesor asociado de ingeniería eléctrica y uno de los investigadores. “Nos interesa explorar, y eventualmente controlar y dirigir, los flujos de energía a nivel atómico”, dijo Hakan Türeci, uno de los miembros del equipo.
Para lograrlo, construyeron una estructura hecha de materiales superconductores con más de cien mil millones de átomos ensamblados para funcionar como uno solo y la situaron junto a un cable superconductor por el que transitaban fotones. Esos fotones, debido a mecanismos propios de la física cuántica, adoptaron algunas de las propiedades del átomo, como por ejemplo las interacciones entre ellos, algo que normalmente no ocurre con los fotones. Así, el equipo logró que fluyesen como si fuesen parte de un líquido o que se congelasen como si fuesen un cristal sólido.
Ya vimos las espadas de luz sólida en aquellas películas de Ciencia-Ficción
Los científicos han estudiado el comportamiento de la luz durante años, que a veces corresponde al de una onda y otras al de una partícula. Con este experimento, han podido inventarle uno nuevo. “Hemos provocado una situación en la que la luz se comporta efectivamente como una partícula, en el sentido de que dos fotones pueden interaccionar con fuerza. En un momento oscila de delante hacia atrás como si fuera un líquido, y en otro directamente se congela”, explica Türeci.
Los ordenadores actuales no ‘entienden’ la física cuántica.
Se esta la búsqueda del Ordenador Cuántico
“Sí, la afirmación es correcta. Los ordenadores actuales, basados en la computación clásica, no “entienden” la física cuántica en el sentido de que no pueden realizar cálculos que aprovechen las propiedades cuánticas como la superposición y el entrelazamiento. La física cuántica describe el comportamiento de la materia y la energía a nivel atómico y subatómico, y requiere mecanismos de procesamiento diferentes a los de los ordenadores clásicos. “
Esta investigación es parte del esfuerzo que científicos de todo el mundo están poniendo para intentar responder algunas preguntas fundamentales del comportamiento de las partículas subatómicas, cuestiones que no es posible contestar ni siquiera utilizando los ordenadores más potentes de los que disponemos hoy en día.
Es como resolver preguntas sobre aerodinámica observando un modelo de aeroplano en un túnel de viento, es decir, a través de una simulación física en vez de con cálculos digitales. Los equipos de computación con los que trabajan los científicos no sirven porque funcionan siguiendo la mecánica tradicional, que describe cómo es el mundo de los objetos cotidianos en una escala muy amplia, desde los planetas hasta los átomos y moléculas. Pero el mundo de los fotones y otras partículas de tamaño inferior al átomo funciona siguiendo las reglas de la mecánica cuántica, que incluye propiedades en apariencia imposibles e incomprensibles, como por ejemplo que varias partículas estén relacionadas en cuanto a su comportamiento a pesar de estar distanciadas por cientos de kilómetros.
Hoy herramienta insustituible, mañana inservible
Los chips de los ordenadores cuánticos son la clave para la computación cuç´sntica, utilizando qubits (o bits cuánticos) en lugar de los bits tradicionales para procesar información. Estos qubits pueden estar en múltiples estados simultáneamente, una propiedad conocida como superposición, lo que permite a los ordenadores cuánticos realizar cálculos complejos que son imposibles para los ordenadores clásicos. Los chips cuánticos, como el Majorana 1 de Microsoft, el Willow, Google y otros.
Esa diferencia en cuanto a sus características limita la capacidad de los ordenadores de trabajar con estos componentes subatómicos. Simplemente, no puede calcular qué harán ante unos u otros estímulos. De forma que la comunidad científica lleva tiempo intentando crear un nuevo tipo de ordenador basado en las normas de la física cuántica, con el convencimiento de que así podrán responder a muchas de las preguntas que les intrigan de esta rama del conocimiento. Para crear esa nueva computadora, sin embargo, hace falta tiempo y profundizar en la investigación de estos fenómenos, creándose así un círculo que retrasa las respuestas.
Resolverán en unos segundos lo que ahora se tardaría meses en descifrar, y, no dará una, sino varias soluciones al problema planteado.
Otra corriente dentro del estudio de la física cuántica, dentro de la que se enmarca el trabajo de los científicos de Princeton, apuesta por dejar de lado los ordenadores y desarrollar nuevas herramientas que imiten el comportamiento de las subpartículas. El inconveniente es que estas herramientas tendrán una utilidad más limitada que la de un ordenador cuántico, pero la ventaja está en que en teoría podrán crearse sin necesidad de responder previamente a cuestiones más complejas y avanzadas.
“Es como resolver preguntas sobre aerodinámica observando un modelo de aeroplano en un túnel de viento, es decir, a través de una simulación física en vez de con cálculos digitales”, explica una entrada en el blog Scienceblog.
En este caso, la herramienta desarrollada es muy pequeña y sus posibilidades son limitadas, pero los investigadores confían en poder ampliarla, así como aumentar el número de interacciones entre fotones, aumentando su capacidad de simular situaciones complejas. En el futuro esperan poder observar la luz en estados aún más extraños, como por ejemplo un superfluido o un aislante.”
Cuando sepamos lo que es la luz… ¡Sabremos lo que es el Universo… y, también nosotros! Porque, al fin y al cabo, ¿No somos luz? Gracias a la luz podemos contemplar el Universo a través de los telescopios que la captan y y la convierten en imágenes que nos deleitan y fascina sin llegar a comprender (del todo) el milagro.
Hace ahora una década que fue nombrado el Año de la Luz
Sí, no todo lo que podemos oír en divulgadores de la Ciencia… ¡Se ajusta a la realidad! Buena parte es un adorno imaginativo de lo que podría ser. Hablan de contactos (¿imposibles?), y, por el momento, es dudoso que se puedan producir. Aseguran la existencia de “mat4eria oscura” que aún o se ha confirmado… Y seguimos adelante entre verdades e imaginaciones que nos inducen hacía un Futuro incierto que nunca podremos alcanzar, estamos confinados en un eterno Presente.
Lo curioso del caso es que, para los que llegarán a ese Futuro (nuestro, que nunca conoceremos), nuestros descendientes, tampoco será Futuro, será como lo fue para nosotros…¡Presente!
Así que, en lo que al Tiempo se refiere (creo que es lo más importante del Universo junto con la vida). desde siempre hemos tenido una gran confusión, y, hasta nos hemos preguntado: ¿Pasado, Presente y Futuro, no será solo una ilusión llamada Tiempo?
Más tarde hemos reflexionado y comprendido que el paso del tiempo lo cambia todo, que no es una ilusión, que su inexorable transcurrir produce el cambio en todo y en todos, comenzamos siendo una cosa y finalizamos nuestra presencia en el Universo siendo otra muy distinta.
El Gas y el Polvo de las Nebulosas se comprimen en inmensos grumos y nacen estrellas que, durante miles de millones de años, fusionan materiales sencillos en otros más complejos para que surja la Vida.
Así las cosas, en nuestras mentes se agolpan inmensos revoltijos de ideas que relacionan unas cuestiones con otras, y, como decía el sabio: “Todas las cosas Son”, elevando las “cosas” a la categoría de SER. Y, todo eso nos lleva a ser conscientes de que en nuestro Universo todo tiene un Principio y un Final, la Eternidad, como la Nada… ¡No existen!
“Y, con el paso de los Eones… ¡Hasta la muerte morirá.”
Las ideas te llevan por caminos en los que ni podrías penar cuando comenzaste a plasmarlos con unas líneas que tratan de expresar cuestiones que, finalmente son totalmente distintas a las que tenias en Mente cuando comenzaste.
La pócima milagrosa que te da una energía asombrosa
¿Se ha colado la Pseudociencia en la Ciencia? ¿Cómo hablamos de algo que no hemos podido encontrar, como si de una realidad se tratara? ¿Se ha colado la “materia oscura” en la Ciencia por la pueta de atrás?
Hay que recordar que, un buen día…
“La materia oscura fue propuesta por Fritz Zwicky en 1933, ante la evidencia de una «masa no visible» que influiría en las velocidades orbitales de los cúmulos en las galaxias. Posteriormente, otras observaciones han indicado la posible presencia de materia oscura en el universo, las cuales incluyen la citada velocidad de rotación de las galaxias, así como los lentes gravitacionales de los objetos por los cúmulos de galaxias, tales como el Cúmulo Bala (1E 0657-56); igualmente, la distribución de la temperatura del gas caliente en galaxias, cúmulos de galaxias y nebulosas. Otra posible hipótesis alternativa, propuesta por los físicos Stephen Hawking y Bernard Carr en 1974, es la existencia de agujeros negros primordiales después del Big Bang que representan toda la materia oscura en el universo.”
Palos de ciego… ¡Querer tapar la ignorancia!
“A lo largo de la historia de la humanidad han existido diferentes explicaciones de la realidad que han sido lejanas o cercanas a los ideales racionales de la ciencia. En tal sentido, parte del conocimiento previo del que parte toda investigación es conocimiento ordinario, es decir, conocimiento no especializado, y parte de éste es conocimiento científico, o sea, se ha obtenido a través del método de la ciencia, por lo que puede someterse a prueba, enriquecerse y, llegado el caso, superarse mediante el mismo método (Bunge, 2017). De esta suerte, se ha considerado que el conocimiento científico es una forma superior de saber respecto a otras, gracias a su carácter racional, metódico, sistemático y universal.”
Entendemos como pseudociencia cualquier conjunto de conocimientos, métodos, creencias o practicas que, alegando ser científicas, en realidad no se rigen por el método científico y usualmente se encuentran en conflicto con el consenso tradicional de la Ciencia. La mayoría de las “teorías” pseudo-científicas no están basadas en absoluto en el experimento; en su lugar, el lector es aleccionado con algunos conceptos descritos en forma supuestamente científica, usando términos aparentemente científicos, pero en realidad divorciados de la realidad y de los hechos experimentales.
Usualmente la física ocupa un lugar importante en estos alegatos. Es posible separar la ciencia de la pseudociencia porque esta última utiliza libremente la terminología científica, pero de ninguna manera posee el espíritu de la primera.
¿Por qué la pseudociencia debe ser denunciada y rechazada?
Se podría mencionar la falta de ética, engaño y la perdida inútil de tiempo y esfuerzo. Pero quizás la razón mas importante sea la siguiente: En el caso de los pseudo-diagnósticos y pseudo-terapias, ¿Qué que sucede si el paciente empeora a causa del falso diagnostico o del tratamiento incorrecto? ¿Dónde están los ensayos clínicos previos? ¿Y las contraindicaciones y efectos secundarios? Aun mas, aunque el tratamiento en si no sea dañino, podría suceder que la condición del paciente empeore, sencillamente por no recibir el tratamiento adecuado, ya que su atención ha sido distraída por el falso diagnostico o terapia.
La leyenda del curandero
¿Quién protege al paciente? ¿Tenemos leyes que regulen los procedimientos pseudo-científicos? ¿Tienen estos pacientes derechos a pedir una indemnización por daños y perjuicios? ¿De quien es la responsabilidad?
Cuando el término “cuántico” se pervierte para vender productos sin fundamento científico.
Me pregunto si a estas alturas existen personas que se crean estos… Y, también me pregunto por qué no existe una Ley que prohíba tales estafas.
Salvando las distancias… Las similitudes las tenemos delante de nuestras propias narices. Utilizar palabras misteriosas, generalmente de la jerga cuántica y, a vender el producto a un precio desorbitado que, los oyentes no saben ni lo que significan los hipotéticos beneficios que aquí les anunciamos.
Si lo que decimos antes es cierto (que lo es), resulta que eso es lo que podemos encontrar si visitamos algunos de los numerosos sitios pseudo-científicos que hay en la WEB. En estos sitios se promueven procedimientos “científicos” que en realidad no lo son, supuestamente capaces de resolver un sin fin de problemas y padecimientos.
Sus principales características son: el empleo de afirmaciones vagas, exageradas o indemostrables, la auto-confidencia en vez del criticismo y la ausencia de algún progreso en el desarrollo de la teoría. Estas prácticas abarcan desde la arcaica Astrología hasta las más recientes homeopatía, magnetoterapia y cromoterapia entre otras.
A veces se intenta dar explicación a las fantasías pseudo-científicas introduciendo alguna “energía” inexistente, tal como la energía piramidal. Energías similares también aparecen en la radiestesia y en la bioenergética. ¡Que locura! Sabéis que una “terapia” de bioenergética es una especie de “sanador” universal, capaz de curar muchas enfermedades del cuerpo y la mente.
Podríamos analizar brevemente esta ultima “terapia”, como una forma de ilustrar los modos de pseudociencia pero, estamos en un debate y todos tenemos que opinar y, el espacio es grande (tanto como queramos) para poder hablar de este tema que, en realidad, es una lacra de la humanidad, prolifera por todas partes y, sobre todo, es un abuso dirigido hacia las clases menos favorecidas que, por su poca preparación, son los clientes idóneos para este tipo de engaños a cuyo frente casi siempre aparecen personas sin conciencia que, al ponerse una bata blanca ya adquirieron el “titulo” necesario para hablar de lo que no entienden y prometer aquello para lo que no están preparados.
Cosas como estas las podemos ver por cualquier sitio.
“En el interior de nuestras duchas circulares o en caracol se puede beneficiar del vertido revitalizante y agradablemente refrescante del agua aromatizada y enriquecida con efectos cromoterápicos. Lluvia, niebla, aromas, colores y sonidos Un pequeño espacio como el de una ducha se convierte un gran contenedor de emociones. Para aumentar la sensación de bienestar añadimos a nuestras realizaciones un programa terapéutico de luz caliente o fría que se combina con la temperatura del agua y la esencia elegida para el aromatizante. La estructura portante puede embellecerse con los chorros laterales, y con el cubo para la ducha escocesa, recreando un efecto igual a una fría cascada de montaña.”
No siempre son los charlatanes los que nos hablan de cuestiones que, siendo para ellos desconocidas, las mencionan con una seguridad que casi ellos mismos llegan a creerlas. No hace mucho se puedo leer en (EUROPA PRESS):
“El reconocido físico Stephen Hawking ha asegurado en un nuevo estudio que “no hay agujeros negros”, al menos tal y como se han conocido hasta ahora. En un trabajo publicado en Arxiv.org, el científico pone en duda las teorías sobre la noción del llamado horizonte de sucesos, la frontera invisible a partir de la cuál nada puede escapar de un agujero negro, ni siquiera la luz.
La nueva propuesta de Hawking es que no existe este horizonte de sucesos, sino un horizonte ‘aparente’ que mantiene temporalmente prisioneras la materia y la energía antes de liberarlas de nuevo, aunque de una forma caótica.”
La NASA espera que la masa de gas G2 sea devorada por el agujero negro Sagitario A.
“La afirmación de que la NASA espera que la masa de gas G2 sea devorada por el agujero negro Sagitario A* es una simplificación de la realidad. G2, una nube de gas que se aproximó a Sagitario A*, el agujero negro supermasivo en el centro de la Vía Láctea, pasó relativamente cerca sin ser devorada. Los científicos han estudiado este evento y han documentado el comportamiento de G2 durante su acercamiento, pero no predijeron o esperaron que G2 fuera devorada.”
No quiero decir que Stephen Hawking pueda estar equivocado en su nueva visión de los Agujeros Negros pero, si hay que decir que no debió afirmar nada y, lo mejor que podría hacer, como buen científico, es exponer su nueva visión de los agujeros negros comenzando con: “Me parece que el Horizonte de sucesos de los agujeros negros…” No dar nada por sentado, toda vez que él, no ha estado allí para comprobar lo que afirma, y, además, ese supuesto suyo debe ser confirmado por muchas otras observaciones antes de darle la “bendición”. Algunas veces, no saben lo que hacer para vender nuevos libros que les llenen de dinero los bolsillos y, eso, no es ciencia.
¿Cuerdas vibrantes? ¿Dónde? ¿Perdidas en las 11 dimensiones?
¿Gravedad cuántica? ¿Una teoría o una idea alocada?
Así podríamos seguir mencionando “creencias” de la Ciencia que aún no han sido demostradas pero, a base de repetirlas… Nos las creemos. Y, nos podríamos preguntar.. ¿Es eso Ciencia o Pseudociencia?
En fin, se podría estar hablando aquí de muchas más cuestiones y, sobre todo, llenar muchas páginas sobre la realidad presente de que, no pocos, utilizan la mecánica cuántica como la fuente de todos los males o el lugar donde podemos hallar todas las respuestas, y, lo cierto es que, la mecánica cantidad, es una teoría a medio camino, que tiene muchas cosas que explicar y que, las que ya ha explicado, en algunos casos, necesitan una demostración Irrefutable que, aún no se ha producido aunque de tanto hablar de ella… ¡la dimos por buena!