Ago
13
¿A qué velocidad viaja el Tiempo?
por Emilio Silvera ~ Clasificado en General ~ Comments (25)
¿A qué velocidad viaja el tiempo?
Hoy día, cuando la ciencia ha adelantado que es una barbaridad, sabemos a qué velocidad viajan casi todas las cosas, desde el coche más veloz del mundo, al tren que casi vuela, el sonido? e incluso la luz, o la tierra alrededor se sí misma o del sol. Pero, el tiempo, ¿a qué velocidad viaja el tiempo?
“Parece ser que la luz, que va a mucha velocidad, tanta que se nos escapa a nuestra imaginación, mantiene esa velocidad a través de los tiempos, es decir que siempre viaja y ha viajado a la misma velocidad, lo mismo le pasa a la Tierra y al resto de los astros, satélites, cometas y artíficos varios que navegan por el Universo. Al menos eso creo, ya vendrá algún erudito que diga que todo eso es relativo y argumentará con no sé cuántos teoremas, fórmulas o principios científicos, que de eso nada, que aquí, cada cual circula a la velocidad que le parece, teniendo en cuenta sus circunstancias y atendiendo a los parámetros a los que nos acojamos. Dejando aparcadas esas y otras muchas cuestiones que a mí se me escapan, el tiempo, que es de lo que intento hablar, me parece, que no viaja siempre a la misma velocidad, si es que viaja, porque, esa es otra, a lo mejor el tiempo ni siquiera viaja. Tal vez lo que pase es que sean las cosas, todas las cosas, las que se mueven, pero no así el tiempo y estamos anclados en el primer instante desde el nacimiento del Universo.”
https://www.youtube.com/watch?v=JLPRjwcozxs
¿Quién no ha oído, alguna vez, hablare de la paradoja de los gemelos?
Nos dice que el viajero espacial cuya nave viaja a velocidades cercanas a las de la luz, c, estará en un Tiempo que se ha ralentizado. Es decir, el Tiempo se mueve más lentamente que en la Tierra.
Y cuanto más fuerte es la gravedad, mayor es su capacidad de curvar el espacio y el tiempo. Cuanto más se curva el espacio-tiempo, más lento fluye el tiempo. Sin embargo, en cuanto escapamos de la gravedad terrestre, donde hay una gravedad más débil, el tiempo correrá más rápido.
Si sabemos a qué velocidad viaja la luz, y, también a la que se mueve la Tierra en su rotación sobre sí misma y alrededor del Sol. En fin sabemos a qué velocidad se mueven las máquinas de las que nos valemos para desplazarnos de un sitio a otro, pero no sabemos a qué velocidad se mueve el Tiempo.
Nuestra imaginación nos ha llevado a “soñar” que, algún día, podremos viajar a la velocidad de la luz. Y, no tenemos en cuanta que los objetos de materia, si se mueven a velocidades cercanas a c… ¡Aumentan su masa.
Ese fenómeno se ha podido comprobar en el LHC. Enviaron un haz de muones que se movía a velocidades relativistas, y, su masa… ¡Aumentó diez veces! Claro que, no quedamos conforme con el actual LHC, y, estamos diseñando uno más potente.
Lo cierto es que, que ignoramos más cosas de las que podemos saber, las preguntas siguen ganando a las respuestas, y, nosotros, cuando no sabemos nos hemos inventado las posibles respuestas:
“En astrofísica y cosmología física, se le denomina materia oscura a un tipo de materia que se estima corresponde aproximadamente al 85% de la materia del universo, y que no es energía oscura, materia bariónica (materia ordinaria) ni neutrinos.”
En el Universo todo se mueve, nada es estático sino que es dinámico y evoluciona
¿Por qué las galaxias se mueven a mayor velocidad de la que deberían en función de la masa que vemos?
¿Por que existe la “materia oscura” que es invisible, no genera radiación, sin embargo, produce Gravedad, y, como está presente por todo el Universo, hace que la gravedad que genera atraiga a las galaxias que corren a gran velocidad.
Como podéis ver por el párrafo anterior, al no saber responder a la pregunta, nos la inventamos. Nadie sabe absolutamente nada de la hipotética “materia oscura”. Sin embargo, hablan de ella como si la pudieran ver y medir, pesar, o, incluso decir el porcentaje que supone en relación a la materia de verdad, es decir, la bariónica de la que están hechas las estrellas, y todos los objetos cosmológicos, nosotros también estamos hechos de Quarks y Leptones.
El concepto cotidiano de velocidad surge cuando apreciamos la rapidez o lentitud con que se mueve un cuerpo. De alguna manera relacionamos el desplazamiento realizado con el tiempo invertido en él. Pero, si hablamos de la posible velocidad a la que se desplaza el Tiempo que es invisible y la materia está ausente… ¿Cómo podremos saber a qué velocidad se mueve?
Las magnitudes vectoriales son aquellas que quedan caracterizadas por una cantidad (intensidad o módulo), una dirección y un sentido. En un espacio euclidiano, de no más de tres dimensiones, un vector se representa mediante un segmento orientado.
La velocidad magnitud vectorial y, como tal, se representa mediante flechas que indican la dirección y sentido del movimiento que sigue un cuerpo y cuya longitud representa el valor numérico o módulo de la misma. Depende de el desplazamiento, es decir, de los puntos inicial y final del movimiento, y no como la rapidez, que depende directamente de la trayectoria.
La velocidad puede definirse como la cantidad de espacio recorrido por unidad de tiempo con la que un cuerpo se desplaza en una determinada dirección y sentido. Se trata de un vector cuyo módulo, su valor numérico, se puede calcular mediante la expresión:
- v: Módulo de la velocidad del cuerpo. Su unidad de medida en el Sistema Internacional (S.I.) es el metro por segundo (m/s)
- ∆r: Módulo del desplazamiento. Su unidad de medida en el Sistema Internacional (S.I.) es el metro (m)
- ∆t: Tiempo empleado en realizar el movimiento. Su unidad de medida en el Sistema Internacional (S.I.) es el segundo (s)
En el caso de los coches de la figura anterior, por ejemplo, parten y llegan a la vez a la meta. Aunque la velocidad de los dos es la misma (concepto vectorial de la velocidad), A ha recorrido mayor espacio en el mismo tiempo y, por tanto, su celeridad es mayor que B.
En la gráfica se muestra la trayectoria que sigue un cuerpo a lo largo del tiempo.
Pero ¿No estábamos hablando de la Velocidad a la que se mueve el Tiempo?
¿Qué dicen algunos?
“Que el tiempo no tiene velocidad en absoluto. El tiempo tiene una velocidad de 1 segundo sobre segundo. El tiempo se ve influido por la gravedad, lo que nos da la ilusión de movimiento, pero no es una cosa, no se “mueve” y aquello de que los agujeros negros “detienen” el tiempo es una especulación no comprobada. Lo que se mueve somos nosotros, nuestros cuerpos.”
Además de la velocidad, la dilatación del tiempo depende de la altura, explica el físico. Comparativamente, el tiempo transcurre más rápido mientras más arriba se esté. “Cuanto más cerca se está del centro de un planeta, más lento transcurre el tiempo. Pero siempre es un efecto relativo”.
Y cuanto más fuerte es la gravedad, mayor es su capacidad de curvar el espacio y el tiempo. Cuanto más se curva el espacio-tiempo, más lento fluye el tiempo. Sin embargo, en cuanto escapamos de la gravedad terrestre, donde hay una gravedad más débil, el tiempo correrá más rápido.
Pero vamos al tema que nos preocupa, ya que, lo cierto es que, como no sabemos contestar la pregunta planteada: ¿A qué velocidad se mueve el Tiempo? damos vueltas y más vueltas tratando de explicar lo lo que no podemos explicar. Así ha sido siemp0re.
A que va a resultar que PASADO, PRESENTE Y FUTURO es una ilusión llamada Tiempo?
Claro que, si el Tiempo no existe y solo es una abstracción de la Mente… ¿Por qué se deterioran las cosas? Lo vemos a nuestro alrededor, nada perdura, y, como decía el sabio:
¡…Y, con el paso de los Eones, hasta la misma muerte tendrá que morir!
Tendréis que preguntar a otro, que más listo que yo, os pueda explicar lo que el Tiempo es, y, a qué velocidad se mueve.
Al menos hay que reconocer que os habéis entretenido un buen rato, y, también habéis tenido un motivo para pensar.. Estos ejercicios mentales nos mantiene con la Mente limpia y dispuesta a intentar saber el por qué de las cosas.
Emilio Silvera V.
Ago
13
¿El núcleo del átomo? ¡Una maravilla de la Naturaleza!
por Emilio Silvera ~ Clasificado en El núclo atómico ~ Comments (1)
En tan minúscula superficie están presentes y se produce sucesos increíbles
Las partículas del núcleo atómico. Protón y Neutrón (sin olvidar los tripletes de Quarks que los constituyen y los Bosones intermediarios de la fuerza nuclear fuerte (Los Gluones)
En 1920 (Rutherford) descubrió las partículas positivas que forman los átomos, los protones. El experimento de Rutherford consistió en estudiar la dispersión de partículas alfa (núcleos de helio) al impactar con una lámina de oro. Rutherford realizó este experimento de dispersión de partículas para estudiar la validez del modelo atómico de Thomson, que descubrió el electrón y fue mentor de Ernest Rutherford.
Su carga eléctrica es la misma que la de los electrones, pero positiva, y su masa es semejante a la del átomo de hidrógeno (recuerda que la masa de los electrones es 1836 menor que la del átomo de hidrógeno. LLamó a estas partículas positivas protones.
Por lo tanto en los núcleos de los átomos hay unas partículas positivas que se llaman protones. En el hidrógeno solo hay una partícula ya que recordemos su masa era casi la misma.
Se comprobó que el número de protones es una característica especial de cada elemento químico, ya que todos los átomos del mismo elemento tienen el mismo número de protones. Se llama número atómico (Z) al número de protones que tienen los átomos de un elemento químico. A cada elemento químico le corresponde un número atómico desde 1 hasta 106.
Todavía tenemos que buscar otras partículas en el núcleo atómico. La masa de los protones de un núcleo es mucho menor que la masa del núcleo.
Cada elemento químico se caracteriza por el número de protones de su núcleo, que se denomina número atómico (Z). Así, el hidrógeno ( 1H) tiene un protón, el carbono ( 6C) tiene 6 protones y el oxígeno ( 8O) tiene 8 protones en el núcleo.
El número de neutrones del núcleo puede variar. Casi siempre hay tantos o más neutrones que protones. La masa atómica(A) se obtiene sumando el número de protones y de neutrones de un núcleo determinado.
Un mismo elemento químico puede estar constituído por átomos diferentes, es decir, sus números atómicos son iguales, pero el número de neutrones es distinto. Estos átomos se denominan isótopos del elemento en cuestión. Isótopos significa “mismo lugar“, es decir, que como todos los isótopos de un elemento tienen el mismo número atómico, ocupan el mismo lugar en la Tabla Periódica.
Isótopos del Hidrógeno
Isótopos del Carbono
Desde 1918 estaba probado que existían los isótopos. Estos, eran átomos que tenían propiedades químicas iguales (parecían elementos iguales, por tanto), tenían el mismo número atómico, pero sus masas atómicas eran diferentes. En el núcleo debían existir partículas neutras que contribuyeran a la masa pero no tuvieran carga eléctrica.
La curiosidad acerca del tamaño y masa del átomo atrajo a cientos de científicos durante un largo período en el que la falta de instrumentos y técnicas apropiadas impidió lograr respuestas satisfactorias. Con posterioridad se diseñaron numerosos experimentos ingeniosos para determinar el tamaño y peso de los diferentes átomos.
El átomo más ligero, el de hidrógeno, tiene un diámetro de aproximadamente 10-10 m (0,0000000001 m) y una masa alrededor de 1,7 x 10-27 kg (la fracción de un kilogramo representada por 17 precedido de 26 ceros y una coma decimal).
Como no es el objeto del trabajo, no hablaremos hoy de los Quarks, y, simplemente diremos que en la naturaleza no se encuentran quarks aislados. Estos siempre se encuentran en grupos, llamados Hadrones. de dos o tres quarks, conocidos como mesones y bariones respectivamente. Esto es una consecuencia directa del confinamiento de color. En el año 2003 se encontró evidencia experimental de una nueva asociación de cinco quarks, los Pentaquarks, cuya evidencia, en principio controvertida , fue demostrada gracias al Colisionador de Partículas LHC en el pasado Julio de 2.015.
Pero sigamos con lo que nos ocupa y veamos que los Quarks están confinados dentro de los nucleones (protones y neutrones) donde la fuerza fuerte les retiene y nos los deja que se vayan alejando más de lo debido como se explica en el cuadro de arriba.
Dentro del nucleo se desatan las fuerzas de la Naturaleza, la que conocemos como fuerza nuclear fuerte, la más potente de las cuatro fuerzas fundamentales que, intermediada por otras partículas de la familia de los Bosones, los Gluones, no dejan que los Quarks se alejen y son retenidos allí, dentro de los nucleones donde tienen su función de conformar los hadrones másicos del núcleo que le aporta la materia al átomo.
Los Gluones, son las partículas intermediarias de la fuerza fuerte, y, de la misma manera, existen otros Bosones encargados de mediar en las otras fuerzas conocidas de la Naturaleza: El Fotón para los fenómenos electromagnéticos, el Gravitón (no encontrado aún) para la fuerza de Gravedad, y, los W+, W–y Zº para la fuerza nuclear débil. Los Gluones se encargan de la fuerza nuclear fuerte para el que el núcleo del átomo sea posible
Lo cierto es que, el núcleo atómico está cargado positivamente y, tal carga, hace la llamada para que, un enjambre de electrones, con cargas negativas, vengan a rodear el núcleo atómico y, de esa manera, queda estabilizado el átomo, ese pequeño objeto que conforma todas las cosas hechas de materia.
Así, los electrones que rodea el núcleo, con su carga eléctrica negativa que complementa la positiva de los protones y hace estable al átomo; una masa de solamente 1/1.836 de la del núcleo más ligero (el del hidrógeno). Y, sin embargo, la importancia del electrón es vital en el universo.
Repasando todo esto, no puedo dejar de recordar aquellas palabras que el físico Freeman Dyson escribió:
“Cuando miramos en el universo e identificamos los muchos accidentes de la física y la astronomía que han colaborado en nuestro beneficio, casi parece que el universo debe haber sabido, en cierto sentido, que nosotros íbamos a venir“.
Fijaros en el hecho cierto de que, si la carga del electrón, o, la masa del protón, variaran aunque sólo fuese una diezmillonésima parte… ¡La vida no podría existir en el Universo! Estamos hechos de átomos y, con tal cambio, éstos nunca se habrían podido conformar.
Emilio Silvera V.
Ago
13
¡Singularidad! ¿Qué es eso?
por Emilio Silvera ~ Clasificado en General ~ Comments (36)
El concepto mismo de “singularidad” desagradaba a la mayoría de los físicos, pues la idea de una densidad infinita se alejaba de toda comprensión. La naturaleza humana está mejor condicionada a percibir situaciones que se caracterizan por su finitud, cosas que podemos medir y pesar, y que están alojadas dentro de unos límites concretos; serán más grande o más pequeñas pero, todo tiene un comienzo y un final pero… infinito, es difícil de digerir. Además, en la singularidad, según resulta de las ecuaciones, ni existe el tiempo ni existe el espacio. Parece que se tratara de otro universo dentro de nuestro universo toda la región afectada por la singularidad que, eso sí, afecta de manera real al entorno donde está situada y además, no es pacífica, ya que se nutre de cuerpos estelares circundantes que atrae y engulle.
Arriba (derecha) un agujero negro engulle una estrellas, según transmiten o indican las emisiones de rayos Gamma.
La noción de singularidad empezó a adquirir un mayor crédito cuando Robert Oppenheimer, junto a Hartlan S. Snyder, en el año 1.939 escribieron un artículo anexo de otro anterior de Oppenheimer sobre las estrellas de neutrones. En este último artículo, describió de manera magistral la conclusión de que una estrella con masa suficiente podía colapsarse bajo la acción de su propia gravedad hasta alcanzar un punto adimensional; con la demostración de las ecuaciones descritas en dicho artículo, la demostración quedó servida de forma irrefutable que una estrella lo suficientemente grande, llegado su final al consumir todo su combustible de fusión nuclear, continuaría comprimiéndose bajo su propia gravedad, más allá de los estados de enana blanca o de estrella de neutrones, para convertirse en una singularidad.
Los cálculos realizados por Oppenheimer y Snyder para la cantidad de masa que debía tener una estrella para terminar sus días como una singularidad estaban en los límites másicos de M =~ masa solar, estimación que fue corregida posteriormente por otros físicos teóricos que llegaron a la conclusión de que sólo sería posible que una estrella se transformara en singularidad, la que al abandonar su fase de gigante roja retiene una masa residual como menos de 2 – 3 masas solares.
La figura representa a la nube de polvo en colapso de Oppenhieimer y Snyder, que ilustra una superficie atrapada
El modelo de Oppenhieimer y Snyder posee una superficie atrapada, que corresponde a una superficie cuya área se irá reduciendo a lo largo de los rayos de luz que son inicialmente ortogonales a ella.
El modelo de Oppenhieimer y Snyder posee una superficie atrapada, que corresponde a una superficie cuya área se iOppenheimer y Snyder desarrollaron el primer ejemplo explícito de una solución a las ecuaciones de Einstein que describía de manera cierta a un agujero negro, al desarrollar el planteamiento de una nube de polvo colapsante. En su interior, existe una singularidad, pero no es visible desde el exterior, puesto que está rodeada de un horizonte de suceso que no deja que nadie se asome, la vea, y vuelva para contarlo. Lo que traspasa los límites del horizonte de sucesos, ha tomado el camino sin retorno. Su destino irreversible, la singularidad de la que pasará a formar parte.
El Teorema de Singularidad de Penrose de 1.965
“Einstein falleció el 18 de abril de 1955, junto un mes antes de la publicación del primer teorema de singularidad de Raychaudhuri (1955). La hipótesis clave es lo que hoy llamamos condición fuerte para la energía para Λ=0, es decir, Rρνuρuν ≥ 0, donde Rρν es el tensor de Ricci y uρ es un campo vectorial geodésico (las velocidades de partículas que se mueven a lo largo de geodésicas). Bajo dicha hipótesis, una distribución de polvo irrotacional (con tensor momento-energía Tµν = ρ uµuν, donde ρ es la densidad y la presión p=0), aparece un efecto de enfoque de las geodésicas que lleva a que se alcance una densidad infinita, ρ → ∞, en el futuro (pasado) de todo punto que cumpla ∇µuµ < 0 (∇µuµ > 0). Komar (1956) y Raychaudhuri (1957) generalizaron dicho resultado para un fluido ideal con Tµν = ρ uµuν + p (gµν + uµuν).
Desde entonces, muchos han sido los físicos que se han especializado profundizando en las matemáticas relativas a los agujeros negros. John Wheeler (que los bautizó como agujeros negros), Roger Penrose, Stephen Hawking, Kip S. Thorne, Kerr y muchos otros nombres que ahora no recuerdo, han contribuido de manera muy notable al conocimiento de los agujeros negros, las cuestiones que de ellas se derivan y otras consecuencias de densidad, energía, gravedad, ondas gravitacionales, etc, que son deducidas a partir de estos fenómenos del cosmos.”
Fuente: La ciencia de la Mula Francis
Sigamos
Se afirma que las singularidades se encuentran rodeadas por un horizonte de sucesos, pero para un observador, en esencia, no puede ver nunca la singularidad desde el exterior. Específicamente implica que hay alguna región incapaz de enviar señales al infinito exterior. La limitación de esta región es el horizonte de sucesos, tras ella se encuentra atrapado el pasado y el infinito nulo futuro. Lo anterior nos hace distinguir que en esta frontera se deberían reunir las características siguientes:
- Debe ser una superficie nula donde es pareja, generada por geodésicas nulas;
- contiene una geodésica nula de futuro sin fin, que se origina a partir de cada punto en el que no es pareja, y que
- el área de secciones transversales espaciales jamás pueden disminuir a lo largo del tiempo.
Pueden existir agujeros negros supermasivos (de 105 masas solares) en los centros de las galaxias activas. En el otro extremo, mini agujeros negros con un radio de 10-10 m y masas similares a las de un asteroide pudieron haberse formado en las condiciones extremas que se dieron poco después delBig Bang. Diminutos agujeros negros podrían ser capaces de capturar partículas a su alrededor, formando el equivalente gravitatorio de los átomos.
Todo esto ha sido demostrado matemáticamente por Israel, 1.967; Carter, 1.971; Robinson, 1.975; y Hawking, 1.978 con límite futuro asintótico de tal espacio-tiempo como el espacio-tiempo de Kerr, lo que resulta notable, pues la métrica de Kerr es una hermosa y exacta formulación para las ecuaciones de vacío de Einstein y, como un tema que se relaciona con la entropía en los agujeros negros.
No resulta arriesgado afirmar que existen variables en las formas de las singularidades que, según las formuladas por Oppenheimer y su colaborador Snyder, después las de Kerr y más tarde otros, todas podrían existir como un mismo objeto que se presenta en distintas formas o maneras.
Ahora bien, para que un ente, un objeto o un observador pueda introducirse dentro de una singularidadcomo un agujero negro, en cualquiera que fuese su forma, tendría que traspasar el radio de Schwarzschild (las fronteras matemáticas del horizonte de sucesos), cuya velocidad de escape es igual a la de la luz, aunque esta tampoco puede salir de allí una vez atrapada dentro de los límites fronterizos determinados por el radio. Este radio de Schwarzschild puede ser calculado usándose la ecuación para la velocidad de escape:
Para el caso de fotones u objeto sin masa, tales como neutrinos, se sustituye la velocidad de escape por la de la luz c2. “En el modelo de Schrödinger se abandona la concepción de los electrones como esferas diminutas con carga que giran en torno al núcleo, … Es cierto que en mecánica cuántica quedan muchos enigmas por resolver. Pero hablando de objetos de grandes masas, veamos lo que tenemos que hacer para escapar de ellos.
Podemos escapar de la fuerza de gravedad de un planeta pero, de un A.N., será imposible.
La velocidad de escape está referida a la velocidad mínima requerida para escapar de un campo gravitacional. El objeto que escapa puede ser cualquier cosa, desde una molécula de gas a una nave espacial. Como antes he reflejado está dada por , donde G es la constante gravitacional, M es la masa del cuerpo y R es la distancia del objeto que escapa del centro del cuerpo del que pretende escapar (del núcleo). Un objeto que se mueva a velocidad menor a la de escape entra en una órbita elíptica; si se mueve a una velocidad exactamente igual a la de escape, sigue una órbita parabólica, y si el objeto supera la velocidad de escape, se mueve en una trayectoria hiperbólica.
Así hemos comprendido que, a mayor masa del cuerpo del que se pretende escapar, mayor será la velocidad que necesitamos para escapar de él. Veamos algunas:
Objeto |
Velocidad de escape |
La Tierra |
………….11,18 Km/s |
El Sol |
………….617,3 Km/s |
Júpiter |
………….59,6 Km/s |
Saturno |
………….35,6 Km/s |
Venus |
………….10,36 Km/s
|
Agujero negro |
…….+ de 299.000 Km/s |
Como se ve en el cuadro anterior, cada objeto celeste, en función de su masa, tiene su propia velocidad de escape para que cualquier cosa pueda salir de su órbita y escapar de él. El caso de la singularidad, es decir, la inmensa masa que está presente en las entrañas de un Agujero negro, genera una fuerza de gravedad tal que, nada está a salvo en sus inmediaciones, cualquier objeto, sea estrella, polvo estelar, planeta o lo que pudiera ser, será engullido por el “monstruo”, sin que nada pueda evitarlo.
La excepción está en el último ejemplo, la velocidad de escape necesaria para vencer la fuerza de atracción de un agujero negro que, siendo preciso superar la velocidad de la luz 299.792’458 Km/s, es algo que no está permitido, ya que todos sabemos que conforme determina la teoría de la relatividadespecial de Einstein, la velocidad de la luz es la velocidad límite en nuestro universo; nada puede ir más rápido que la velocidad de la luz, entre otras razones porque el objeto sufriría la transformación de Lorentz y su masa sería infinita.
Podría continuar explicando otros aspectos que rodean a los agujeros negros, pero estimo que el objetivo que perseguía de hacer conocer lo que es un agujero negro y el origen del mismo, está sobradamente cumplido.
Existen aspectos del A.N. que influyen en el mundo cuántico.
Crean una simulación en realidad virtual de un agujero negro
que equivale a unos 10-³³ centímetros. Esta distancia se conoce como longitud de Planck y es la única unidad de distancia que se puede construir con las tres constantes fundamentales de la naturaleza: G, h y c. La longitud de Planck es tan extremadamente pequeña (10²° veces menor que el radio de un electrón) que debe ser la distancia característica de otro nivel de la naturaleza, subyacente al mundo subatómico, donde rigen las leyes aún desconocidas de la gravedad cuántica.
Así como el océano presenta un aspecto liso e inmóvil cuando se observa desde una gran distancia, pero posee fuertes turbulencias y tormentas a escala humana, el espacio-tiempo parece “liso” y estático a gran escala, pero es extremadamente turbulento en el nivel de la longitud de Planck, donde los hoyos negros se forman y evaporan continuamente. En el mundo de Planck, las leyes de la física deben ser muy distintas de las que conocemos hasta ahora.
¿Qué puede haber más allá de la Longitud de Planck?
La estructura macroscópica del espacio-tiempo parece plana, pero éste debe ser extremadamente turbulento en el nivel de la escala de Planck. Escala en la que parece que entramos en otro mundo… ¡El de la mecánica cuántica! que se aleja de ese mundo cotidinao que conocemos en el que lo macroscópico predomina por todas partes y lo infinitesimal no se deja ver con el ojo desnudo.
¡Existen tantos secretos! ¡Es tan grande nuestra ignorancia!
El texto tiene su origen en distintas fuentes pero, destaco las ideas de Kip Thorne
Publica: emilio silvera
Ago
12
Curiosas historias
por Emilio Silvera ~ Clasificado en General ~ Comments (0)
¿Un mito?
La secuenciación genética revela que los chimpancés y los humanos son “muy próximos y a la vez lejanos”
Un equipo internacional de científicos ha secuenciado el código genético del chimpancé, nuestro pariente vivo más cercano y lo ha comparado con el genoma humano. La comparación pone de manifiesto que la secuencia del ADN de las dos especies es en un 99 por ciento idéntica.
Hace más de un siglo que Darwin y Huxley sugirieron que los humanos comparten ancestros comunes recientes con los grandes simios de África. La predicción se confirmó a través de estudios moleculares modernos que perfilaron aún más las relaciones, demostrando que el chimpancé común (Pan troglodytes) y el bonobo (Pan paniscus o chimpancé enano) son los parientes evolutivos vivos más próximos a los humanos.
Hace apenas unos pocos años la supuesta existencia de Nibiru causó verdadero temor entre muchas personas de todo el mundo.
La angustia por cómo será nuestro final, como especie, despierta una imaginación que, al parecer, no descarta ningún escenario. Así, pues, los ejemplos abundan. No obstante, el que retomamos ahora es uno que atemoriza por su magnitud y poder para borrar todo lo que conocemos de forma violenta y rápida. El protagonista es Nibiru, un presunto planta cuyo destino sería colisionar contra Tierra.
Hace apenas unos pocos años la supuesta existencia de Nibiru causó verdadero temor entre muchas personas de todo el mundo.
La angustia por cómo será nuestro final, como especie, despierta una imaginación que, al parecer, no descarta ningún escenario. Así, pues, los ejemplos abundan. No obstante, el que retomamos ahora es uno que atemoriza por su magnitud y poder para borrar todo lo que conocemos de forma violenta y rápida. El protagonista es Nibiru, un presunto planta cuyo destino sería colisionar contra Tierra.
el libro El 12.º planeta narra la llegada de los anunnakis a la Tierra procedentes de un supuesto planeta llamado Nibiru hace unos 450 000 años: seres altos de unos 3 metros de altura de piel blanca, cabellos largos y barba, quienes se habrían asentado en Mesopotamia (actual
Lo cierto es que, de leyendas nunca confirmadas esta nuestra historia llena, y, cuando se me cruza alguno de estos mitos, me acuerdo de aquel estribillo que, en relación al Futuro desconocido, siempre dejaba la cosa en su lugar:
- Mi abuelo tiene un cabrito
- Dice que lo va a matar
- Del pellejo hará un pandero
- Lo que sea sonará-
Ago
12
Estamos tratando de recrear la creación
por Emilio Silvera ~ Clasificado en General ~ Comments (1)
Como es habitual, repasando boletines y revistas de la Real Sociedad Española de Física. Entre otras muchas noticias, me ha llamado la atención una que dice:
“Europa construirá un acelerador tres veces mayor que el LHC. Aunque el LHC seguirá funcionando por lo menos durante dos décadas más, Europa ya empieza a pensar en su sucesor: un enorme colisionador con una circunferencia de 100 km (frente a los 27 del LHC) y capaz de alcanzar una energía de 100 TeV, siete veces superior a los 14 TeV a los que puede llegar, como máximo, el LHC. Tras alcanzar el hito de detectar el bosón de Higgs.
Cuando salió esta noticia, el LHC estaba apagado para llevar a cabo tareas de mantenimiento y no volvería a funcionar hasta meses más tarde. El Modelo Estándar incluye a todos los componentes fundamentales de la materia ordinaria pero no dice nada de la “materia oscura” ni de la “energía oscura”.
Pero… ¿Existen en realidad la Materia y la Energía oscura? Hablan de ellas como si realmente estuvieran ahí, en el inmenso universo. A veces me da la sensación que son inventos que cubren la ignorancia de los cosmólogos que tratan de normalizarlas diciento cosas como estas:
No se debe confundir la energía oscura con la materia oscura, ya que, aunque ambas forman la mayor parte de la masa del universo, la materia oscura es una forma de materia, mientras que la energía oscura se asocia a un campo que ocupa todo el espacio.
“Tenemos muchas esperanzas de que cuando el LHC funcione de nuevo a su máximo nivel de energía podamos tener un primer atisbo de lo que es la “materia oscura”. Y a partir de ahí determinar los objetivos del próximo gran colisionador”, decía el Director del CERN.”
Diseñaron un nuevo experimento para localizar la “materia oscura”
“El CERN aprobó un nuevo experimento diseñado para buscar partículas ligeras y de interacción débil, asociadas con la elusiva “materia oscura”, en el Gran Colisionador de Hadrones (LHC)”
Digamos que hasta el momento, todos los esfuerzos han sido vanos, no han hallado el menor indicio de la hipotética “materia oscura”, si es que finalmente se comprueba que realmente existe.
Nuestra imaginación no descansa y construimos escenarios en nuestras mentes que podrían ser, y, la única manera de comprobar esas ideas es la de intentar confirmarlas con experimentos y observación.
Está bien que no dejemos de avanzar y sigamos buscando aquello que desconocemos. La Naturaleza esconde muchos secretos que tratamos de desvelar y, la hipotética “materia oscura” es uno de ellos. Hablamos y hablamos sobre algo que no sabemos si será. Tampoco sabemos de que pueda estar conformada, de dónde surgió y por qué, si emite o genera fuerza gravitatoria no emite radiación. En fin, un misterio que sería bueno resolver.
¡100 TeV! ¡100 Km de diámetro!
Si cuando se acercaba la hora de la puesta en marcha del LHC salieron múltiples organizaciones planteando protestas de todo tipo, incluso alguna se atrevió a decir que el Acelerador tenía tanta energía que crearía un agujero negro que se tragaría a la Tierra. ¿Qué dirán ahora del futuro Acelerador? Seguramente, habrá mucha más algarabía, protestas y un sin fin de manifestaciones de todo tipo. Sin embargo, el futuro… ¡Es imparable!
Si nos retrotraemos en el Tiempo… ¡El asombro por lo logrado será grande!
A estas alturas pocas dudas podemos tener de que nuestra especie viaja desde el Pasado hacia el Futuro pasando por un inquieto Presente que trata de preparar el camino a los que vendrán de la misma manera que Demócrito y Empédocles balbucearon sobre el átomo y los elementos, ahora nosotros lo hacemos sobre cuerdas, materia oscura, universos paralelos y otros posibles escenarios que podrían ser confirmados.
Algunas veces el entusiasmo por alcanzar logros científicos nos puede poner en difíciles situaciones, la Ciencia debe tener un exquisito cuidado con lo que hace, no puede aventurarse a correr riesgos que, incluso, podrían destruir a la propia especie.
El futuro colisonador será cuatro veces más grande y diez veces más potente que el actual LHC, parece oportuno volver a preguntarse por la seguridad de esas gigantescas máquinas, las mayores jamás construidas por el hombre, capaces de triturar los componentes de la materia y de reproducir condiciones que no se conocían en el Universo desde el mismísimo Big Bang.
“Científicos han logrado la primera medición de una propiedad mecánica en partículas subatómicas: han medido la distribución de presión en el interior de un protón.”
“El modelo estándar de la física, el marco teórico usado por los científicos para explicar el comportamiento de la materia, dice que existen cuatro fuerzas o interacciones fundamentales: la nuclear fuerte, la electromagnética, la nuclear débil y la gravitatoria. La fuerza nuclear fuerte es, como su nombre indica, la más potente. Es capaz de mantener unidos a protones y neutrones, que se encuentran en el núcleo de los átomos, incluso a pesar de que los primeros tienen carga positiva y se repelen entre sí. Se puede decir que la fuerza nuclear fuerte es el pegamento que mantiene unidos los núcleos de los átomos, pero esta fuerza tiene una peculiaridad: su rango de acción es muy pequeño y a mayores escalas es superada por las otras interacciones.” ABC – Ciencia)
“Las estrellas de neutrones tienen densidades totales de 3,7×1017 a 5,9×1017 kg/m3 (de 2,6×1014 a 4,1×1014 veces la densidad del Sol), comparable con la densidad aproximada de un núcleo atómico de 3×1017 kg/m3. La densidad de una estrella de neutrones varía desde menos de 1×109 kg/m3 en la corteza, aumentando con la profundidad a más de 6×1017 u 8×1017 kg/m3 aún más adentro (más denso que un núcleo atómico). Esta densidad equivale aproximadamente a la masa de un Boeing 747 comprimido en el tamaño de un pequeño grano de arena.”
Volviendo al futuro colisionador, no son pocos los que creen que su puesta en marcha a esas energías de 100 TeV, se podrían producir agujeros negros que comenzarían a tragarse todo lo que tenga a su alrededor, iría creciendo más y más y, finalmente, se tragaría la Tierra entera.
Aunque parece conveniente no dejar de avanzar, así lo aconseja el futuro que nos espera con la “muerte” del Sol, también es cierto que falta mucho para que ese suceso comience su proceso (al menos 1.000 millones de años para que el Sol comience su proceso hacia estrella Gigante roja). Así que, en ese Tiempo, debemos trabajar en la buena dirección y tener en cuenta los riegos a los que nunca nos debemos exponer para provocar que seamos nosotros mismos los que iniciemos la propia destrucción.
Los peligros que nos asechan no son todos artificiales, algunos los provocan la Naturaleza misma
Otros podrían estar provocados por nuestra propia ambición sin límites de crear lo imposible, seres artificiales que tenga conciencia de Ser. Serían más fuertes e inteligentes que nosotros, no necesitaran comer ni dormir, no les afecta la radiación del espacio, nos superan en fuerza, no tienen enfermedades….
¿Para que nos necesitarían?
¿Ciencia? SÍ, siempre que se pongan algunos límites que nos preserven de consecuencias irreversibles,
Emilio Silvera V.