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El Futuro está a la vuelta de la esquina

Autor por Emilio Silvera    ~    Archivo Clasificado en General    ~    Comentarios Comments (1)

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El primer ordenador cuántico comercial de IBM en Europa se ha instalado en el instituto alemán Fraunhofer-Gesellschaft.

 

“La hoja de ruta de IBM en este área recoge que para este 2022 está previsto lanzar, como adelantaba antes, el sistema Osprey de 433 cúbits y en 2023 el Condor de más de 1.100 cúbits, ¿cuáles son los principales desafíos que se resolverán? ¿Cómo es posible que se escale tan rápido?”

Zaira Nazario, líder técnico de teoría y aplicaciones cuánticas en IBM Quantum.

Zaira Nazario, líder técnico de teoría y aplicaciones cuánticas en IBM Quantum.

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Zaira Nazario (Puerto Rico) es física teórica y comenzó a trabajar en computación cuántica hace más de una década. Desde 2017 forma parte del equipo de investigadores de una de las grandes tecnológicas con más recorrido: la centenaria IBM.

Con los teóricos de IBM Quantum se dedica, desde hace casi cinco años, a “entender y desarrollar lo que necesitamos para ver las ventajas de la computación cuántica: aplicaciones, algoritmos, mitigación y corrección de errores…”, cuenta a D+I desde el BM T.J. Watson Research Center de Nueva York (Estados Unidos).

En la entrevista con este medio también confirma que trabaja con el vicepresidente sénior de IBM y director de IBM Research, el español Darío Gil, “en varios aspectos técnicos y científicos de la organización”

Antes de recalar en el ‘Gigante Azul’, Nazario pasó por el Instituto Max Planck para la Física de Sistemas Complejos en Dresde (Alemania). También trabajó formando y gestionando programas de investigación y desarrollo de computación cuántica para Departamento de Estado de EE. UU. y las agencias estadounidenses DARPA (Defense Advanced Research Projects Agency) e IARPA (Intelligence Advanced Research Projects Activity), “lo cual implicaba trabajar con los grupos líderes de computación cuántica a nivel mundial”.

“Siempre me interesó mucho el tema de los errores en las operaciones cuánticas y cómo detectarlos y corregirlos“, confiesa. Y fue así cómo comenzó a trabajar más de cerca con el grupo de IBM.

Ensamblado de IBM Quantum System One.

Ensamblado de IBM Quantum System One. IBM Omicrono

 

Con la experiencia acumulada en su trayectoria profesional, ¿varía mucho el trabajo de investigación en un organismo público al que se realiza en una empresa privada?

Hay semejanzas y diferencias, principalmente en el ambiente en el que trabajas y la filosofía. Un lugar como el Max Planck es increíblemente rico en colaboraciones y variedad de áreas, debido a la cantidad de científicos internacionales que pasan largos periodos de tiempo colaborando y la libertad de la que se disfruta en la investigaciones.

En agencias de gobierno y laboratorios nacionales se tienen más en cuenta los intereses del colectivos por encima de las investigaciones individuales, y eso está presente siempre.

La investigación versa sobre cómo beneficiar a una nación y sacar el mayor provecho de la inversión de los contribuyentes. La investigación en una compañía privada está más enfocada hacia aspectos con potencial comercial alineados con la estrategia y misión de la empresa.

¿Qué ha aprendido de su paso por el sector público que ahora está aplicando a una empresa privada?

Agencias como DARPA e IARPA en el sector público no sólo están cómodas en un entorno con más riesgo, sino que su propósito es apostar por cosas con un potencial muy grande y tan inciertas que muy pocas son exitosas. pero las que lo son traen beneficios enormes. Buscan, además, reducir la burocracia todo lo posible. Esa es la primera lección, eliminar burocracias innecesarias y no tener una visión ‘miope’ por culpa de la aversión al riesgo.

Haber trabajado en el sector público me lleva a desarrollar tecnología que derive en el mayor beneficio para los usuarios y el mayor valor económico posibles.

Otras lecciones que se aprende son, por ejemplo, pensar sobre las consecuencias de las cosas en lugar de tener una creencia más propia del sector privado, que sigue la filosofía de ‘move fast and break things’; trabajar óptimamente en ambientes inciertos; el arte del compromiso —o no— en los momentos apropiados en beneficio de lograr una visión; el arte de la comunicación, tanto oral como escrita.

Además, haber trabajado en el sector público me da una perspectiva valiosa que me lleva a buscar cómo la tecnología que estamos desarrollando derive en el mayor beneficio para los usuarios y el mayor valor económico posibles. Esto es algo que es fundamental en el sector público, donde eres responsable de qué se hace con el dinero de los contribuyentes.

Su área de especialización es la computación cuántica, ¿en qué punto está esta tecnología? ¿Por qué es necesario su desarrollo?

La computación cuántica está en una etapa de desarrollo relativamente temprana, pero ha evolucionado muchísimo en los últimos años y está avanzando rápidamente. En 2016, cuando pusimos en la nube el primer procesador cuántico, era de apenas 5 cúbits. Hoy día tenemos un procesador de 127 cúbits y este año lanzaremos uno de 433 cúbits.

En términos de calidad de operaciones, hemos alcanzado el nivel de un error por cada 1.000 operaciones cuánticas en sistemas de docenas de cúbits. Hemos mejorado la velocidad de ejecución de simulaciones cuánticas en nuestros sistemas hasta hacerla, en algunos casos, más de 100 veces más rápida.

La cuántica es una tecnología transformadora. Se trata de un paradigma de computación fundamentalmente diferente y sin analogía clásica.

Para dar una idea de lo que significa todo esto, existe una indicación teórica que señala que, con varios cientos de cúbits capaces de operar con solo un error por cada 10.000 operaciones cuánticas, podemos simular sistemas físicos con una ventaja cuántica sobre la computación tradicional.

Esto es una tecnología transformadora. No se trata de una mejoría incremental en computación, de cómo añadir más transistores o multiplicar el clock-speed. Se trata de un paradigma de computación fundamentalmente diferente y sin analogía clásica.

Ese nuevo paradigma nos trae la promesa de resolver problemas.

Noticias de prensa.

 

  1. 1
    Shalafi
    el 24 de enero del 2022 a las 18:12

    Prueba de comentario

    Responder

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