viernes, 22 de noviembre del 2024 Fecha
Ir a la página principal Ir al blog

IMPRESIÓN NO PERMITIDA - TEXTO SUJETO A DERECHOS DE AUTOR




Nanopartículas

Autor por Emilio Silvera    ~    Archivo Clasificado en Física    ~    Comentarios Comments (6)

RSS de la entrada Comentarios Trackback Suscribirse por correo a los comentarios

El mundo evoluciona, nosotros también. La velocidad a la que se producen los cambios, adelantos y surgen los nuevos conocimientos, no siempre nos mantienen al día de cuestiones que, como esta que aquí ponemos hoy, son las que, en realidad, están dibujando el futuro de nuestra Humanidad, y, para estar al día de los acontecimientos, al menos hoy, aquí dejo una muestra:

Quizás, junto a los nanotubos de carbono, las nanopartículas representan los materiales que tienen una repercusión tecnológica más inmediata. Además de sus propiedades intrínsecas, las nanopartículas, debido a su pequeño tamaño, pueden convertirse en diminutos dispositivos capaces de realizar otras funciones, como transportar un medicamento específico por el torrente sanguíneo sin obstruirlo. Para lograr esto, las nanopartículas deben ser el soporte de capas de moléculas autoensambladas que confieren una funcionalidad adicional a las mismas.

Como su propio nombre indica, el término “nanopartícula” designa una agrupación de átomos o moléculas que dan lugar a una partícula con dimensiones nanométricas. Es decir, que su tamaño está comprendido entre 1 y 100 nm. Dependiendo de cuáles sean los átomos o moléculas que se agrupan se originarán diferentes tipos de nanopartículas. Así, por ejemplo, tendremos nanopartículas de oro, de plata o nanopartículas magnéticas si están formadas por átomos de Fe o Co. Su pequeño tamaño hace que la relación superficie/volumen  crezca y por tanto que estas estructuras tengan unas propiedades características y esencialmente distintas a las que presenta el material en volumen.

Una estrategia para la formación de nanopartículas es recubrirlas con distintas capas de manera tal que cada una aporte funcionalidades diferentes al sistema. Así, por ejemplo, recientemente se han descrito nanopartículas cuyo interior está formado por un material magnético, como el Co, seguido de una capa intermedia del SiO₂ que aporta estabilidad al sistema y finalmente una superficie de oro. El tamaño final de la nanopartícula es de 3 nm, y esta estructura lamina hace que tengan un núcleo magnético que posibilite su guiado, y una superficie de oro que facilite el autoensamblado de moléculas orgánicas o biológicas para diferentes aplicaciones. Entre éstas destaca su uso como biosensores. Para ello se inmoviliza material biológico, como ácido desoxirribonucleico (ADN) o el llamado ácido nucleico péptidico (PNA, del inglés peptide nucleic acid), que siendo un ácido nucleico artificial, presenta un “esqueleto” molecular formado por enlaces peptidicos y una estructura de bases nucleicas exactamente igual a la del ADN. El PNA puede reconocer cadenas complementarias de ADN, incluso con mayor eficiencia para la hibridación que la que presenta el ADN para reconocer su hebra complementaria. Por este motivo, el PNA se ha propuesto como sonda para la fabricación de biosensores altamente eficientes. Estas macromoléculas unidas a superficies o nanopartículas son capaces de detectar diferentes analítos de interés, particularmente otras moléculas biológicas.

Sin embargo, el concepto de nanopartícula debe concebirse en un sentido más amplio ya que no sólo puede estar basada en un núcleo inorgánico, pudiéndose sintetizar nanopartículas poliméricas. Yendo un poco más allá, una cápsida vírica puede entenderse como una nanopartícula hueca formada por una carcasa proteica. Esta cápsida vírica tiene dimensiones nanométricas y, en muchos casos, burla con facilidad las membranas celulares. Por esta razón este tipo de “nanopartículas”  se proponen para su uso en nanomedicina, y son el objeto de estudios básicos en los que las herramientas como los microscopios de fuerzas atómicas juegan un papel esencial. En particular, estas herramientas nos permiten caracterizar las propiedades mecánicas y las condiciones de ruptura de cápsidas víricas así como la forma en que dichas cápsidas se comportan ante, por ejemplo, cabios controlados de humedad.

Conclusiones.

En un discurso recientemente impartido en la Universidad Europea de Madrid, William F. Clinton, ex –Presidente de los EE.UU, afirmó que “el cometido del siglo XXI será salvar al mundo del cambio climático, regenerar la economía y crear empleo. El futuro más allá será la Nanotecnología y la biotecnología”. El propio W.F. Clinton fue el impulsor de la Iniciativa Nacional de Nanotecnología durante su mandato, convirtiendo durante los últimos 10 años a EE.UU. en el líder mundial en la generación de conocimientos básicos y aplicados en el ámbito de la Nanotecnología.

Nadie pone en duda las afirmaciones de W.F. Clinton sobre el papel de la Nanotecnología en nuestro futuro a medio y largo plazo, por lo que es imperativo estar suficientemente preparados para construir este nuevo paradigma científico. En el caso concreto de España, las dos últimas ediciones del Plan Nacional de I+D+I han encumbrado las investigaciones en Nanociencia y Nanotecnología a la categoría de Acción Estratégica. En la actualidad se están poniendo en marcha varios centros dedicados a Nanotecnología. Dichas iniciativas son producto, por lo general, de costosos impulsos puntuales, locales, dirigidos por científicos con iniciativa, pero no son fruto de una actuación de conjunto, planificada siguiendo una estrategia guiada por unos objetivos ambiciosos, en los que impera la coordinación y el uso eficiente de los recursos. La actual coyuntura económica no invita al optimismo a este respecto, por lo que sería necesario poner en marcha iniciativas que promuevan la adquisición de infraestructuras, la formación de técnicos, la coordinación entre centros emergentes, etc.

Otro punto sobre el que no hay que descuidarse tiene que ver con la formación, en todos los niveles educativos, en Nanotecnología. En este sentido son numerosas las universidades españolas que ofrecen cursos de master y/ o doctorado con contenidos relacionados con la Nanotecnología. Sin embargo, muchos de estos cursos tienen pocos estudiantes inscritos, al igual que ocurre con muchos estudios de grado relacionados con las ciencias básicas. La tarea de fascinar y atraer a nuestros jóvenes hacia la ciencia debe comenzar mucho antes. En este sentido, los conceptos inherentes a la Nanotecnología deben formar parte del conocimiento que debe llegar a los estudiantes de educación secundaria, como ocurre en países como Alemania, Finlandia, Taiwán, Japón, EE.UU., etc. Además, la Nanotecnología es una materia que causa cierta fascinación a los adolescentes por lo que puede ser un buen punto de partida para incentivar las vocaciones científicas. Esto ha sido una de las principales razones por la que los autores de este artículo junto con otros investigadores (Carlos Briones del Centro de Astrobiología y Elena Casero de la Universidad Autónoma de Madrid) accedieron a la petición de la fundación española de Ciencia y Tecnología (FECyT) para escribir una Unidad Didáctica de Ciencia y Tecnología. Dicho libro ya  se encuentra en todos los institutos españoles de educación secundaria y bachillerato, y se puede descargar desde la web de la FECyT. Esperemos que esta pequeña contribución, junto con otras de mayor calado que deben promoverse desde las diversas administraciones públicas, permita tomar la senda que nos lleve a medio plazo a tan ansiada sociedad basada en el conocimiento.

Fuente: Revista de la RSEF

 

  1. 1
    Sara
    el 17 de diciembre del 2010 a las 10:44

    Buenos días, Emilio. ¿En qué parte de la página de FECYT se puede descargar?
     
    Muchas gracias por la info!

    Responder
  2. 2
    emilio silvera
    el 17 de diciembre del 2010 a las 12:31

    Estimada Sara

    No te puedo contestar a eso, ya que, el libro me fue enviado en su  momento como colaborador en algunos de los trabajos de Física que se realizaron.

    De todas las maneras, simplemente con que entres en el sitio del FECYT y lo solicites, te fac ilitaran cuantos datos sean necesarios para que, de la manera oportuna, te hagas con el libro.

    Hy otros muchos trabajos de interés que también te podrían ser enviados si lo pides por correo.

    Un saludo cordial.

    Responder
  3. 3
    Sara
    el 17 de diciembre del 2010 a las 13:14

    Muchas gracias, Emilio.

    Responder
  4. 4
    emilio silvera
    el 18 de diciembre del 2010 a las 10:18

    A mandar, estimada amiga.

    Responder
  5. 5
    Andres Ruiz
    el 20 de diciembre del 2010 a las 16:44

    Estimado sr. Silvera:
    Acabo de conocer sublog, y o mucho me equivoco o voy a pasar muchos buenos ratos leyendolo.
    Aprovecho para pedirle un favor ¿sabe de alguna web donde esten recogidos todos los masters en nano tecnologia o nano ciencia existentes en España, en particular en Madrid?
    Muchas gracias por adelantado, un saludo.
     

    Responder
  6. 6
    emilio silvera
    el 21 de diciembre del 2010 a las 7:57

    Estimado señor Ruiz:
    La pregunta que me hace no la puedo contestar y, por mi parte, me nutro de la web de la Real Sociedad Española de Física que, me tiene al tanto de todos los adelantos en las distintas disciplinas, entre otras, las de nanotecnología, nanopartículas, plasma, nuevos materiales superconductores, la Física en todas sus vertientes, etc.
     
    Pero, seguro que por ahí tiene que haber sitios especializados que le hablen de lo que necesita.
    Aquí, de seguro que encontrará la respuesta a muchas de las preguntas que tiene sin contestar.
     
    Un saludo cordial.

    Responder

Deja un comentario



Comentario:

XHTML

Subscribe without commenting